'Tema', 'a nivel de' 'de que', 'finalizar'

Tema, a nivel de, en ese sentido son algunas de las expresiones comodín que abundan en el lenguaje periodístico español hasta convertirse en plaga, según dijeron algunos académicos. Otros son en base a o en otro orden de cosas, y el inútil del mismo. El director de la Española, Pedro Laín Entralgo, críticó duramente el de que ("me dijo de que") como error frecuente, y advirtió del desgaste por abuso de finalizar.Para Fernando Lázaro Carreter son "grave plaga los anglicismos semánticos", esto es, el uso de vocablos castellanos con significados distintos del pr...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Tema, a nivel de, en ese sentido son algunas de las expresiones comodín que abundan en el lenguaje periodístico español hasta convertirse en plaga, según dijeron algunos académicos. Otros son en base a o en otro orden de cosas, y el inútil del mismo. El director de la Española, Pedro Laín Entralgo, críticó duramente el de que ("me dijo de que") como error frecuente, y advirtió del desgaste por abuso de finalizar.Para Fernando Lázaro Carreter son "grave plaga los anglicismos semánticos", esto es, el uso de vocablos castellanos con significados distintos del pretendido. Cuando se dice contemplar por "considerar"; puntual por "concreto"; dramático por "espectacular", santuario por "refugio"; impactar por "impresionar". Ejemplos de hallazgos a imitar son por ejemplo canguro por "baby sitter" o azafata por stewardess". Carlos Rafael Duverrán, académico costarricense, aludió al Ienguaje agresivo" empleado con frecuencia en la prensa. Cuando se habla por ejemplo de eliminar impuestos, tomar la ofensiva, condenar la corrupción. La Academia Colombiana presentó en una ponencia una extensa lista de propuestas castellanas para palabras técnicas o deportivas. Para el caddie del golf se propone ayudante o paje, para el drive, un tacazo; y para el score, puntaje o anotación. Anglicismo es también está siendo (estudiado), en lugar de estudia. Antonio Tovar observa pronunciaciones irregulares, por lo general a causa de influencia extranjera. Muchos locutores pronuncian exageradamente la equis, o insisten en la c interpuesta (respecto) de una forma incorrecta pues se debiera decir como una suerte de g. La d entre vocales apenas se pronuncia, o se omite -estao-, incluso entre personas supuestamente cultas. "Yo me limitaría a pedir una preocupación por el idioma" en los periodistas, "una cultura básica; que lean, vayan al teatro", comentó Tovar.

Más información
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En