EL PEQUEÑO ALEXIS NO ESTABA EN LA TUMBA

El profesor de derecho médico de San Petersburgo Vlatsheslav Popov pertenece a la comisión que investiga los restos de la familia del zar Nicolás II después de su exhumación de la tumba común de Yekaterinburgo, en los Urales rusos. La sorpresa fue mayúscula cuando en la tumba no se descubrieron restos del pequeño Alexis, sucesor del zar. Durante su investigación, Popov se encontró con tres hermanas de apellido Filatov en San Petersburgo, quienes aseguran que su recientemente fallecido padre, Vasili Filatov, era en realidad Alexis Romanov. Los restos de Filatov, padre, permanecen bajo tierra en Astrakan, cerca de la frontera con Chechenia. Muy escaso de recursos, Popov ha pedido ayuda a Finlandia, donde sus colegas del Instituto de Derecho Médico se han tomado en serio la investigación. Recientemente, las hermanas Filatov viajaron hasta Helsinki, donde fueron sometidas a minuciosos exámenes de ADN. "Si tuviéramos acceso a los restos de la tumba de Yekateririburgo, los de Filatov, padre, podríamos llegar a una conclusión que ayude a despejar la incógnita", dijo en esta capital la doctora jefa de la investigación, Helena Ranta.-