El líder de la diplomacia del fútbol español de élite en 41 países
Octavi Anoro se incorporó en 2017 a LaLiga para ser su representante en Japón. Hoy lidera desde Madrid una red de delegaciones y oficinas desplegadas por los cinco continentes que ha hecho que la competición importe a millones de aficionados en todo el mundo
A los 33 años, Octavi Anoro creía que lo tenía todo. Un buen trabajo en un holding turístico con salario competitivo y un plan de carrera y la posibilidad de seguir disfrutando, cerca de casa, de la compañía de amigos y familiares en Barcelona. Pero en 2017, cuando vio que LaLiga estaba buscando ejecutivos que representaran a la organización por todo el mundo, decidió arriesgarlo todo: “Se presentaron miles de personas y quedamos unas 60. No había garantía de que me cogieran, pero dejé mi trabajo y me fui para Madrid a participar en el último tramo del proceso”, rememora. Hoy, mirando atrás desde su posición como director de desarrollo internacional, desde la que coordina una red de delegaciones y oficinas desplegadas en 41 países, piensa que fue la mejor decisión que podría haber tomado.
Anoro siempre había ansiado dedicarse profesionalmente, de la forma que fuera, al fútbol. Jugó de pequeño (y también de mayor, hasta la treintena), cursó un máster especializado en deporte en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona e incluso ejerció, con tan solo 20 años, de técnico de deportes en el Ayuntamiento de Sant Pol de Mar, un pueblo de unos 6.000 habitantes del Maresme barcelonés. Todos los caminos abiertos parecían indicar una clara vocación que solo se concretó cuando LaLiga lo incorporó para que se convirtiera en su delegado en Japón. Lo que él llama “la gran oportunidad de mi vida”.
En tierras niponas aterrizó con varios objetivos: establecer alianzas con federaciones y clubes locales; aumentar la presencia de la competición en el país –creando un perfil específico en japonés en redes sociales u organizando eventos, por ejemplo–; buscar nuevos patrocinadores; estimular la creación de peñas y las reuniones entre aficionados locales al fútbol español… Aquella fue quizá la época en la que el plan de internacionalización de la organización deportiva tomó más fuerza, pasando de cero a 44 delegados en apenas unos meses. Años después, se han recogido los frutos de aquel esfuerzo: entre 2013 y 2023, la competición ha pasado de tener 3,9 millones de seguidores en redes sociales a los 200 millones actuales, siendo la liga más seguida del mundo, y sus ingresos comerciales, más allá de los percibidos por derechos televisivos, han crecido un 389% en el mismo periodo.
A Anoro se le hizo corta la estancia en Japón, que fue de poco más de dos años, y eso que tuvo tiempo de trabar buenas amistades, de sumergirse en la cultura local e incluso de llegar a entender “al 60% o el 70%” de todo lo que le decían sus interlocutores japoneses. LaLiga le propuso asumir un nuevo reto y él, de nuevo, no pensó en la comodidad, en el confort, sino en el reto, en superarse una vez más y aprender. Ahora es el responsable de una imponente red diplomática que, asegura, ha pasado a otra fase después de seis años en funcionamiento.
“Cuando llegué al cargo creamos una estrategia para cada mercado, fomentamos la hiperactividad en todos ellos y crecimos muy rápido. Luego, sin detenernos, tratamos de monetizar nuestras conexiones e inteligencia de mercado para hacer el proyecto autosostenible. Este último año nos hemos centrado en dos objetivos: ayudar a los clubes a tener más presencia internacional y reforzar LaLiga Grassroots, una iniciativa en la que desarrollamos proyectos futbolísticos a varios niveles por todo el mundo para formar a jugadores con una estructura de técnicos de primer nivel”.
Aunque vive en Madrid, una parte importante de su trabajo pasa por conocer de primera mano el trabajo de cada uno de sus enviados y los secretos de los territorios a los que llega LaLiga. Desde enero de este año, la lista de países que ha visitado es larga y variada: Francia, Brasil, Vietnam, Dubái, Irak o Estados Unidos, entre otros.
Anoro es el hombre que mejor puede defender la idea de que el fútbol profesional español es, con toda probabilidad, una de las marcas españolas más internacionales: “En Brasil o Indonesia, por ejemplo, hay más seguidores en redes sociales de la competición que aquí. No hay que perder la perspectiva de que LaLiga nace y se hace aquí en España, pero también es una marca internacional dentro de la industria global del entretenimiento”, afirma.
Un nuevo posicionamiento estratégico
LALIGA presentó hace unas semanas ‘La Fuerza de Todos’, una campaña en la que descubre su nuevo posicionamiento estratégico y refleja su capacidad “para generar movimiento desde el fútbol”. Esta iniciativa, aseguran, “manifiesta que juntos somos más fuertes y destaca el potencial de todas y cada una de las personas que forman parte del ecosistema de LALIGA” y encaja con el nuevo rumbo de la marca, centrado en en LA FUERZA DE NUESTRO FÚTBOL que busca ser “una competición más global, multitarget, mutiengagement y multicultural que inspire al mundo a través de los valores del fútbol”.
La campaña se dio a conocer con la presentación de una pieza audiovisual que, afirman, captura la esencia del fútbol, destacando la unión y la fuerza como los elementos que dan sentido a la competición, resaltando la emoción colectiva de este deporte. Vea aquí abajo la campaña de LALIGA.
