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Los empresarios de Silicon Valley son los más generosos

Seis de los diez mayores donantes de obras filantrópicas pertenecen al sector tecnológico

El magnate Bill Gates.
El magnate Bill Gates.CORDON

Los grandes protagonistas del sector tecnológico en EE UU están dando un nuevo dinamismo a la filantropía. Hasta el punto de que entre los 10 mayores donantes en 2014 aparecen seis nombres del universo que se asocia con Silicon Valley. Dos son viejos conocidos: Bill Gates y Paul Allen, cofundadores de Microsoft. Vuelven a despuntar Sean Parker, de Napster, y Sergey Brin, de Google. Y ahora se suman al exclusivo club Jan Koum, de WhatsApp, y Nicholas Woodman, de GoPro.

Bill Gates, a través de la fundación que tiene junto a su mujer Melinda, movilizó el año pasado 1.510 millones de dólares (1.335 millones de euros), según Chronicle of Philanthropy. Es el magnate que más dinero de su fortuna destinó a obras benéficas. Le sigue con 1.000 millones Ralph Wilson, el difunto propietario del equipo de fútbol americano Buffalo Bills. El tercero es Theodore Stanley. Jan Koum debuta colocándose justo detrás, con 556 millones.

El último en sumarse a la lista es Jan Koum, de WhatsApp

Hace solo un año que el empresario de origen ucraniano vendió su aplicación de mensajería a Facebook, por 21.800 millones. Cuatro meses después fue Nicholas Woodman el que llevó su compañía a Wall Street, que se estrenó con una valoración de 1.600 millones en medio de una gran expectación. Ahora ocupa junto a su mujer Jill el sexto lugar del ranking, con 500 millones. El grueso de su generosidad fue a la Valley Community Foundation.

Entre los dos nuevos entrantes se coloca el quinto Sean Parker, con 550 millones. Están justo por delante Michael Bloomberg, una de las figuras más reconocidas en el mundo de la filantropía, que aparece el séptimo con 462 millones y que es muy consistente a la hora de dar. La gran diferencia es que los tres techie no llegan a los 40 años y distribuyen su fortuna cuando siguen en activo en la gestión de sus compañías, no como hizo Bill Gates.

Sergey Brin, cofundador de Google.
Sergey Brin, cofundador de Google.BLOOMBERG

Es el caso también de Sergey Brin, que aparece el noveno en la lista con 383 millones, más que los 298 millones de Paul Allen. Más abajo están también Larry Page, Steve Ballmer, Pierre Omidyar y Marc Beinoff. Mark Zuckerberg fue también protagonista en 2014 de varios titulares por su contribución de 25 millones al fondo que creó para la lucha contra el ébola, pero sus donaciones no fueron suficientes para meterle este año en la lista.

El medio centenar de integrantes de esta lista movilizó el año pasado donaciones por un valor combinado de 9.800 millones, de los que 2.300 millones corresponden a seis empresarios de Silicon Valley que no llegan a los 50 años. Si lo que se toma como referencia son todas las contribuciones benéficas que se hicieron en el sector tecnológico, representaron el 47% del total en 2014 incluyendo la generosa aportación de los Gates. El total de los 50 mayores donantes supera en un 27,5% la de 2013.

Aunque los autores de la lista y las organizaciones benéficas lo ven como un paso en la buena dirección, también señalan que estos donantes del sector tecnológico forman parte de una especie de fraternidad muy exclusiva. Una de las características de los nuevos filántropos es que se implican mucho en el proceso de beneficencia, porque tratan la donación como una inversión que debe dar resultados tangibles cuando llega a la sociedad.

Jan Koum, de WhatsApp.
Jan Koum, de WhatsApp.REUTERS

Por eso las nuevas generaciones de donantes recurren más al trabajo de firmas especializadas en la gestión de fortunas, buscando dar valor a un dinero que de otra manera quedaría aparcado en una cuenta bancaria. Esto explica por qué el 60% del dinero movilizado, unos 5.800 millones, fue a parar a un total de 17 fundaciones. Los otros grandes receptores del dinero que acumulan las grandes fortunas son las universidades, destinados principalmente a financiar proyectos de investigación.

Los 10 mayores donantes hicieron contribuciones el año pasado por un valor combinado de 6.200 millones, equivalente al 64% del total. La edad media es de 73 años. El más veterano es el banquero retirado David Rockefeller, con 99 años de edad. El más joven es Sean Parker, con 35 años. Junto a la docena de donantes del sector tecnológico, 11 son del mundo de las finanzas, cuatro heredaron su fortuna y tres son del sector inmobiliario.

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