Cartas al director

Timerman y las barbaries

Había un grave error de omisión en el artículo de Jacobo Timerman Los asesinos argentinos, en España. Decía que "el crimen cometido por los militares argentinos -la desaparición de 30.000 personas- es equiparable, en los años posteriores a los crímenes nazis, únicamente con el asesinato masivo del pueblo camboyano. La palabra únicamente entraña una cierta amnesia sobre el exterminio de inlles de personas en Rusia durante Stalin (véase Solzenitzin, el Archipiélago Gulag), situación sobre la que no existen evidencias de que haya cambiado demasiado. No estaría de más, tampoco...

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Había un grave error de omisión en el artículo de Jacobo Timerman Los asesinos argentinos, en España. Decía que "el crimen cometido por los militares argentinos -la desaparición de 30.000 personas- es equiparable, en los años posteriores a los crímenes nazis, únicamente con el asesinato masivo del pueblo camboyano. La palabra únicamente entraña una cierta amnesia sobre el exterminio de inlles de personas en Rusia durante Stalin (véase Solzenitzin, el Archipiélago Gulag), situación sobre la que no existen evidencias de que haya cambiado demasiado. No estaría de más, tampoco, que el autor recordara las matanzas de Sabrá y Chatila. Se trata de que todos recordemos todo para que todo cambie, pues en caso contrario daríamos la razón a los que afirman que para ciertos casos actua Amnesty Internacional y para otros Amnesi Internacional.Todos estos actos son execrables, y sus culpables deben ser castigados, estén prófugos o estén aún en el poder. Y ninguna de estas barbaries debe ser "equiparada", ya que, como dice Borges, el crimen es un horror cualitativo, no cuantitativo./

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