El regreso de Los Piojos ante 350.000 personas: el grupo de rock argentino que marcó una década
La popular banda, pieza clave del rock latinoamericano de los años noventa, tendrá este sábado el primero de los siete conciertos que dará en Buenos Aires. “El reencuentro es por un tiempo limitado”, asegura su líder, Ciro Martínez
Se trata del acontecimiento musical del año en Argentina. Los Piojos, el grupo de rock argentino más popular de la década de los noventa, separado desde hace 15 años, regresa a los escenarios —y lo hará en grande— con siete conciertos en el Estadio Único de La Plata en Buenos Aires, el primero programado para este sábado. Al reencuentro de la banda que marcó el panorama musical argentino de la época, asistirán más de 350.000 personas —53.000 por fecha—. “Hay mucha alegría y una expectación eno...
Se trata del acontecimiento musical del año en Argentina. Los Piojos, el grupo de rock argentino más popular de la década de los noventa, separado desde hace 15 años, regresa a los escenarios —y lo hará en grande— con siete conciertos en el Estadio Único de La Plata en Buenos Aires, el primero programado para este sábado. Al reencuentro de la banda que marcó el panorama musical argentino de la época, asistirán más de 350.000 personas —53.000 por fecha—. “Hay mucha alegría y una expectación enorme. Es un reencuentro por los 15 años [de la separación] y creo que la gente lo va a disfrutar mucho”, contaba Ciro Andrés Martínez (Buenos Aires, 56 años), líder, vocalista y letrista de la banda, en conversación con EL PAÍS en Madrid en septiembre de este año. Lo hacía apenas anunciado el regreso del grupo y durante una gira europea con su otra formación, Ciro y los Persas, la que fundó cuando Los Piojos se separaron y que todavía lidera. “Los Persas gozan de muy buena salud y casi todos los miembros de Los Piojos tienen sus propios proyectos. El reencuentro es por un tiempo limitado”, adelantaba.
“Ciro es el que manda, obviamente”, cuenta Marcelo Gobello, escritor y periodista argentino especializado en música. Del vocalista sale la idea de reencontrar al “grupo de rock de autor en castellano”, según Gobello, que fue “durante diez años el mejor y el de mayor convocatoria”. Una banda reconocida musicalmente por mezclar géneros y ritmos. “La fusión de la música rioplatense con el rhythm and blues de los Rolling Stones fue algo muy novedoso”, afirma Juan Cruz, periodista musical y autor del libro Los piojos en los 90. Del barrio a los estadios (Gourmet musical, 2024), un texto que pensaba escribir del rock argentino de la década, pero que terminó dedicando exclusivamente al grupo compuesto por: Ciro a la voz, Daniel Piti Fernández en guitarra, Miguel Ángel Micky Rodríguez al bajo, Daniel Buira a la batería y Gustavo Tavo Kupinski a la guitarra y Lisa Di Cione en los teclados.
La unión surgió a finales de los ochenta y ya en 1992 grabaron el primero de sus once discos. “Comenzaron en bares muy chicos en Buenos Aires y rápidamente generaron una conexión con la gente. Siempre tuvieron un crecimiento progresivo, nunca se estancaron”, cuenta Cruz. Además de su música, el periodista ve en Martínez un elemento indispensable del éxito de la banda: “Ciro es un artista que desde la élite intelectual miran de costado, pero que resucitó, renovó y reivindicó a los letristas argentinos”. Antes de empezar con la música, el cantante de la banda primero probó con las artes escénicas y estudió un tiempo en el teatro El Baldío de Ciudad Jardín en Buenos Aires. Sus conciertos son la unión de sus dos pasiones. “Es un entretenedor, en el mejor sentido de la palabra. Un actor que canta, no un cantante que actúa”, argumenta Cruz.
Eso y una enorme afición de la banda por el fútbol —Martínez es aficionado de Boca, Tavo, Piti y Miki de River y Dany de Independiente—, siempre reflejada en sus conciertos, hacen que su público desborde pasión al escucharlos en vivo, una euforia muy parecida a la de los estadios. “Es una banda muy futbolera y en sus conciertos el público tiene mucho protagonismo. Y la voz de Ciro es como si alguien cantara en la cancha, pero afinado”, cuenta Cruz.
Ese desborde pasional explica, para Marcelo Gobello, que el grupo pueda generar tanta convocatoria años después de su separación y en un país en una perpetua y profunda crisis económica: “En las peores crisis, los estadios se siguen llenando para el fútbol o para la música. La gente gasta su dinero en esto”. Ciro Martínez también es consciente de lo que su grupo despierta y que también deja florecer un sentimiento de patriotismo: “En la época de los militares en Argentina [después del golpe militar de 1976] ellos eran dueños de todo. Y el patriotismo era como una mala palabra. Los Piojos contribuimos a recuperar eso, devolver el estar orgulloso de nuestros símbolos patrios y de las cosas buenas que tenemos como país”.
Después de la separación del grupo por problemas internos, y con el éxito de Los Persas, no había muchas señales que adelantaran un regreso. Todo empezó el nueve de noviembre del año pasado cuando Ciro invitó al escenario de un concierto de Los Persas a Daniel Piti Fernández, el guitarrista de Los Piojos. “Vamos a recibir a un viejo compañero de aventuras, un viejo amigo”, dijo para introducirlo. Ambos no habían encontrado sus caminos desde el último concierto de Los Piojos en 2009 en el Estadio Monumental de River Plate, como sí había sucedido con el resto de los integrantes de la banda original. El suceso comenzó los rumores de un posible reencuentro, que se intensificaron a mediados de mayo de este año, cuando en la cuenta de Instagram de la banda se anunciaba que saldría la grabación de ese último concierto, 15 años después. “Con el tema de los 15 años yo venía pensando en la posibilidad de un reencuentro, de un festejo. Pero antes dijimos: ‘Eso sí, es tiempo de sacar el disco que tenemos’. Yo ya lo había yo mezclado con el ingeniero hace un tiempo, solo esperábamos una fecha redonda”, contaba a EL PAÍS Ciro Martínez.
El anuncio oficial llegó el 4 de septiembre. Los Piojos confirmaban su vuelta con dos conciertos, que se convirtieron en cuatro y después en siete, en el Estadio Único de La Plata. La banda volverá, eso sí, sin uno de sus integrantes originales: Micky Rodríguez, que, según ha dicho, no le consultaron. “Me enteré por las redes al igual que ustedes que había un regreso, si se puede llamar así. Me enteré por las redes que el lugar iba a ser La Plata, me enteré por las redes las fechas. Soy uno de los fundadores de Los Piojos y no participé en ninguna decisión. Ninguna”, publicaba el guitarrista a los pocos días del anuncio en su cuenta.
“Es como si los Rolling vuelven sin Keith Richards”, compara Marcelo Gobello. Una polémica que no ha paliado ni un poco la expectativa que se ha generado. “Se siente mucha ansiedad entre la gente y entre los músicos también”, cuenta Cruz. A partir de este jueves, Los Piojos volverán, para calmar la ansiedad popular, a subir a los escenarios, con un “gran show”, según el líder . “La emotividad va a ser muy grande, algo muy lindo de vivir”, decía. Y adelantaba: “Habrá sorpresas que no voy a contar”.