Las autoridades buscan una avioneta en Antioquia que desapareció con 10 pasajeros a bordo

La Aeronáutica Civil de Colombia coordina las labores de búsqueda de una avioneta tipo Cessna 402 con matrícula HK2522 de la aerolínea Pacífica, que perdió contacto con el control del tránsito aéreo a las 17:30 en la tarde del miércoles 8 de enero. La aeronave cubría la ruta entre Juradó, un pequeño municipio de unos 7.500 habitantes, ubicado en el norte del departamento del Chocó, y el aeropuerto Enrique Olaya Herrera de Medellín, en Antioquia, con 10 personas a bordo; ocho de ellas viajaban como pasajeros y las otros dos como tripulantes. Entre los pasajeros, cinco de ellos de una misma familia, estaban tres menores de 4, 8 y 15 años de edad. Hacia las cuatro de la tarde del jueves, el gobernador de Antioquia contó en redes sociales que “la aeronave desaparecida ya fue avistada en zona rural de Urrao”. Los autoridades, dijo la Aeronáutica Civil, “trabajan para acceder al sitio exacto del accidente”.

Con el apoyo de la Dirección Técnica de Investigación de Accidentes y de la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC), la Aerocivil delimitó un área de búsqueda de 40 kilómetros cuadrados, siguiendo las señales del sistema localizador de emergencia de la aeronave. Se trata de un área boscosa, ubicada en zona rural entre los municipios de Betulia y Urrao en Antioquia, a unos 120 kilómetros de Medellín. Hasta la mañana de este jueves se habían realizado tres sobrevuelos.

“Hemos recibido alrededor de 43 actualizaciones de la radiobaliza. Sin embargo, nos da unas ubicaciones muy separadas. Estamos haciendo un análisis más técnico desde la órbita satelital para verificar la precisión con que nos pueda aportar información”, declaró el coronel Juan José López, director de operaciones de navegación aérea. Las primeras 48 horas son cruciales para el trabajo de búsqueda, remarcó el funcionario. A las labores se han sumado organizaciones de apoyo internacional. Aunque los mecanismos de atención y búsqueda se activaron desde el momento en el que se conoció la emergencia, las condiciones climáticas solo permitieron realizar las primeras operaciones desde el aire en la mañana del jueves.

Las autoridades de Antioquia también respaldan los operativos, incluyendo el despliegue por tierra. “Hemos venido trabajando en ese rango de acción, 40 kilómetros que comprometen tres municipios: Urrao, Betulia y Anzá y hay preliminarmente una información donde podríamos tener un foco de búsqueda en el cerro San José, en el Valle del Penderisco”, reportó el director de Gestión del Riesgo de Antioquia, Carlos Andrés Ríos, desde la sala de crisis que se instaló en el aeropuerto Enrique Olaya Herrera. Las autoridades habilitaron un Puesto de Mando Unificado (PMU) en el aeropuerto de Urrao.

La Gobernación del Chocó trabaja en articulación con las demás autoridades. “El PMU que se ha establecido en el municipio de Urrao dispone de 4 aeronaves y un equipo de rescate de casi 80 unidades conformado por las fuerzas de socorro distribuidos entre grupo aéreo y grupo terrestre. El rango de búsqueda se ha ampliado a los municipios de Urrao-Betulia-Caicedo”, escribió la gobernadora Nubia Carolina Córdoba en su cuenta de X.

Diez pasajeros a bordo y una pista inconclusa

Cinco de los diez pasajeros de la avioneta forman parte de una misma familia. En la aeronave viajaban Angie Sanclemente junto a sus hijos Greimar Castro Sanclemente de 8 años y Grettel Castro Sanclemente de 4 años, y a su hermana Cristal Sofía Hernández de 15 años. Todos residentes en la ciudad de Medellín. También se desplazaba Raquel Palacios, de 38 años, madre de Angie y Cristal, y abuela de los menores, quien planeaba viajar hasta Cali a visitar a su madre enferma.

Además, se movilizaban Danny Moreno Culma, hija de una exconcejal de Juradó y estudiante de un curso de belleza en Medellín; Miguelina García, una juradoseña que había estado de vacaciones en el municipio y viajaba de regreso a Cali; y Yoarledis Valencia, esposa de un comerciante local. Como tripulantes, iban los capitanes Santiago Montoya y Luis Guillermo Clavijo.

Juradó es una pequeña población en el norte del Pacífico colombiano, en límites con Panamá, que tiene una pista de aterrizaje rudimentaria y a medio terminar. Solo aerolíneas con pequeños aviones privados prestan el servicio para movilizar a pasajeros entre Juradó, Medellín y Quibdó, la capital del Chocó, por cerca de 300.000 pesos cada trayecto (unos 75 dólares), una suma considerable para un municipio con elevados niveles de pobreza. El alcalde Denio Jiménez Rivas denuncia que desde el año 2017 se realizaron inversiones cercanas a los 25.000 millones de pesos (6.000 dólares) con recursos de regalías en obras de pavimentación de la pista que quedaron inconclusas.

“El aeropuerto quedó a medias. Eso no ha permitido que entren aerolíneas comerciales serias… Lo hacen de manera particular. Es doloroso decirlo, pero es uno de los grandes problemas que afrontamos, que no podemos contar con un aeropuerto más seguro para que lleguen vuelos comerciales”, sostuvo el alcalde en conversación telefónica.

Mientras avanzan las labores de búsqueda, las familias esperan noticias sobre sus seres queridos. “Juradó es pequeño y hay un vínculo inseparable con Bahía Solano. Igual pasa con Nuquí. Casi todas nuestras familias tienen un poco de estos tres municipios. En mi caso, mi mamá es juradoseña, también mi madrastra. La desaparición de la avioneta es angustia para todo un pueblo”, expresó la escritora chocoana Velia Vidal, amiga de Miguelina García, una de las pasajeras que viajaba a bordo de la avioneta desaparecida.

La Aeronáutica Civil pidió la colaboración de las comunidades y residentes cercanos a la posible ubicación de la aeronave para que, en caso de contar con información, se comuniquen con el Centro de Coordinación de Rescate (SAR) al número 3176687798. “Agradecemos el apoyo de las comunidades y reiteramos nuestra disposición para atender cualquier información relevante que permita avanzar en esta labor”, enfatizó la institución.