El pacto para que la colección Thyssen se quede en España se firmará en dos meses

Suscrito el protocolo para que 78 obras se instalen en Barcelona

El barón Heinrich Thyssen-Bornemisza afirmó ayer en Barcelona que espera que en el plazo de uno o dos meses se firme el acuerdo para la permanencia definitiva de su colección de arte -unas 800 obras- en España. El barón no quiso entrar en la valoración material de la cesión. Tanto el subsecretario de Cultura, Santiago de Torres, como el abogado que se encarga de estas negociaciones por parte de la Administración, Rodrigo, Uría, adelantaron que se tratará de una operación mixta de compra y donación, cuyo resultado es que la colección se quedará en España y el Estado será su propietario.

...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El barón Heinrich Thyssen-Bornemisza afirmó ayer en Barcelona que espera que en el plazo de uno o dos meses se firme el acuerdo para la permanencia definitiva de su colección de arte -unas 800 obras- en España. El barón no quiso entrar en la valoración material de la cesión. Tanto el subsecretario de Cultura, Santiago de Torres, como el abogado que se encarga de estas negociaciones por parte de la Administración, Rodrigo, Uría, adelantaron que se tratará de una operación mixta de compra y donación, cuyo resultado es que la colección se quedará en España y el Estado será su propietario.

Más información

"Hay una parte de la colección que no se pagará, pero a cambio el Estado ofrece una serie de contrapartidas, como es el compromiso de mantenimiento y conservación de las obras, la exigencia de que se exponga la totalidad de la colección de forma conjunta, etcétera", comentó Uría. El abogado añadió: "Estoy muy satisfecho de que el barón haya dicho que se firmará en un mes. A mí me encantaría que el acuerdo se firmara mañana mismo". La misma satisfacción se expresaba en la cara y en las declaraciones de la baronesa Thyssen. Carmen Cervera aseguraba que los problemas familiares para la cesión de las obras a la Administración se han solucionado. "La última reunión en Lugano ha servido para poner nos de acuerdo", aseguraba la baronesa, en referencia a un reciente encuentro familiar. La reunión se produjo precisamente unos días después de que Francesca -la hija del barón Thyssen que más se oponía a la cesión- y Carlos de Habsburgo contrajeran matrimonio. Francesca pretendía un destino más en consonancia con su boda con un heredero del Imperio Austro húngaro, lo cual de momento parece totalmente descartado. Para alejar cualquier sombra de duda, la baronesa subrayó que la familia está encantada con el desarrollo de la operación temporal en el palacio de Villahermosa, sede madrileña de los óleos de Thyssen. "Si algún heredero expresase su voluntad contraria a la donación se plantearía un problema jurídico; es una operación muy de licada", destacó Uría. El secreto más celosamente guardado, so bre todo en un año de crisis eco nómica, es lo que van a pagar el Estado español o la Fundación Thyssen -en cualquiera de estos casos la que paga es la Administración- por esta colección. Al gunas fuentes lo sitúan entre 30.000 y 50.000 millones. El precio será, por tanto, inferior al de mercado, ya que, según dijo Carmen Cervera, "si el acuerdo de la permanencia de la colección tu viera que valorarse en dinero, no habría el suficiente para pagarla". Un estudio realizado hace seis años por una comisión de expertos españoles tasó la colección en 300.000 millones de pesetas.Pero el optimismo de los barones eclipsaba las cifras. Mientras el barón hablaba en francés de un acuerdo en los próximos meses, la baronesa acortaba los plazos al próximo mes. "En uno o dos meses se dará la respuesta definitiva; y si no, Heinrich y yo empezaremos a cortar cabezas", concluyó satisfecha la baronesa.

Este precipitado anuncio de acuerdo se realizó en Barcelona, donde ayer se encontraban todos los miembros del patronato de la Fundación Thyssen para visitar el monasterio de Pedralbes. En el transcurso de la visita se firmó el protocolo para la cesión de las 78 obras de la colección Thyssen que se colocarán en las paredes de las salas reformadas de este histórico monasterio. Se trata de 70 pinturas y 8 esculturas datadas entre los siglos XIII y XVIII, en su mayoría de temática religiosa.

Las intensas negociaciones que los responsables del Ayuntamiento de Barcelona y de la Fundación Thyssen han mantenido en los últimos meses han variado los términos del acuerdo previstos en un principio. De acuerdo con el protocolo de intenciones que firmaron ayer en Barcelona el alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, y el barón Heinrich von Thyssen, la colección de Pedralbes será "un instrumento de la propia fundación" y dependerá, en sus presupuestos y gestión, de la fundación madrileña.Cambios en el convenio

Anteriormente estaba previsto que fuera el Ayuntamiento de Barcelona el que se encargara de los gastos de instalación y mantenimiento de los fondos Thyssen en Pedralbes. En los próximos meses también se firmará un nuevo convenio entre la Fundación Colección Thyssen-Bornemisza y Favorita Trustees Limited para que se cedan a la primera 10 pinturas propiedad de esta última y 8 esculturas propiedad del barón. Estas obras figuran en la lista de piezas que se expondrán en Barcelona, pero no pertenecen a la fundación.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En