De Atocha a Chamartín en 12 minutos por el "túnel del orgullo"
Fomento pone mañana en servicio la nueva línea de Cercanías que une el sur y el norte de Madrid
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha inaugurado esta mañana la nueva conexión ferroviaria de Cercanías entre las estaciones de Atocha y Chamartín. Y le ha cambiado el nombre: de nuevo túnel de la risa -apodado así porque tardó 30 años en construirse- a "túnel del orgullo y de la modernidad". El acto, que ha comenzado con un recorrido en tren entre Parla y la estación de Nuevos Ministerios, ha congregado nada menos que a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, y al líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez. Tras este viaje inaugural, la infraestructura, que ha enfrentado durante años a Aguirre y Álvarez, entrará en funcionamiento mañana. El primer tren con pasajeros lo atravesará a las 5.30.
El ambiente entre los políticos de distinto signo era más bien frío, aunque los periodistas que han acudido al acto tampoco han tenido mucha oportunidad de pulsar el ambiente, ya que los han mantenido a raya, en concreto, a más de diez metros, distancia a partir de la cual no se les permitía acercarse. De hecho, han hecho el viaje, que ha arrancado a las 11.00, en otro vagón. Sólo han podido romper la barrera los fotógrafos. Durante el trayecto, se ha podido ver a Tomás Gómez sentado a la izquierda de Álvarez y con quien departía, mientras Aguirre tenía los ojos fijos al frente y Gallardón miraba para otro lado.
"El tiempo es oro", dice Álvarez
En apenas ocho minutos, el convoy ha cubierto el tramo Atocha-Nuevos Ministerios y Renfe asegura que en 12 se enlaza Atocha-Chamartín, el trayecto completo. A partir de mañana, unos 250.000 viajeros lo cruzarán al día. El turno de discursos ha sido breve, ya que sólo ha hablado Álvarez, aunque Aguirre se ha acercado posteriormente a la prensa para comentar la jugada. Álvarez ha subrayado que esta infraestructura es el resultado de "una firme apuesta" de Fomento por las Cercanías de Madrid y, en consecuencia, con los municipios en los que el transporte público es un factor de reequilibrio territorial capaz de atraer inversiones económicas y elevar el bienestar de sus ciudadanos. Al término del acto y, a petición de Álvarez, Aguirre, Gallardón, Gómez y Jesús Dionisio (alcalde de Aranjuez) han unido con ella la cinta que simbolizaba la nueva conexión ferroviaria entre el sur y el norte de la Comunidad.
La ministra ha detallado ahorrará tiempo -"que para los madrileños es oro"-, evitará la saturación de Atocha y descongestionará la línea 1 de Metro, con cuya red mejorará la interconexión a mediados de 2009 cuando entre en servicio el intercambiador de Sol. Por su parte, la presidenta ha comenzado por felicitarse por la puesta en marcha del nuevo túnel de la risa". "Bienvenida sea, es una magnífica noticia". A partir de aquí, la crítica. Aguirre ha recordado que no está totalmente acabada la obra, puesto que falta la conexión con la estación de Metro de Sol -unas obras que mantienen vallada la Puerta del Sol-. Además, ha recordado que la obra no es "nueva" y que la inició el Gobierno del PP: "La primera piedra de esta obra se puso en el año 2003, siendo Alberto Ruiz-Gallardón presidente de la Comunidad, y el ministro de Fomento de entonces, Francisco Alvarez Cascos, la proyectó, la licitó, la adjudicó y la comenzó".
En el vestíbulo de Nuevos Ministerios, Aguirre ha afirmado que, a pesar de que comprende que la estación de Sol es "una obra magna", ignora "por qué razón no se presupuesta lo suficiente para que se pueda terminar en plazo". "Ocho kilómetros en cinco años es bastante menos que los 90 kilómetros que nosotros hemos hecho en cuatro años, en la pasada legislatura", ha remachado. La presidenta sueña con que se termine "para que se pueda hacer el intercambio de viajeros" con las líneas de Metro de Sol. Preguntada por las obras también pendientes de la estación de Metro de Alonso Martínez, la presidenta ha señalado: "Que acabe Sol, de momento".
"Anuncian y no presupuestan", dice Aguirre
La presidenta ha aprovechado para reiterar su tesis del abandono de Madrid: "No hay inversiones del Gobierno de la nación en obra nueva en la Comunidad de Madrid". "Se nos lleva prometiendo un plan de Cercanías para Madrid, me parece que ya son tres años; primero, lo presentó (Rafael) Simancas, luego lo ha vuelto a presentar el actual secretario general, alcalde de Parla (Gómez) y realmente aquí, ni llega el plan de Cercanías ni llegan tampoco las obras previstas para carreteras como carriles para autobuses, todo lo que anuncian y no presupuestan".
Con la construcción de esta segunda conexión subterránea de 8,5 se logra reducir los transbordos en Cercanías y Metro de Atocha. Según los cálculos de Renfe, los pasajeros que vengan de Parla y Aranjuez se ahorrarán 15 minutos al no tener que hacer los incómodos transbordos para dirigirse al centro y norte de Madrid -Colmenar Viejo, San Sebastián de los Reyes, Alcobendas y Tres Cantos-. Ambas líneas, la C-3 (Aranjuez) y C-4 (Parla) tienen 150.000 usuarios al día. Además, los 100.000 viajeros de la C5 (de Móstoles a Fuenlabrada) transbordarán "más rápido" al incrementarse la frecuencia de trenes. La conexión se ha realizado mediante un túnel que discurre al oeste del actual (conocido como túnel de la risa y que en 1933 comenzó a construir Indalecio Prieto) y que enlaza con la red de Metro en Sol-Gran Vía, Alonso Martínez y Nuevos Ministerios. Las obras han durado más de cinco años, con un presupuesto que se disparó a más de 550 millones de euros.
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