Messina: “No me gusta que me llamen cabrón durante 40 minutos”

“Estamos muy contentos porque sabíamos que este partido nos iba a demostrar si estábamos arriba o abajo”, resumió Rudy Fernández tras la victoria ante el CSKA. El alero mallorquín libró un duelo de quilates con Sonny Weemns (28 puntos para cada uno), y lideró la ofensiva madridista. "No vale de nada anular a Krstic porque entonces aparece un grandísimo jugador como Weems. Hemos forzado mucho en defensa para poder correr después. Hemos sido muy agresivos y el público ha vuelto a ser nuestro sexto hombre", analizó. “Ha sido uno de sus mejores partidos con el equipo, pero no el mejor”, dijo Laso sobre Rudy. “Le valoráis solo por los puntos y para mi da muchas cosas al equipo. Igual hizo mejor partido ante el Murcia, cuando estaba tocado ”, contó el técnico del Madrid antes de repasar el choque. “Hemos tenido energía, esfuerzo y concentración. Ha sido un gran partido de baloncesto contra un grandísimo rival. Les pongo una nota muy alta a mis jugadores en el aspecto físico y mental porque han entendido desde el principio el tipo de partido que era. El primer tiempo ha estado igualadísimo y hemos defendido muy bien por momentos, pero después hemos conseguido mejorar atrás cada vez más”, cerró.

Yo he saludado a mis a amigos, al presidente [Florentino Pérez], a mis exjugadores… yo miro hacia adelante"

“El Madrid ha jugado un gran partido y ha tenido la fuerza mental de no ponerse nervioso cuando estuvimos cerca en el marcador. Han sido mucho más agresivos que en Moscú”, analizó Messina. “Una de las claves fue el no poder jugar con Kaun y Krstic juntos por las faltas personales del primero”. “No sabía que el Maccabi había perdido. Ahora la diferencia tiene más importancia para el Real Madrid y nosotros porque si no perdemos ningún partido seremos primero y segundo”, dijo tras conocer la derrota del Maccabi en la cancha del Partizán que deja a CSKA y Madrid como lideres destacados de su grupo.

Al técnico italiano le preguntaron sobre los constantes abucheos que sufrió antes y durante el partido. “Qué voy a decir sobre ello. ¿Que me gusta que me llamen cabrón durante 40 minutos? Pues no, no me gusta”, respondió lacónico. “Si lo piensan que lo hagan y que lo digan. Yo he saludado a mis amigos, al presidente [Florentino Pérez], a mis exjugadores… yo miro hacia adelante”, cerró Messina, que en marzo de 2011 abandonó la nave blanca. También de marzo, pero de hace justo un año, data la última derrota del Madrid de Laso en el Palacio en competición europea (73-74, ante Panathinaikos). Desde entonces nadie asalta la fortaleza madridista en la Euroliga.