"Esto no se ve todos los días"
Cientos de militantes socialistas celebran la toma de Benidorm
"¿Qué pasa aquí?" Un veraneante con evidente acento vasco aprovechó la mañana lluviosa para acercarse ayer al espectacular edificio del Ayuntamiento de Benidorm, la capital turística de España. "Que hay una moción de censura", le contestó uno de los cientos de militantes socialistas congregados en el vestíbulo del Ayuntamiento, a unos metros del salón de plenos. "Esto no se ve todos los días", celebró el visitante.
Hace 18 años, en la anterior sede municipal, mucho más pequeña, Maruja Sánchez llegó en coche al Ayuntamiento. Los concejales del PP que elevaron a la alcaldía a Eduardo Zaplana con el apoyo de la tránsfuga socialista tuvieron que hacerle un pasillo para que no fuera agredida. "Pegaron varios manotazos en el capó", recordaba uno de los aquellos concejales, "había mucha tensión".
"Ojo por ojo. Y si Alarte no está con nosotros, que se vaya"
Ayer, a las puertas del salón de plenos, la tensión se disipaba a gritos. "¡Maruja, también a la cola del Inem!", gritaban unos. "¡Esto es un atraco! ¡Esto es un atraco!", replicaban otros, menos, del PP. "Maruja Sánchez ha estado cobrando como asesora durante 18 años, su marido tiene un despacho en el Parque de Bomberos y su hijo trabaja para la Diputación", comentó un militante socialista, "mañana, cuando saque los papeles que tiene firmados con Eduardo Zaplana, sabremos sí ya ha cobrado todo lo que le prometieron".
Agustín Navarro, el nuevo alcalde, no firmará el cese de Maruja Sánchez. Los 32 asesores de Manuel Pérez Fenoll dejan el cargo de forma automática al ser relevado el alcalde.
"Ojo por ojo. Y si a Jorge Alarte no está con nosotros, que se vaya", sintetizó otro militante socialista. El secretario general del PSPV no estaba allí. Ningún cargo orgánico relevante del PSPV asistió al asalto de la alcaldía de Benidorm por parte de Agustín Navarro -que ya ha renunciado a la militancia- sus 11 compañeros elegidos en la candidatura socialista en 2007 y José Bañuls, que fue elegido en la lista del PP pero renunció al partido y a su cargo de concejal en junio.
César Augusto Asencio, alcalde de Crevillent, vicesecretario de Política Autonómica y Local era el cargo de más rango del PP valenciano que acudió.
La música barroca que sonaba en el salón de plenos minutos antes de que arrancara la moción de censura contrastaba con el griterío en el vestíbulo. Cuando un grupo de concejales del PP descendió la escalera desde el primer piso hasta la sala, en una zona acordonada por la Policía Local a la que sólo tenían acceso autoridades y periodistas, sonó un atronador "¡Fuera!, ¡Fuera!, ¡Fuera!".
Carlos Paquet, militante socialista desde 1968, justificaba la moción. "Benidorm está abandonado, debería ser la joya de la corona y es el trasero del león". Paquet comentaba indignado que el gerente de la grúa municipal, un servicio privatizado, era concejal del PP en el anterior mandato. "El pliego de la contrata dice que tienen que conservar las señales de tráfico y las del asfalto ¿has visto cómo están las líneas azules y amarillas?" Y seguía. "El pliego de la contrata de basuras que tiene Fomento de Construcciones y Contratas dice que tiene que regar las calles. Nunca, no tiran ni un balde de agua. ¿Y la máquina quita chicles? Les costó una millonada, la tienen aparcada en un almacén y la calle, llena de setas".
El veterano militante socialista lo tenía clarísimo. "Desde hace 18 años, cuatro familias muy poderosas gobiernan Benidorm para su propio interés, no para el pueblo. Y eso no puede ser. Benidorm ya es una ciudad de casi 100.000 habitantes".
Las cuatro familias en cuestión, los Puchades, los Murcia, los Pérez Devesa y los Barceló, estaban en boca de todos. Pero el grito más repetido era: "¡Agustín! ¡Agustín! ¡Agustín!" Trufado con: "¡Qué bote Maruja! ¡Qué bote Maruja!"
Una señora de edad, peinado de peluquería, y tan alta como elegante, preguntaba: "¿Va salir por aquí el alcalde? Es que es muy majo y quiero despedirme de él".
"Agustín también es muy majo", replicó jocoso Paquet. "¿El tránsfuga? Pero si le han dejado en ridículo varias veces, no le dejaba hacer nada y el propio alcalde le ha revocado varias decisiones. Y no ha tenido que ocultarse. Lo que ha pasado es que han arruinado el Ayuntamiento, se han gastado el cien por cien del presupuesto municipal en construir este edificio. Dijeron que no iban a subir los impuestos y nos han subido un 50% el IBI y nos cobran 60 euros de tasa de basura. Los de izquierdas somos un poco pasotas, pero cuando nos tocan el bolsillo, nos rebelamos".
Cuatro simpatizantes del PP con cara de pocos amigos intentaban negar la masiva presencia de militantes socialistas. "Los socialistas son los que menos vergüenza tienen y los que más se hacen notar". Otra señora, con una banderita del PP, denunciaba: "Los han traído a todos en autobuses desde Alicante".
Manuel Pérez Fenoll, el ex alcalde del PP, salió a la calle en torno a la una de la tarde. Rodeado de micrófonos se oyó un sonoro "¡Manuel, cojonudo!" Y de fondo: "Bien pagá, bien pagá, bien pagá fuiste Pajín".
Quién es quién en la moción de censura de Benidorm
- Agustín Navarro. El alcalde ex socialista vivió en sus carnes la moción de censura de 1991, cuando era concejal. Luego se enfrentó a la dirección local y se exilió políticamente hasta que regresó a Benidorm en 2003 para ser candidato a alcalde. Perdió en dos ocasiones, ahora sabe que esta es su última oportunidad, y llega a la alcaldía de la mano de un tránsfuga y sin el respaldo de su partido de siempre, el PSOE.
- Manuel Pérez Fenoll. Llegó a la alcaldía en 2006 tras la repentina muerte de Vicente Pérez Devesa. Consiguió ser cabeza de lista en las pasadas elecciones, pese a la resistencia del sector zaplanista y del presidente provincial, José Joaquín Ripoll, y ganó por mayoría absoluta. Avalado por el presidente regional y de la Generalitat, Francisco Camps, luchó por la presidencia provincial del PP contra Ripoll, y perdió por cinco votos. Ripoll recuerda que Fenoll metió en la lista al tránsfuga.
- Maite Iraola y José María Pajín. Los históricos dirigentes socialistas, padres de la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, han sido claves en la moción pese a colocar a su hija en una delicada situación. Por eso la madre, concejal y firmante de la moción se ha dado de baja del PSOE antes de que su hija la expulsara. Pajín asegura que el PSOE cumple el pacto Antitransfuguismo, y eso significa que no irán nunca en otra lista socialista. El pajinato, como se conoce a este clan, mantiene un pulso con la dirección del PSPV de Jorge Alarte a raíz de la moción.
- José Bañuls. El edil tránsfuga ya se presentó en 1999 como candidato a la alcaldía de Benidorm como independiente y en coalición con el Bloc en 2003. Llegó al PP en las pasadas elecciones de la mano de Ángela Barceló, y ahora resucita el partido Iniciativa por Benidorm. Bañuls es amigo del empresario local de medios de comunicación Leopoldo Bernabéu, y el PP le vincula con intereses urbanísticos.
- Leopoldo Bernabéu. El empresario, militante del PP, dirige un grupo de comunicación local, Prensa y Noticias, que dispone de una concesión de televisión digital terrestre, una emisora de radio -que carece de frecuencia asignada- y un periódico gratuito. El grupo rompió las excelentes relaciones que mantenía con el PP y ahora reclama al Ayuntamiento más de 1,2 millones de euros por emitir publicidad institucional encargada verbalmente desde el año 2002. Estos medios han dado una amplia cobertura y apoyo a la moción de censura.
- Jaime Doménech y Fernando Moragón. Son dos promotores inmobiliarios, accionistas del grupo Prensa y Noticias, que han tenido varios encontronazos con el PP local, y a los que el PP les atribuye ser los promotores de la moción.
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