Historia de una colaboración

Cuando el teniente general Manuel Saavedra Palmeyro ocupaba la Capitanía General de la II Región Militar, se realizaron, por iniciativa suya, trabajos de excavación y restauración en la dehesa del Gandul. Militares, estudiantes y arqueólogos excavaron villas romanas y restauraron un mausoleo romano turriforme. Se acotaron los lugares donde se situaban dólmenes y otros enterramientos importantes, para que no fueran pisados por los carros de combate durante el transcurso de sus prácticas habituales. Según los arqueólogos que trabajaron con él, Saavedra no aceptó ningún tipo de homenaje; ni s...

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Cuando el teniente general Manuel Saavedra Palmeyro ocupaba la Capitanía General de la II Región Militar, se realizaron, por iniciativa suya, trabajos de excavación y restauración en la dehesa del Gandul. Militares, estudiantes y arqueólogos excavaron villas romanas y restauraron un mausoleo romano turriforme. Se acotaron los lugares donde se situaban dólmenes y otros enterramientos importantes, para que no fueran pisados por los carros de combate durante el transcurso de sus prácticas habituales. Según los arqueólogos que trabajaron con él, Saavedra no aceptó ningún tipo de homenaje; ni siquiera que acudieran a la Prensa para dar a conocer a la opinión pública la valiosa colaboración que habían tenido.En aquella ocasión, la Universidad se hacía cargo de la dirección técnica y el Ejército facilitaba cuanto estaba a su alcance: maquinaria, personal y transporte, además de todo tipo de instrumentos pesados, como palas mecánicas para movimiento de tierras, retroexcavadoras, vehículos para desplazamiento y transporte, grúas hidráulicas autopropulsadas, hormigoneras, dumpers, motosierras, herramientas, talleres de campaña, helicóptero para fotografía y prospección aérea, etcétera. La aportación humana se componía de arqueólogos que estaban cumpliendo el servicio militar, y que fueron seleccionados en la II Región Militar, procedentes de diversas universidades españolas, y de soldados del cuartel de Las Canteras y otros próximos.

Más información

Entre los trabajos realizados destacan la excavación de un dolmen tipo tholos, dos villas romanas y la restauración de un mausoleo romano, realizada por el Regimiento Mixto de Ingenieros número 2. Según Fernando Amores, estas tareas no eran extrañas para el cuartel de Las Canteras, ya que en los años 50, gracias al interés de algún mando, se puso en conocimiento de la dirección del Museo Provincial y de la capitanía el descubrimiento de varias tumbas romanas que se rescataron de su destrucción y que se conservan en dicho museo.

También se restauró un dolmen tipo tholos, denominado Cueva del Vaquero, excavado por Bonsor a principios de siglo y que se encontraba en estado ruinoso. Este dolmen, gracias a la iniciativa militar y al buen estado general de su estructura, se puede visitar desde entonces.

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