‘Salvados por la campana’, trapos sucios y aniversario

Ya han pasado 25 años desde que Zach, Slater, Kelly, Jesse, Screech, Lisa y el señor Belding se asomaron a la pequeña pantalla en Estados Unidos. En realidad, ha pasado algo más de tiempo, porque Salvados por la campana, la popular comedia adolescente que arrancó en agosto de 1989, fue una serie derivada de Good morning, MIss Bliss, en la que ya aparecían cuatro de los personajes que más tarde conseguirían hacerse populares gracias a sus historias ambientadas en el instituto Bayside.

Aquel primer intento no consiguió el éxito esperado y solo se quedó en una temporada, pero la cadena estadounidense NBC no se dio por vencida y lo volvió a intentar. Esta vez sí: la nueva serie estaría en antena hasta 1993 y todavía permanece en la retina de sus miles de seguidores. Incluso contó con dos continuaciones en forma de series: Salvados por la campana: años de Universidad, que solo duró una temporada en antena, y Salvados por la campana: la nueva generación, que llegó a contar con siete entregas.

25 años después de la emisión de aquel primer capítulo, la serie sigue dando que hablar. Y lo hace a través de una película para televisión que el canal estadounidense Lifetime emitirá el 1 de septiembre. The Unauthorized Saved by the Bell Story (La historia no autorizada de Salvados por la campana) toma como punto de partida entrevistas al equipo y los actores de la serie para recrear lo que ocurría detrás de las cámaras.

El telefilme está basado en el libro Behind the bell (Detrás de la campana), que publicó en 2009 Dustin Diamond (Screech en la ficción). En él, el actor, que actúa también como productor ejecutivo de la película, aseguraba que todos los miembros del reparto adolescente, salvo él, se acostaron juntos, participaron en tríos y que algunos llegaron a consumir drogas durante el rodaje de la serie. Nada que ver con la imagen que proyectaban sus personajes. De hecho, según la cadena responsable del telefilme, el largometraje explorará "las experiencias de seis jóvenes actores desconocidos que son colocados en el foco de atención de Hollywood, exponiendo el reto de crecer bajo el escrutinio público mientras intentan mantener la reluciente y pura imagen de sus populares personajes tanto dentro como fuera de la pantalla". La polémica está servida.