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Las acciones de Criteria se disparan al convertirse en el banco de La Caixa

La nueva entidad analizará posibles operaciones corporativas - Unnim sigue a la primera caja catalana y anuncia que traspasará su negocio a un banco

Lluís Pellicer

Los inversores de Criteria se acostaron el jueves con una empresa de participaciones industriales de La Caixa y despertaron ayer con una sociedad que en breve tendrá el negocio bancario y asegurador de la primera caja catalana. El mercado aplaudió ese cambio. Después de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) suspendiera la cotización de los valores de Criteria el jueves, ayer a las 12.35 estos regresaban al parqué con un alza del 20,76%. Al final del día, la acción cerró con un valor de 5,20 euros, el 16,9% más que antes de la suspensión, por lo que su capitalización bursátil era de casi 17.500 millones.

Criteria se estrenó en Bolsa el 10 de octubre de 2007 a 5,25 euros por acción. Salvo los dos primeros meses, nunca más rebasó ese valor. Ayer lo hizo por momentos. Los mercados premiaron la decisión de La Caixa de traspasar su negocio bancario a Criteria. Una transformación que llega antes de que el Gobierno apruebe su decreto para facilitar la recapitalización del sistema financiero y que puede preceder a la que efectúen el resto de cajas. Anoche, Unnim -la fusión de las cajas de Sabadell, Terrassa y Manlleu- anunciaba la creación de un banco que concentrará su actividad financiera.

Los préstamos a promotores suponen el 14% de la cartera crediticia
La Caixa aparta 1.000 millones para ampliar capital en Servihabitat

El presidente de La Caixa, Isidro Fainé, aseguró ayer que hacía ya años que La Caixa valoraba cómo salir a Bolsa. "No podríamos, pero hemos hallado el camino. Nos gusta el cambio", aseguró. Fainé resaltó en la presentación de resultados de la caja de 2010 y de la reorganización de la entidad que la caja ha querido "anticiparse a los mercados y los reguladores" y asegurar el cumplimiento de los requerimientos internacionales de capital de la futura normativa (Basilea III).

El banco, sostuvo Fainé, tendrá "los mismos empleados, directivos y filosofía". Tampoco los órganos de gobierno de La Caixa ni de Criteria cambiarán, a pesar de la sacudida que le han dado a su estructura. La Caixa seguirá siendo jurídicamente una caja de ahorros, pero a partir de ahora tendrá tres patas: una sociedad bancaria cotizada, una entidad con las participaciones industriales -como Gas Natural, Abertis o Agbar- y la cartera inmobiliaria, y una fundación.

El banco conservará, sin embargo, la participación del 13% en Repsol y la del 5,04% en Telefónica. El director general de La Caixa, Juan María Nin, explicó que esas acciones seguirán bajo el paraguas de CaixaBank porque "los dividendos que generan" las dos sociedades han sido un elemento "estabilizador" de la cuenta de resultados. Ambas participaciones, según Nin, acumulan además unas plusvalías latentes de 3.500 millones de euros, con las que la entidad podría contar en caso de necesidad.

Con la operación, La Caixa controlará el 81% de CaixaBank, lo que le da margen para dar entrada a un inversor o realizar una operación corporativa. Nin fue ambiguo. "No estamos cerrados a nada, ni abiertos a nada. No hay nada encima de la mesa, estas operaciones tardan su tiempo", afirmó, a la vez que no descartó que se incorpore "más capital si hace falta" tras la emisión de bonos por 1.500 millones. El consejero delegado de Criteria, Gonzalo Gortázar, aseguró en una reunión con analistas, sin embargo, que la caja estará "vigilante" ante oportunidades de compra. "Si tienen sentido y vemos valor en esas operaciones, las analizaremos muy seriamente", sostuvo.

La Caixa ganó el año pasado 1.307 millones, el 13,4% menos que en 2009, tras destinar 2.651 millones a dotaciones. El margen de intereses cedió el 19,8%, hasta los 3.764 millones de euros. Ello se debe, en parte, a la llamada guerra del pasivo entre entidades financieras que ayer denunció Fainé y que calificó de "irracional e insostenible". "Si no lo arreglamos, se trasladará al mundo de las empresas y a los ciudadanos, y está perjudicando a los márgenes en el mundo financiero", destacó.

La Caixa también presentó ayer la exposición al riesgo del negocio de la promoción inmobiliaria del futuro CaixaBank. Su cartera de créditos al sector asciende a 26.284 millones -lo cual supone el 14% de su cartera de créditos- con una morosidad del 15,5% y créditos subestándar por otro 6%. Según explicó Fainé, los solares están ahora al 40% del valor de tasación, y los pisos, al 52%, por lo que consideró que están "prácticamente a valor de mercado".

La caja, no obstante, piensa relanzar su negocio inmobiliario a medio plazo. De hecho, la entidad baraja captar capital extranjero para "hacer un gran desarrollo inmobiliario en el futuro", según Fainé. Servihabitat, que hoy dispone de 3.652 millones en activos disponibles para vender, podría convertirse en el futuro en una inmobiliaria que incluso podría salir a Bolsa. Es decir, una nueva Colonial para La Caixa. Por ahora, La Caixa ha decidido inyectarle 1.000 millones mediante una ampliación de capital. Para ello ha apartado esa cantidad de tesorería, que no se ha aportado en la segregación a CaixaBank.

La agencia de calificación Fitch puso el rating de La Caixa en vigilancia con perspectiva "negativa" después de que la caja anunciara su reorganización y la transformación de Criteria en un banco. Por otra parte, La Caixa declaró en su informe anual de gobierno corporativo que el sueldo de Fainé fue de 2,69 millones de euros en 2010, dada su dedicación exclusiva al grupo La Caixa.

Isidro Fainé, ayer, durante la presentación de resultados de La Caixa.
Isidro Fainé, ayer, durante la presentación de resultados de La Caixa.JOAN SÁNCHEZ

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.
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