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Reportaje:Eurocopa 2004 | Unos buscan la consagración; otros, el respeto

...Y Stolcers dejó el 'stick'

El fútbol rivaliza por primera vez con el hockey sobre hielo en Letonia gracias a la presencia de su equipo nacional en la competición lusa

Andrejs Stolcers, de 29 años de edad, no es el futbolista estrella de Letonia -ese papel se lo reserva Verpakovski, el frío delantero que dejó en la cuneta a Turquía-, pero ejemplifica como nadie el giro que ha dado en los últimos años esta ex república soviética, de tan sólo 2,5 millones de habitantes, en sus gustos deportivos.

Si el hockey sobre hielo era hasta ahora su deporte más popular, la sorprendente clasificación de su selección para la Eurocopa de Portugal ha desatado entre los letones una auténtica fiebre por el balón. Antes de calzarse las botas de tacos, Stolcers se estuvo deslizando desde los seis años sobre unos patines de cuchilla. Como si hubiese adivinado el futuro, el delantero de Letonia dio un brusco giro y cambió el stick por el balón.

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También parecen haberlo hecho sus compatriotas. Tres mil de ellos se han desplazado hasta Portugal para seguir de cerca a su selección, que ha entrado en la élite del fútbol al conseguir por primera vez en su historia clasificarse para la fase final de un torneo. Por si fuera poco, Letonia se encuentra en el llamado grupo de la muerte, junto a la República Checa, Alemania y Holanda. Una veintena de periodistas acompañan al equipo nacional, dirigido por Aleksandrs Starkovs, en su aventura lusa, en la que, como advierten sus integrantes, su primer gol será demostrar que saben jugar al fútbol.

Stolcers debutó en la máxima categoría del fútbol letón hace ahora diez años, con el Olimpija de Riga. Fue llegar y besar el santo, pues se alzó con la Copa nacional. Tras un paréntesis en el Daugava, consiguió formar parte de la plantilla del Skonto, el principal equipo del país y espina dorsal de la actual selección. De ella han salido la mayoría de sus jugadores. Seis de los 23 convocados militan actualmente en él, uno de los ocho equipos de la Primera División. Nada en comparación con los 28 clubes que compiten en la Liga de hockey sobre hielo.

En 1998 se fue Stolcers a Ucrania. Allí jugó tres discretos años antes de ir cedido al Spartak de Moscú, en el que llegó a marcar cuatro goles en cinco partidos. Fue entonces cuando los ingleses le echaron el ojo. Mediada la temporada 2001-02 fichó por el Fulham. Su etapa allí, sin embargo, no le ha ido bien. En tres temporadas y media apenas ha jugado 24 partidos y marcado dos goles. Hace una semana, el pasado día 8, el club inglés hacía pública su decisión de prescindir de sus servicios.

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