Incomprensión

Javier Torre, presidente de la Asociación de Directores de Cine Argentino, es quien dio el grito de alerta hace ya dos años y es uno de los que ahora ya no está muy seguro de que el Gobierno comprenda a fondo el problema: "La crisis económica es grave, dramática, terrible, pero la polémica entre calmar el hambre o hacer cine, con la que algunos funcionarios pretenden justificar el cierre del instituto y la eliminación de los subsidios, es falsa y perversa. El cine es una industria que también debe ser reconvertida, apoyada, y de la que pueden esperarse beneficios económicos importantes a cambi...

Javier Torre, presidente de la Asociación de Directores de Cine Argentino, es quien dio el grito de alerta hace ya dos años y es uno de los que ahora ya no está muy seguro de que el Gobierno comprenda a fondo el problema: "La crisis económica es grave, dramática, terrible, pero la polémica entre calmar el hambre o hacer cine, con la que algunos funcionarios pretenden justificar el cierre del instituto y la eliminación de los subsidios, es falsa y perversa. El cine es una industria que también debe ser reconvertida, apoyada, y de la que pueden esperarse beneficios económicos importantes a cambio de una inversión reducida".Torre ha publicado tres novelas y es director de una sola película -Fiebre amarilla-, por eso puede explicar el problema de todos desde su propia historia, "porque llevo años redactando guiones y elaborando proyectos que nunca se concretan".

Por eso ha recurrido ahora, como varios de sus colegas, a Televisión Española.

Los mejores directores del cine argentino, entre ellos Fernando Solanas, el del Exilio de Gardel y Sur; Miguel Pereira, el de La deuda interna, y Eduardo Mignona, considerado de forma unánime como el mejor director y guionista de televisión y autor de Evita, quien quiera oír que oiga, todos tienen guiones aprobados o en la lista de espera de TVE.