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Luxemburgo investiga a Parmalat por blanqueo de dinero

Las abultadas deudas de la filial en Brasil hacen prever una inminente quiebra

La justicia luxemburguesa ha abierto una investigación por blanquedo de dinero del grupo agroalimentario italiano Parmalat. Un juzgado de instrucción ha sido el encargado de iniciar las pesquisas para "esclarecer las estructuras y los recursos de Parmalat y de sus dirigentes en el gran ducado de Luxemburgo", según declaró Jean François Boulut, encargado de elaborar el informe.

La investigación ha sido abierto por "blanqueo de capital provenientes de actividades delictivas en el marco de una asociación de malhechores o de una organización criminal", según indicó a AFP la misma fuente. Desde el inicio del caso Parmalat a finales de diciembre, varios bancos e instituciones financieras luxemburguesas que tenían fondos de Parmalat o de sus responsables han hecho una declaración sobre este dinero al grupo de información financiera, según indicó Carlos Zeyen que dirige este grupo de investigación que lleva todo el asunto en secreto por lo que aún no se conocen los nombres de estas entidades financieras.

En la investigación que se lleva desde Roma, ayer se conoció que se está siguiendo la pista de un antiguo empleado del Bank of America, Luca Sala, así como de dos auditores de Deloitte and Touche para precisar su responsabilidad en el fiasco financiero del grupo Parmalat. Los expertos de Deloite son Adolfo Mamli y Giuseppe Rovelli, que ya figuran en una lista de investigados por ofrecer informaciones falsas y manipular precios en Bolsa.

La situación de Parmalat en Brasil ganó ayer nuevas dimensiones, cuando se divulgaron los primeros cálculos sobre el total de la deuda de la empresa con la banca del país. Las previsiones iniciales, basadas en el balance de los tres primeros trimestres divulgado por la empresa, señalaban compromisos de poco más de 130 millones de euros. Pero nuevas estimaciones indican que el total podrá ser el doble, lo que llevaría a Parmalat a declarar una suspensión de pagos en Brasil. Hasta septiembre, Parmalat reconocía oficialmente 317 millones de reales (unos 90 millones de euros) en deudas con bancos y otros 181 millones de reales (unos 51 millones de euros) con proveedores de leche e insumos de sus industrias. Ayer, se daba por cierto que el monto de los compromisos alcanzará los mil millones de reales (285 millones de euros).

Los nuevos cálculos, todavía considerados provisionales, consideran que parte sustancial de la deuda estaría en las holdings Parmalat Emprendimentos e Administração e Parmalat Participações. Hasta ahora, sólo se consideraron las deudas de Parmalat Alimentos, controlada por las holdings que, por ser empresas no cotizadas, no divulgan sus estados financieros.

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