La cocinera Leonor Espinosa se lanza al Congreso por el Partido Liberal: “Todo lo que hago a través de la cocina es política”
La chef colombiana, recocida como una de las mejores de América Latina, da un salto con un discurso muy crítico del Gobierno de Gustavo Petro

La cocinera Leonor Espinosa, reconocida desde hace varios años como una de las mejores chefs de Colombia y de América Latina, ha decidido dar un salto a la política y competir en las elecciones legislativas que se llevarán a cabo en marzo del próximo año. Espinosa ha confirmado este viernes que se lanzará con el histórico Partido Liberal, como la cabeza de su lista a la Cámara por Bogotá. Si llegara a ser elegida representante de los capitalinos, dice, no piensa del todo abandonar su premiado restaurante, Leo, que convoca a comensales de todas las esquinas del mundo. “Puedo seguir siendo la creativa del restaurante”, dijo en entrevista con Blu Radio. “Todo lo que hago a través de la cocina es política, es un oficio que cohabita en mi”, asegura.
Espinosa nunca ha sido candidata, pero tiene contactos con los poderes del Partido Liberal. Es familiar de Héctor Olimpo Espinosa, precandidato presidencial del partido, exgobernador del departamento de Sucre (donde Leonor se crió) y viceministro del Interior a finales del Gobierno de Juan Manuel Santos. La hermana del exgobernador, Karina, es senadora por el mismo partido. La famosa cocinera cuenta que debatió con él si ella debería lanzarse, pero que quien la invitó a participar fue otra cara del liberalismo, Maria Paz Gaviria, la hija del director del partido, el expresidente César Gaviria. Esa heredera se lanzará también, con el número 100 a la lista al Senado.
“Soy una especie de fórmula de María Paz, coincidimos mucho entendiendo la importancia de la cultura para el desarrollo del país”, dijo Espinosa en la entrevista a Blu. Gaviria es una de las figuras más poderosas en el mundo de la cultura en Colombia. Durante 13 años fue directora de artBo, la poderosa feria de arte que es apoyada por la Cámara de Comercio de la capital, reconocida como una de las más importantes de América Latina, y en donde exponen artistas nacionales e internacionales. Renunció en septiembre para llegar a la política electoral en la que estuvo su hermano, Simón, exdirector de Planeación Nacional. Durante ocho años, de 2006 a 2014, él estuvo en el cargo al que ahora aspirará Leonor Espinosa: fue representante por Bogotá y llegó a ser presidente de la Cámara.
“La gastronomía es un motor de desarrollo y es cultura”, ha dicho la chef colombiana a medios sobre su propuesta a la política. Recordó que durante los últimos 17 años ha trabajado con comunidades campesinas, indígenas y afros: “conozco de primera mano como se produce, como se transforma y como circula el alimento”. De ser elegida, insiste, no dejará de tener un rol en su famoso restaurante en el norte de la capital. “La cocina no se cierra, se extiende, la cocina necesita de plataformas importantes para que se entienda su importancia en el desarrollo económico del país”, añadió.
Espinosa ya se ha hecho conocer en el debate público por sus posturas contra la deforestación, o por pedirle a un funcionario de Estados Unidos que vean la hoja de coca como ingrediente más y no como cocaína. Se ha hecho un nombre en un mundo de chefs, que usualmente dominan los hombres, algo que recordó en 2022 cuando la organización The World’s 50 Best Restaurants la galardonó como la mejor cocinera del mundo. “Me tocó enfrentarme a un mundo de hombres donde no era respetada ni en mi propia cocina. Tuve que ser valiente y sacar güevas. Entonces fui de cierta manera arrogante y agresiva“, dijo entonces a EL PAÍS.
En los últimos años ha sido crítica del Gobierno de Gustavo Petro desde sus redes sociales. “No se puede negar que los gobiernos anteriores también fueron corruptos, pero este, el autoproclamado “gobierno del cambio”, no solo los ha superado, sino que además se lleva la medalla de oro en ingobernabilidad e incompetencia”, escribió en marzo en X. Ha criticado especialmente el alto gasto público y el creciente déficit fiscal, así como la agenda ambiental del presidente que dice darle prioridad a esta. “La política de conservación del #Amazonas del gobierno, aunque ambiciosa en su discurso —como tantas otras—, enfrenta grandes desafíos en la práctica. La deforestación sigue siendo un problema crítico, impulsada por la tala ilegal y el recrudecimiento del narcotráfico, entre otros factores", decía hace un año.
Si el Partido Liberal se ha dividido entre figuras afines al petrismo y otras más opositoras, la chef llega para reforzar en campaña el equipo que ha sido más crítico al presidente.
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