Violencia ultra en Italia: jugadores agredidos con bates en el autocar

“El fútbol cambia pero nadie intenta cambiar a los Ultras”, así se titula el editorial de esta mañana en la sección de deportes del Corriere della Sera. Los ultras siguen campando a sus anchas en Italia. El sábado por la noche se vivió el enésimo episodio de violencia.

Unos 200 radicales, esperaron el autocar del Foggia (equipo de la Lega Pro, Tercera División italiana) después de que el equipo –cuarto en la tabla- perdiera por 3-0 el derbi contra el Andria. La plantilla regresaba de noche cuando los violentos pararon el autocar antes de que los jugadores bajaran a por sus coches. Golpearon el vehículo, abrieron la puerta y subieron con bates y bastones.

Insultaron a los jugadores, les escupieron y se enzarzaron con ellos, como si fuera el Far West. Volaron puñetazos –uno lo recibió un futbolista del Foggia- y la batalla terminó con cinco heridos (cuatro de ellos policías). La plantilla que, según el diario La Repubblica, no presentó denuncia en comisaría, se marchó, asustada, a otra región. Los jugadores pagaron de su bolsillo un hotel lejos de Foggia para poder pasar la noche con total seguridad.

“Es un hecho incalificable e inaudito. Hay que tomar medidas, no podemos seguir así. Este no es el modelo de fútbol que queremos desarrollar en Italia”, lamentó, una vez más, Damiano Tommasi, presidente de la Asociación de Futbolistas Italianos. La Policía y la Fiscalía han abierto una investigación por rapiña, violencia privada y lesiones personales. El club ha publicado un comunicado condenando los hechos y calificando a los ultras de “pseudo-hinchas que poco tienen que ver con el fútbol”.