Detenidos cinco miembros de la Armada y 19 civiles por tráfico de migrantes

La Fiscalía General de la Nación ha anunciado este martes la captura de 24 personas, entre ellas cinco miembros de la Armada Nacional, por presuntamente hacer parte de una red de tráfico de migrantes que se extendía por varias partes del país. La organización criminal se llamaba La Agencia, según el ente acusador, y transportaba de manera irregular a migrantes hasta San Andrés y el Tapón del Darién, para luego “gestionar” su salida “a Estados Unidos, Canadá y Australia”. Las detenciones ocurrieron en varias zonas que son nodos de los flujos migratorios: Bucaramanga, Cartagena, Coveñas, Cúcuta, Maicao, Necoclí, San Andrés, Santa Marta y también en el Golfo de Urabá. Los acusados se enfrentan a cargos de concierto para delinquir, tráfico de migrantes, cohecho propio y lavados de activos.

Ricardo Romero, el fiscal delegado Contra las Finanzas Criminales, explicó en una rueda de prensa que la red “manejaba dos modalidades” para mover a los migrantes. La primera era con visas falsas. La Fiscalía señala que tres mujeres que hacían parte de la organización se dedicaban a gestionarlas. Otro de los capturados era un funcionario de Migración Colombia que trabajaba en el puesto de control migratorio de Capurganá, un corregimiento chocoano muy transitado por migrantes que viajan al Darién. Supuestamente, este trabajador estampaba sellos falsos en los pasaportes, pero no registraba los datos en el sistema migratorio.

La segunda modalidad era la corrupción en la Armada Nacional. El oficial y los cuatro suboficiales de esta entidad capturados en el operativo son señalados de omitir los controles de señalización marítima y de alertar a la red sobre la ubicación de buques militares. El ente acusador alega que aceptaban sobornos de entre 3 y 10 millones de pesos (entre 700 y 2.500 dólares) por ello. Esta fue una parte clave de la operación criminal, pues La Agencia se dedicaba a trasportar a los migrantes en embarcaciones desde Colombia hasta Centroamérica. De allí, un coyote los acompañaba hasta Estados Unidos.

La investigación contra la red empezó en el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía (CTI), división del ente investigador. Duró dos años y contó con la participación de Migración Colombia. A lo largo del operativo, se interceptaron 42 celulares y se utilizaron encubiertos presenciales y virtuales.

Las dos rutas que usaba la organización para transportar a migrantes son dos de los corredores migratorios más peligrosos del mundo. De acuerdo con datos oficiales, desde 2018 al menos 258 personas han muerto o desaparecido en el Darién, la inhóspita selva que conecta Colombia y Panamá. Sin embargo, numerosos expertos aseguran que las cifras reales son mucho más altas. En lo que va de este año, casi 500.000 personas han cruzado el tapón.

Por otra parte, la isla de San Andrés, ubicada en el Caribe colombiano y cerca de Centroamérica, se ha vuelto cada vez más tentadora como punto de salida para los migrantes que salen de Sudamérica. El pasado 21 de octubre, una lancha que transportaba a colombianos y venezolanos desde la isla hacia Nicaragua desapareció en el mar. Hasta el día de hoy, ni la embarcación ni las víctimas han sido encontradas.

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