Bankinter cree que el sector inmobiliario residencial español ha tocado fondo

Bankinter considera que por primera vez en cinco años y medio el sector de la vivienda muestra síntomas incipientes de recuperación y subraya que el sector residencial en España ya ha tocado fondo y se encuentra en el comienzo de una fase de estabilización que debe dar lugar a una recuperación más lenta.

En un informe sobre el sector inmobiliario español elaborado por el departamento de Análisis, Bankinter estima que tras un 2013 "excepcionalmente" débil, las ventas de viviendas crecerán en los años 2014 y 2015, aunque el momento actual no debe ser considerado la antesala de un "rápido despegue", sino el inicio de una tendencia de recuperación gradual.

A pesar de que los precios han caído un 30 % desde los máximos, el precio de la vivienda aún es muy elevado teniendo en cuenta el esfuerzo necesario para su adquisición.

A pesar de estas caídas, la entidad asegura que existen 150.000 viviendas construidas en el "boom" difíciles de vender ya que están construidas lejos de grandes ciudades, es zonas costeras sin atractivo turístico y en poblaciones "fantasma".

A tenor de que la renta disponible no mejorará de forma sustancial, Bankinter cree que los precios se ajustarán en los próximos trimestres hasta los 1.450-1.470 euros/m2, remontándose a valores de finales de 2003.

La entidad financiera señala que el sector está entrando en una fase de incipiente recuperación de forma que los precios de la vivienda deberían estabilizarse en 2014, para producirse en 2015 una recuperación más sensible de la demanda y de los precios por la mejora del ciclo económico y una reactivación de la promoción en 2016 una vez que se haya reducido el stock actual.

La caída de la población y el limitado volumen de crédito hipotecario harán que el repunte de las ventas de vivienda sea modesto, situándose en el rango de 300.000-320.000 en 2014, para incrementar en 2015 hasta un rango de 350.000-370.000.

En consecuencia, señala Bankinter, el sector inmobiliario se encuentra en un punto de inflexión tras cinco años de dura recesión y volverá a ser una oportunidad de inversión atractiva a lo largo de 2014 teniendo en cuenta que la inversión inmobiliaria debe contemplarse con un horizonte temporal de entre 5 y 10 años.

En este sentido, señala que 2013 finalizará con cerca de 320.000 compraventas de vivienda, una cifra que se reduce a 290.000-300.000 si se elimina el efecto volátil de las operaciones reflejadas este año que corresponden en realidad a compraventas cerradas a finales de 2012 ante el fin de las deducciones fiscales por compra de vivienda y la subida del IVA.

Bankinter asegura que no será necesario que se reduzca el stock de forma significativa para que se reactive la actividad promotora ya que el excedente actual no se consumirá nunca.

De hecho, Bankinter estima que cuando el stock actual descienda por debajo de las 500.000 viviendas, algo que sucederá a lo largo de 2016, la actividad promotora volverá a reactivarse.

Aunque la política monetaria y la actividad supervisora del BCE contribuirán a mejorar el acceso a la financiación, señalan desde la entidad, este proceso será muy gradual por lo que la oferta de crédito será limitada al menos hasta finales de 2014 y seguirá focalizada en la cartera de activos adjudicados de la banca.

En este contexto, Bankinter subraya el mayor protagonismo del alquiler o el atractivo que ofrece el sector inmobiliario español para los inversores extranjeros y los ahorradores, especialmente si se tiene en cuenta el menor retorno de otras alternativas como los depósitos.

Sin embargo, puntualizan desde Bankinter, la demanda de vivienda nueva no volverá a alcanzar las 400.000 casas que se vendieron en 2006 y 2007.