7 fotosLas diosas tristes de NepalVírgenes preadolescentes son idolatradas como avatares de diosas ern el valle de Katmandú. Y se convierten en niñas-objeto, aisladas de la sociedad hasta que alcanzan la pubertad 25 abr 2014 - 20:16CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceLa Kumari real de Basantapur es venerada como la encarnación de la diosa Taleju. Su bendición es indispensable para que el jefe del estado gobierne ejerza sus funciones. Festival Indra Jatra, Octubre 2013.Sampurna ManandharLos nepalíes devotos bailan la danza tradicional Pulukisi junto con una deidad con forma de elefante en el día principal de Indra Jatra. El festival marca el fin del monzón y el inicio del otoño.Sampurna Manandhar.Rushmila Shakya, de 31 años, fue Kumari real entre 1984 y 1991. Sus memorias conllevaron cambios en la tradición. Es la única exdiosa con estudios superiores.Ángel L. Martínez CanteraSamita Bajracharya, de 12 años, finaliza su periodo como Kumari de Patan cuando le llegue la menstruación, como el resto de diosas del valle de Katmandú.Ángel L. Martínez CanteraSamita pasa su reclusión divina con entretenimientos mortales como tocar el sarode, especie de cítara nepalí.Ángel L. Martínez CanteraSamita, Kumari de Patan, no puede salir a la calle, pero está obligada posar para deleite de los visitantes, que le llevan dinero y otras ofrendas.Ángel L. Martínez CanteraShoba Bajracharya, madre de Samita (a su derecha) cree que su hija está perdiendo parte de su infancia, pero está muy orgullosa de su estatus como diosaÁngel L. Martínez Cantera