Amin Maluf: "Occidente no apoya la democracia en el mundo árabe"

El escritor libanés Amín Maluf, autor de Las cruzadas vistas por los árabes, León el Africano y Samarcanda (Alianza), es un tenaz combatiente en la lucha por un orden mundial basado en los derechos humanos y, en estos momentos, un intelectual angusitiado por la evidencia de un mundo roto por la intolerancia y la guerra. "Occidente", dice, "nunca ha apoyado la democracia en el mundo árabe, y cerrar los ojos ante esa actitud acaba por pagarse".

Amín Maluf va a publicar en Francia la próxima semana su úItima novela, Le jardin des lumiéres (El jardín de las luces), sobre la figur...

El escritor libanés Amín Maluf, autor de Las cruzadas vistas por los árabes, León el Africano y Samarcanda (Alianza), es un tenaz combatiente en la lucha por un orden mundial basado en los derechos humanos y, en estos momentos, un intelectual angusitiado por la evidencia de un mundo roto por la intolerancia y la guerra. "Occidente", dice, "nunca ha apoyado la democracia en el mundo árabe, y cerrar los ojos ante esa actitud acaba por pagarse".

Amín Maluf va a publicar en Francia la próxima semana su úItima novela, Le jardin des lumiéres (El jardín de las luces), sobre la figura de Mani, el fundador del manqueísmo y un hombre que creía que no hay por qué adherirse a una sola religión y mucho menos matar en su nombre, sino adaptar diversos aspectos de la religiosidad en provecho del individuo y no supeditar la vida a una tribu."Estoy muy, muy triste con lo que sucede en el Golfo, porque es síntoma de un profundo retroceso", dice. "La evolución en el mundo árabe es nefasta, y Occidente, que el último año parecía tener todas las oportunidades de crear un nuevo orden más justo y tolerante, evoluciona también de modo negauvo: ese tribalismo excluyente que me hizo dejar Líbano en 1976 aflora ahora en Occidente".Para Maluf rio hay otro camino de convivencia que el fomento de los derechos humanos y de la democracia. "Pero Occidente nunca ha apoyado la evolución democrática del mundo árabe, sino que ha perjudicado a las élites árabes que que:rian esa evolución: Occidente siempre ha estado prioritariamente ocupado por erigir una barrera contra el comunismo o el cambio de estructuras. Ahora dice corríbatir a un dictador como Sadaim, pero cerró los Ojos cuando utilizaba gas contra su pueblo o cuando atacaba a Irán".El papel de Estados Unidos le parece a Maluf más agresivo. "Una vez que la URSS empezó a actuar de forma menos agresiva, la esperanza es que Estados Unidos tambiéri lo hiciera. Pero, ya sin enernigo, ha multiplicado su agresividad. ¿Qué habría ocurrido si por ejemplo Irak, para detener a un dirigente en Kuwalt, invade ese país y causa 4.000 muertos ? Pues eso es lo que Estados Unidos hizo en Panamá, y el mundo calló".

Ganadores

Estados Unidos e Irak pueden, en su opinión, haber ganado ya su guerra. "Bush ha mostrado su musculatura, Sadam ha suscitado el apoyo de las masas árabes. En cambio, los países árabes serán los que paguen las consecuencias. Y Europa, después de hacer un papel entre Estados Unidos y, la URSS, ha perdido ahora su propia voz y ha quedado en evidencia".En sus novelas, Maluf siempre ha creado protagonistas paladines de la, tolerancia. De ahí su pesimismo actual: "Un habitante del Magreb que aspire a la democracia se encuentra ahora en posicion peor que hace años está entre el ascenso del fanatismo religioso y la incomprensión de Occidente.

El problema más profundo arrastrado por el mundo árabe en su historia contemporánea es el de lograr un salto hacia la modernidad. "Una modernidad", señala Malufl "que no tiene que ser en modo alguno una imitación del modelo de civílización de Occidente. En cualquier caso, en los países islámicos se sigue asimilando modernidad y Occidente, y la situación se pudre".

No ve otro camino que el resuelto apoyo a lo que posibilite que los habitantes de los países árabes se conviertan políticamente en ciudadanos: "Occidente tiene que apoyar por todos los medios la evolución democrática en cualquier punto del planeta. Una política intransigente de respeto a los valores humanos es a la larga más inteligente, aunque a quienes se guían por el interés inmediato no se lo parezca".

En esa política necesaria pero inédita en Occidente,Maluf no cree que haya que hacer excepciones "Si mañana, por ejemplo, se produce una represión del movimiento islamista en algún país árabe, Europa no debe aplaudirla, sino exigir el respeto a los principios democráticos: sólo así habrá un cambio en las conciencias y una nueva forma (de mirar al otro. No hay países inmaduros para la democracia: aducir eso es racismo".

Maluf piensa que la guerra del Golfo lo ha histerizado todo. "Las posturas han sido irracionales, cada cual ha intentado refugiarse en su tribu sin examinar a los de enfrente. Y tengo la impresión de estar metido en un mundo orweIliano: miles de medios de información para a fin de cuentas suministrar idénticas mismas imágenes, los mismos comentarios, el mismo tipo de verdad dirigida".

Individuos

Ha trabajado durante tres años en Le jardin des lumiéres, que mantiene la fórmula mixta de ficción e historia de las anteriores obras de Maluf. "Me interesa mucho dar sitio a las peripecias en una narración", explica, "y también reflejar la vida de la época. Pero de Mani me fascina esa creencia en una espiritualidad basada en la belleza; no en vano era pintor. Y también su apelación no sólo contra las guerras, sino contra toda violencia: preconizaba incluso no cortar un árbol, en una concepción cercana al budismo".Ve ciertas similitudes entre Mani y Rumi -el llamado Mevlana-, el famoso místico sufi: "Esas figuras serían casi imposibles hoy día, porque el sistema no acepta ese grado de independencia. Es hora de que la religión sea otra cosa: durante miles de años ha funcionado como algo intolerante, incluso asesino. Hay que volver a centrar las cosas en el individuo".