Las virtudes más humanas (y desconocidas) de un campeón de motociclismo

Las sorpresas se suceden en el Mundial de MotoGP. A finales de junio se anunció que Álex Márquez correrá con Ducati a partir de noviembre. El piloto de Cervera (Lleida), de 26 años, sumará así su cuarta temporada en la categoría reina del motociclismo, donde aterrizó en 2020. “Para mí era crucial poder cambiar para recuperar la misma motivación con la que llegué a la categoría”, reconoce Álex. El campeón del mundo de Moto3 en 2014 y Moto2 en 2019 tendrá como compañero de equipo en el Team Gresini MotoGP al italiano Fabio Di Giannantonio, uno de los debutantes más prometedores en la competición. “Queríamos tener un piloto más experimentado en el box, y creo que Álex Márquez encaja perfectamente en nuestro equipo. Su CV habla por sí solo, y creemos que tiene mucho potencial”, avanzan los responsables de su nueva escudería.

Este fichaje supone una enorme oportunidad para afianzar la carrera deportiva de Álex, que sueña con repetir en el futuro los éxitos del pasado. “Esta era la mejor opción para mí, con un equipo que ha ayudado a escribir la historia del campeonato”, insiste el deportista catalán, consciente del reto al que se enfrenta. El todavía corredor del LCR Honda atesora hasta la fecha 12 victorias y 40 podios en todas las categorías, y recala en un conjunto que siempre ha confiado en pilotos españoles a lo largo de su trayectoria. Por él han desfilado desde Sete Gibernau a Toni Elías, sin olvidar a Álvaro Bautista, Emilio Alzamora y, más recientemente, Jorge Martín.

El cambio representa todo un revulsivo para Álex ya que, de alguna manera, le ayuda a desplegar todo su potencial y a alzar el vuelo (todavía más) en el circuito, donde es toda una referencia. Su personalidad arrolladora, su cercanía y su hambre de victorias tienen aún más mérito si se considera que los triunfos de Marc, su hermano mayor, han eclipsado en demasiadas ocasiones su talento. “Pero en cualquier comparación con Marc, todos los pilotos de la parrilla salen perdiendo. Él es él, y yo soy Álex”, sostiene el bicampeón del mundo, que es el protagonista absoluto del documental Yo soy Álex, de la mano de su patrocinador Allianz.

Creo en el trabajo, en el sacrificio, en intentar ser siempre mejor, porque si te estancas habrá personas que te pasarán por delante. Si tienes talento pero no trabajas, no llegas nunca a evolucionar, a mejorar

Álex Márquez, piloto de Moto GP y campeón de Moto2 y Moto3

La película ofrece la visión más humana y personal de Álex, más allá de sus éxitos deportivos. A través de su propio testimonio y de los de su entorno más cercano (su hermano Marc, sus padres, sus amigos y su representante), el filme expone cómo el talento, el trabajo, la humildad y la pasión han forjado el carácter de este joven hasta convertirlo en una estrella del motociclismo mundial con entidad propia.

Ejemplo para las nuevas generaciones

El documental recuerda cómo el Álex niño pasó de querer ser mecánico a subirse a una moto junto a Marc. Fue entonces cuando descubrió su verdadera vocación: ser piloto. Toda una historia de superación, horas y horas de sacrificio y mucha voluntad que se reflejan en la personalidad y los valores que transmite Álex Márquez. Unas cualidades que pueden servir de ejemplo para las futuras generaciones, al enseñarles que si se lo proponen, pueden mejorar el mundo y tener un impacto positivo en la sociedad.

Porque lo que pretende Yo soy Álex es narrar la historia del nacimiento y crecimiento de una vocación en un niño. Y a partir de ahí, mostrar cómo sus virtudes y actitudes ante la vida y el deporte han convertido esa vocación en una cadena de éxitos profesionales que, como el propio protagonista reconoce, seguirá persiguiendo en el futuro hasta alcanzar las cotas más altas. Siempre por propios méritos, porque eso es algo irrenunciable. “Él no va a la sombra de su hermano. Nadie le ha ayudado, porque en la moto va uno”, explica en el documental su madre, Roser Alentà.

Yo soy Álex se divide en cuatro partes: talento, trabajo, humildad y pasión. Unos valores que retratan a la perfección al piloto catalán y que sirven de inspiración no solo a las nuevas generaciones del mundo del motor, sino también a miles de personas, muchas de ellas jóvenes como Álex. “Creo en el trabajo, en el sacrificio, en intentar ser siempre mejor, porque si te estancas habrá personas que te pasarán por delante. Si tienes talento pero no trabajas, no llegas nunca a evolucionar, a mejorar”, afirma el protagonista del documental.

Con nombre propio

Su hermano Marc le define como “un currante” del circuito. “Lo que más me sorprende y valoro es la manera en que gestiona la presión de ‘ser el hermano de’. Es una mochila que pesa bastante, pero él ha seguido con su trabajo, ha buscado su camino, se ha hecho su sitio y su nombre, y lo ha conseguido”, le alaba el ocho veces campeón del mundo. Coincide con él Emilio Alzamora, el representante de Álex, quien destaca la humildad y la sencillez que atesora cada día su pupilo. “Ha entendido perfectamente su oficio y que detrás suyo hay un equipo de gente. No existen muchos deportistas que cuiden a las personas como lo hace él”, comenta el expiloto.

En el documental también participan Jordi Arqué y Xavi Vierge, dos de los amigos más cercanos de Álex. Ambos corroboran que el campeón siempre se ha mantenido fiel a sus principios, y que los títulos y los triunfos no han cambiado para nada su personalidad ni su forma de ser. “Es igual de humilde que cuando nos conocimos, y eso es lo que me gusta”, comparten.

Lo que más me sorprende y valoro es la manera en que gestiona la presión de ‘ser el hermano de’. Es una mochila que pesa bastante, pero él ha seguido con su trabajo, ha buscado su camino y se ha hecho su sitio y su nombre

Marc Márquez. hermano de Àlex y ocho veces campeón del mundo

“Es una caja de sorpresas, nos quedan por ver muchas cosas”, pronostica Marc Márquez. “Lo mejor está por venir”, añade Alzamora. Mientras tanto, Álex se mantiene firme en su empeño por “trabajar y mejorar cada día para, en algún momento, tener la opción de ganar”. A partir de la próxima temporada, a lomos de una Ducati.

Además de Yo soy Álex, la aseguradora Allianz ha producido diversos documentales que comparten algo en común: se trata de iniciativas o de personajes que contribuyen a construir un mundo mejor y consiguen que el futuro sea esperanzador para nuestra sociedad. Una filosofía, la de #ElFuturoEnComun, que se plasma en el documental del piloto catalán. O en el capítulo dedicado a los emprendedores de Protofy.xyz, que con su respirador de emergencia OxyGen dieron (y siguen dando) aire al mundo en los momentos más duros de la pandemia.