El secreto del RC Celta para llenar su estadio en cada partido

La agenda de Marián Mouriño tiene pocos huecos libres desde que se convirtió en la primera presidenta del RC Celta. A su llegada al cargo, en diciembre de 2023, se involucró hasta ser una figura omnipresente que participa activamente en todo lo que envuelve al club. Reuniones, actos públicos, eventos con las peñas, partidos del primer equipo masculino, del femenino, de los conjuntos de cantera... y hasta saca tiempo para conceder entrevistas en prime time: su visita a La Revuelta (La 1) a finales de enero fue seguida por más de 1,7 millones de espectadores. “No me da el tiempo para nada, no paramos”, dice la directiva sin desdibujar la perenne sonrisa de su rostro.

Con todo, reconoce que merece la pena. Uno de los primeros logros de su equipo ha sido el desarrollar un ambicioso plan estratégico. Detrás de un concepto tan técnico se esconde un estado de ánimo, una ilusión y una forma de entender el fútbol de la presidenta que está transformando el club a través de una mayor conexión con las raíces, que en el caso del Celta son dos: la afición y una reivindicación de la cultura gallega. Con él se pretende estrechar los lazos con la comunidad celtista, fomentar su sentido de pertenencia con todo aquello que representa al Celta en particular y proyectar el folklore gallego en general.

Qué hace al RC Celta diferente, según...

Los resultados ya se notan esta temporada: la comunión con la grada es total y la asistencia media al Estadio ABANCA Balaídos se ha elevado hasta el 90% del aforo -24.870 espectadores- en cada partido en Vigo, un 23% más desde que Mouriño llegó a la gerencia. Además, en 10 de los 13 partidos jugados en casa hasta la fecha se ha alcanzado el lleno total. Por primera vez en la historia, el Celta tuvo lista de espera para sus abonos tras completar más de 20.000 plazas, un 30% más que en la pasada campaña. La presidenta cuenta el secreto de la proeza: “Estamos trabajando para tratar de recuperar nuestra identidad y llegar a los celtistas de una forma cercana, que sientan que el Celta es suyo, porque es así”.

El Estadio ABANCA Balaídos, un fortín sobre el césped...

Con la afición volcada, el equipo que entrena Claudio Giráldez está sabiendo responder sobre el césped. Suma ocho victorias en las 13 jornadas disputadas con 22 goles a favor por 13 en contra, lo que convierte al Celta en el cuarto mejor equipo local de LALIGA EA SPORTS. Los pilares que están consiguiendo defender el hogar celta son un nutrido grupo de canteranos: Hugo Álvarez, Hugo Sotelo, Damián y Javi Rodríguez, capitaneados por el eterno Iago Aspas y la vuelta de dos insignes de Afouteza como Borja Iglesias e Iker Losada. Todos bajo la batuta de Giráldez, el técnico de la casa que ya supervisó a la mayoría de estos jugadores durante su etapa en el filial (2019-2024).

Giráldez fue la primera gran decisión de Marco Garcés, el director de Fútbol escogido por Mouriño para capitanear la parcela deportiva de su proyecto. Garcés, que había trabajado antes para conjuntos como el Manchester United y el Liverpool, analiza la clave del buen hacer del equipo: “Tenemos la fortuna de contar con una gran generación de jugadores, con la particularidad de que estos canteranos bajan de la grada al campo y se sienten representados, son una bendición”, reconoce Garcés, que no olvida el papel “fundamental” de Giráldez: “Es alguien que cree en los jóvenes, apuesta por ellos y por esta manera de jugar”.

Qué hace al RC Celta diferente, según...

El objetivo, reflexiona Garcés, es continuar aumentando esa “línea de suministro” de la cantera, y lanza un mensaje clave para los cientos de canteranos que cada día entrenan para, algún día, enfundarse la zamarra celeste: “Que tengan sueños grandes, ilusión, entusiasmo, eso es lo que tienen que traer. Y, afortunadamente, lo traen”. ¿Y cuál es el sueño deportivo de Garcés? “Me encantaría poder jugar torneos en Europa”.

... y un hervidero en las gradas

No hay mejor manera de comprobar el rendimiento del equipo y el empuje de la grada que con una remontada. Son las 11:00 de la mañana del pasado 8 de febrero y faltan unas pocas horas para que comience el partido contra el Real Betis. Centenares de aficionados ya han comenzado a poblar el barrio de Balaídos; en breve desfilarán por las gradas para presenciar cómo el Celta le da la vuelta al 0-2 inicial de los béticos.

Ambos conjuntos saltan al césped y los del Celta visten en la manga derecha un parche con el logo de La Revuelta como recuerdo de la visita de Mouriño al programa, una de las últimas estrategias del equipo de marketing. En este aspecto, el Celta también está consiguiendo suculentos resultados. Ha logrado un incremento de 20.000 interacciones diarias en sus redes sociales y más de 51 millones de visualizaciones en los primeros 500 días del mandato de Mouriño. Esto ha supuesto para el club aumentar en 9 millones su engagement en redes –el nivel de interacción de la audiencia– ascendiendo hasta las primeras posiciones de los ránkings de LALIGA.

Con el desfile inicial de Celta y Betis, más de 22.000 personas, alentadas por la recién formada grada de animación, el motor de los cánticos del Estadio ABANCA Balaídos, comienzan a corear una sintonía de sobra conocida por todo celtista: “Creo que estou namorado; Dos teus dous ollos azuis...”. El himno Oliveira dos cen anos, compuesto por el madrileño C. Tangana con motivo del centenario del club en 2023, se repite al unísono cada vez que el conjunto consigue marcar un gol y provoca un estallido de júbilo al final del encuentro. “¡3 a 2, vaya partidazo hicimos!”, se repite a la salida del estadio.

Un homenaje centenario al patrimonio cultural gallego

El himno, de hecho, se ha convertido en otra de las partes fundamentales de la estrategia impulsada por Mouriño, un “regalo de Pucho”, dice en referencia al apelativo del artista, reconocido aficionado del club. También es la iniciativa favorita de la presidenta: “Nos ha marcado el camino, nos ha hecho ver que todo el mundo, niños, mayores, gente de fuera, se sentía completamente identificada. Se me ponen los pelos de punta cada vez que lo cantan en Balaídos”, describe.

Qué hace al RC Celta diferente, según...

La pieza musical es un cóctel de modernidad y homenajes a la tradición gallega convertido que ha calado hondo en la afición. Abraham Cupeiro, eminencia en la música popular de Galicia, se define como un “rescatador de sonidos del pasado”, además de aficionado al Celta, y valora la importancia del himno. “Es muy poliédrico, trata de aunar muchos matices que conectan con la gente. Es difícil hacer algo tan complejo, pero lo han logrado”, afirma sobre la pieza.

Cupeiro, especializado en crear o reconstruir él mismo los instrumentos con los que trabaja, también ha formado parte del plan de Mouriño de promover el patrimonio cultural gallego. Él mismo tocó en el Estadio ABANCA Balaídos en la previa del partido contra el FC Barcelona el pasado 22 de diciembre (2-2) como parte de una serie de actuaciones que el Celta promueve esta temporada con motivo de los partidos para impulsar la música local.

El músico escogió el carnyx, un cuerno de guerra que utilizaba el pueblo celta hace 2.500 años. Solo dos personas en el mundo saben tocarlo: el músico escocés John Kelly y Cupeiro. “Mi idea era traer su sonido a un campo de batallas, entre comillas, del siglo XXI como es un estadio de fútbol. Para que la gente pueda descubrir estos instrumentos en este tipo de escenarios”. Su actuación enmudeció a Balaídos. “El instrumento hipnotiza a la gente, fue un momento un poco telúrico al tocar en una gran caja acústica como el estadio. Tenemos la suerte de que la música gallega es muy universal”.

Esa apuesta por la tradición local ha conseguido deleitar a la afición. Marta Saiz, de 40 años, es socia del Celta desde que nació y acude regularmente a cada partido en casa. “El club nos ha enganchado a toda la ciudad por su apuesta por las raíces, porque los gallegos estamos muy arraigados a la tierra”.

As Celtas, un nuevo orgullo

Saiz es también una de las caras visibles de la peña Le-chuzas Celestes, creada hace una década con las ideas muy claras. “Nuestra filosofía es que las mujeres tomasen un poquito las riendas dentro del club”, afirma, orgullosa. Además, está encantada con la llegada de Mouriño. “Ella ha abierto el club a todos, a la ciudad, a todos los niveles, y eso ayuda a que el club funcione mucho mejor”.

Qué hace al RC Celta diferente, según...

Es el domingo 9 de febrero por la mañana y la niebla domina las montañas de Vigo. 604 aficionados han acudido al encuentro de As Celtas, el equipo femenino, que juega contra el PM Friol en las instalaciones deportiva de A Madroa. Otro récord de asistencia para enmarcar en la temporada del equipo, que marcha segundo a las puertas de ascender a la tercera categoría del fútbol femenino. Además de ser día de partido, el club ha aprovechado para abrir las puertas a los recién reformados vestuarios de las instalaciones, donde entrenan y juegan As Celtas, el equipo femenino.

Tras la victoria (2-0), toca el turno de otro acto, encabezado por Mouriño, que sirve para homenajear a la peña As Guerreiras, la primera oficial que tiene el destacamento femenino. Para coronar la celebración, una pequeña rondalla acompaña a un bufé de callos con garbanzos y empanada de bonito, dos de las joyas gastronómicas gallegas. “Con esta cercanía es como conseguimos conectar con la gente, no siendo inaccesibles”, apuntan trabajadores del club sobre el éxito de la estrategia.

Mouriño ha dibujado en un tablón colgado en la entrada de los vestuarios un mensaje en gallego dedicado a todos aquel que entre: “Benvidos a vossa casa”. La presidenta lo explica: “Queremos que todos los celtistas nos sintamos como en casa tanto en Balaídos, en A Madroa, en Afouteza... Este es un proyecto de todos”.