El doble crimen de Càlig suma ya cinco encarcelados

El 12 de junio de 2005 los cadáveres de Yalennys, de 23 años, y Juan Manuel, de 25 años, aparecieron maniatados y con sendos tiros en la cabeza en casa de la primera, en el municipio castellonense de Càlig. Desde entonces han detenido a unos, liberado a otros pero, en todo momento, ha sonado la reiterada convicción de la familia de Yalennys de que se trataba de una "venganza" de su ex pareja sentimental. En noviembre de 2008 solo un hombre se sentó en el banquillo de los acusados, Emilio Pérez, al que se le condenó a 46 años de prisión en una sentencia en la que se admitía que el crimen se había cometido con un plan previamente concertado y en conjunción con otras personas no identificadas. Ayer ingresó en prisión el quinto integrante de la supuesta trama que ideó y ejecutó a ambos jóvenes, un empresario gallego, de 60 años, que fue compañero de la joven Yalennys durante varios años.

La Guardia Civil ha detenido en apenas 10 días a otras cuatro personas

En la ardua investigación se desveló la relación entre el empresario y la joven cubana, los cuantiosos y valiosos regalos con los que éste le había agasajado y cómo ésta los había devuelto cuando optó por acabar con la historia. El hombre no aceptó la decisión. Y llegaron las amenazas, también por escrito. Tan acorralada se debió ver Yalennys que escribió una misiva en la sostenía que, en el caso de que le ocurriera algo, debían buscar en el empresario la responsabilidad.

Pero hasta cuatro años después no ha sido posible. En apenas diez días, la Guardia Civil ha detenido a cuatro personas. El último, el potentado empresario gallego, como supuesto inductor del crimen. El penúltimo, el responsable de un gimnasio de Castellón quien, supuestamente, hizo de intermediario entre el inductor y los sicarios a quienes encargó las muertes. Las dos primeras detenciones, al margen de la de Emilio Pérez, que ya se encontraba en prisión, fueron las de la esposa de éste, por encubridora, y la de otro joven al que Emilio conoce desde hace años y al que han arrestado como supuesto coautor material del crimen.

Aunque se desconocen las pruebas recopiladas por la Unidad Central Operativa (UCO), la juez ha hallado indicios suficientes para decretar prisión para todos ellos.