Marcha y entrega de medio millón de firmas contra el indulto de Menem

Las organizaciones defensoras de los derechos humanos y los partidos políticos de centro-izquierda, que iniciaron hace un mes la recolección de firmas de ciudadanos contrarios al indulto de militares y civiles involucrados en la llamada guerra sucia, entregaron ayer en la Casa Rosada, sede del Gobierno, las copias firmadas por "más de 500.000 personas". Una multitud comenzó a reunirse anoche (hora peninsular española), en los alrededores de la plaza de Mayo, donde tres horas después estaba prevista la concentración de las columnas de manifestantes convocadas en distintos lugares de la c...

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Las organizaciones defensoras de los derechos humanos y los partidos políticos de centro-izquierda, que iniciaron hace un mes la recolección de firmas de ciudadanos contrarios al indulto de militares y civiles involucrados en la llamada guerra sucia, entregaron ayer en la Casa Rosada, sede del Gobierno, las copias firmadas por "más de 500.000 personas". Una multitud comenzó a reunirse anoche (hora peninsular española), en los alrededores de la plaza de Mayo, donde tres horas después estaba prevista la concentración de las columnas de manifestantes convocadas en distintos lugares de la ciudad. Las juventudes políticas, entre ellas la peronista, se adhirieron al acto.Las Madres de Plaza de Mayo, que continúan realizando su ronda habitual de los jueves, decidieron no participar en la recolección de firmas ni en el acto de anoche "porque no compartimos este tipo de reclamos a gobiernos de los que ya nada puede esperarse". Las Madres denunciaron lo que consideran una "deliberada maniobra para imponer la reivindicación de las Fuerzas Arrnadas" y criticaron a los jefes montoneros indultados " que se suman a las huestes aliadas de Menem con la bajeza moral de los traidores".

El jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, general Isidro Cáceres, confirmó ayer la baja del teniente coronel Aldo Rico, cabecilla de los alzamientos de Semana Santa y Monte Caseros en 1987 y 1988, y de otros tres oficiales que fueron sus portavoces y su Estado Mayor durante la rebelión. El presidente Carlos Menem aseguró que, en su condición de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, firmará todas las listas de bajas que prepare el general Cáceres, sin tener en cuenta a qué oficiales afectan sus decisiones. Entre los casos a resolver se encuentra el del coronel Mohamed Ali Seineldin, líder de los llamados carapintadas, que se alzaron contra los mandos.

La detención de un escuadrón de la muerte integrado por dos policías de baja graduación y cuatro civiles que asesinaron de forma salvaje a dos hermanastros "porque le tiraron una piedra al automóvil en el que viajaban", tensó aún más el clima.

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