“No vi un duro en mi primer contrato. Ahora veo el dinero y lo toco”
La cantante de música urbana Mala Rodríguez se suma al proyecto Ballantine’s Stay True Records para una charla directa, entretenida y muy confesional con Joe Pérez-Orive. Una conversación que deja sorpresas como estas: pensó abandonar la música tras ganar uno de sus dos Grammys Latinos (que, por cierto, tiene escondido)
A María Rodríguez Garrido (Jerez de la Frontera, 45 años) la llaman La Mala Rodríguez desde su infancia sevillana porque no se callaba. “Decía lo que pensaba”, cuenta a su anfitrión, el exjurado de Operación Triunfo Joe Pérez-Orive, en la singular tienda de discos donde se graba Ballantine’s Stay True Records. La Mala se convirtió en 2010 en la primera artista femenina en ganar el Grammy Latino a la mejor canción urbana por No pidas perdón, y repitió en 2013 por su álbum Bruja. En 2019, se la reconoció en España con el Premio Nacional de Músicas Actuales.
“Hay mucho de Mala y mucho de María en mi vida”, admite la cantante en la charla, recogida en el vídeo que encabeza estas líneas. La Mala comparte con naturalidad lo que aparece por su cabeza; desde que su expareja le pegó una paliza a un fan que le pidió a la artista que le firmara un autógrafo cerca de su ingle hasta que no sabe cuántos discos ha sacado (son siete): “No me sé ese número, lo que sé es que tengo tres hijos”, le confiesa a un atónito Pérez-Orive. El entrevistador se ríe sorprendido por la autenticidad de la artista que, siendo ella misma en todo momento, se salta a la torera las expectativas sociales, esas que impiden a muchos mostrarse como son. Porque La Mala es espontaneidad, por ejemplo, cuando habla de su supuesto pique con Rosalía o de que la critiquen por enseñar su cuerpo en internet. De hecho, cuando la presentadora Mary Ruiz le lee los comentarios negativos de las redes sociales, La Mala se envalentona: “Mi madre no me ha puesto hora para llegar a casa, ¿qué límites me va a poner a mí la gente?”.