Bajo un gigantesco olivo, el presidente griego, Konstantinos Stefanopoulos, ha inaugurado la cita: "Declaro abiertos los Juegos Olímpicos de Atenas". Por su parte, Gianna Angelopulos, presidenta del Comité Organizador, ha señalado: "Esta noche hacemos historia. Juntos escribimos una página magnífica de la historia de los Juegos". Para concluir, el presidente del COI, Jacques Rogge, ha instado a los atletas a que rechacen el dopaje. "Nuestro mundo está necesitado de paz y tolerancia. Pido a los atletas que muestren la unidad por encima de las barreras nacionales, políticas y religiosas", ha subrayado Rogge.APLos organizadores del evento han hecho una arriesgada apuesta al contar con la inclasificable Björk. La islandesa, que acaba de publicar un nuevo disco, ha conmovido al público al cantar acompañada únicamente de lo que parecían ser los latidos de un corazón.REUTERSGrecia, como es tradicional por ser cuna de los Juegos, ha encabezado la parada, pero también la ha cerrado al tener esta vez la doble condición de país organizador. El estadio ha retumbado con el equipo griego, mientras el presidente, Costas Stefanopoulos, y el primer ministro, Costas Caramanlis, saltaban a la grada para animar a los suyos. Muchos atletas griegos desfilaban con lágrimas en los ojos.APUna de las delegaciones más potentes del mundo, la de Estados Unidos, saluda a los 70.000 espectadores que han tenido la suerte de vivir el espectáculo en directo.REUTERSUna de las delegaciones más aplaudidas ha sido la de Irak, encabezada por el judoka Hadir Lazame. A pesar de la sangrienta posguerra que se vive en el país árabe, sus deportistas han dado la primera sorpresa del torneo, al vencer por cuatro tantos a Portugal en el torneo de fútbol.REUTERSOtro de los momentos más emotivos de la ceremonia ha sido el desfile de los 202 países participantes con un orden distinto al habitual, ya que se ha usado el alfabeto griego. La delegación espñaola, con la judoka Isabel Fernández al frente, ha aparecido en el puesto 67.APEn un guiño al futuro, la ceremonia previa al desfile ha terminado con una mujer embarazada como símbolo de la nueva vida, envuelta en el sonido de la ópera Aida, interpretada por la gran Maria Callas. Del lago, ha surgido el secreto de la vida: una cadena de ADN.REUTERSEntre los iconos de la Grecia clásica no podía faltar el gran conquistador Alejandro Magno que, montado en su famoso caballo Bucéfalo, ha recorrido el estadio entre decenas de lanzas.Lo mejor del arte griego ha quedado plasmado en un original desfile que ha abarcado desde las civilizaciones micénicas, pasando por el mito del minotauro, la diosa que da nombre a la ciudad Atenea, la tragedia y comedia del teatro, las cariátides y hasta el olivo, símbolo mediterráneo por excelencia. En la imagen, la diosa minoica de la fertilidad.REUTERSLa mitología griega ha sido la nota dominante de toda la ceremonia, aunque adornada con un toque de modernidad. El dios del amor Eros, en la foto, ha sobrevolado el estadio para infundir la pasión a dos bailarines.APLa ceremonia ha recorrido a través de diferentes montajes la historia de Grecia, remontándose 3.000 años en el tiempo para recordar al público que fueron ellos, los griegos, quienes se inventaron la gran fiesta del deporte. En esta foto, los artistas, bañados en plata, emulan a sus antepasados.APUn malabarista toma parte en los espectáculos de inauguración de los Juegos de Atenas.REUTERSUn actor representa en el Estadio Olímpico el papel de Centauro, una de las más importantes figuras de la mitología griega, durante la inauguración de los Juegos.REUTERSTras el izado de la bandera y el himno nacional, los fuegos artificiales, han iluminado el impresionante estadio olímpico, cuya cubierta ha sido diseñada por el arquitecto español Santiago Calatrava.REUTERSEl presidente del Comité Olímpico Internacional, Jacques Rogge, (dcha.) da la mano al niño griego que ha surcado la piscina del estadio con su barquito, símbolo de la infancia. Al lado de ambos, la presidenta del comité organizador de los Juegos de Atenas, Gianna Angelopoulos-Daskalak, y el presidente griego Constantinos Stefanopoulos.REUTERSUn niño ondeando la bandera griega ha recorrido en un enorme barquito de papel la piscina improvisada del Estadio Olímpico de Atenas. Su paseo ha sido aplaudido por las miles de personas que abarrotan las gradas del recinto deportivo.REUTERSEl césped del estadio se ha convertido, como por arte de magia, en una gran piscina de agua cristalina al son de cientos de tambores. De ese lago artificial ha surgido la majestuosa figura de un centauro (mitad hombre, mitad caballo), que sido el encargado de lanzar una flecha que se ha convertido en cometa.APLos cinco aros, que representan los cinco continentes, han ardido en un espectacular comienzo de ceremonia en el Estadio Olímpico de Atenas. El centro del recinto deportivo se ha convertido durante minutos en una fabulosa piscina, de la que han surgido en llamas los famosos aros, símbolo universal del olimpismo.REUTERS
