Ocultar mostrando
"La televisión puede, paradójicamente, ocultar mostrando. Lo hace cuando muestra algo distinto de lo que tendría que mostrar si hiciera lo que se supone que se ha de hacer, es decir, informar, y también cuando muestra lo que debe, pero de tal forma que hace que pase inadvertido o que parezca insignificante", escribió el fallecido sociólogo francés Pierre Bordieu. Viene al caso. Ayer, pocas horas antes del comienzo de la campaña electoral del 25 de mayo, dos telediarios ofrecieron a sus espectadores las dos versiones de la realidad más completas y contrapuestas que uno pueda imaginar.
Por orden de aparición. Àngels Barceló, abrió las noticias de la noche en Tele 5 con la conferencia de prensa del presidente del Gobierno, José María Aznar, y el presidente norteamericano George Bush en el gran vestíbulo de la Casa Blanca. La enviada especial de dicha cadena a Washington, Rosa Lerchundi, preguntó a Bush si no pensaba pedir disculpas a la familia por la muerte del cámara José Couso. Bush apretó los dientes, sin ocultar su crispación:
-Creo que la guerra es un sitio peligroso. Y pienso que nadie mataría intencionadamente a un periodista.
Acto seguido, Tele 5 pasó a la respuesta de Aznar. Agradeció a Bush su sensibilidad al mencionar a los dos muertos españoles en Irak.
Luego Aznar explicó su trueque con Bush, el apoyo a la invasión de Irak por la introducción de Batasuna en la lista de organizaciones terroristas de Estados Unidos. Antes de contestar se palpó nerviosamente el reloj y los gemelos de ambas mangas de la camisa.
-Porque no van a ayudarle a uno si no ayuda a los demás, dijo.
Tele 5 siguió después con un reportaje a un mes de la muerte del cámara Couso e intercaló declaraciones de un portavoz de la familia, que solicita una investigación.
Esto, que a ojos del Gobierno español parece una actitud de protesta, está previsto en el Protocolo I que siguió a la firma de la Convención de Ginebra de 1949. Allí se estipula que los bandos en guerra deben proteger a los enviados especiales y corresponsales. Se prevé la creación de una Comisión Internacional de Esclarecimiento de los Hechos. Es la ley internacional. España es parte de ella. Lo único que debe hacer el Gobierno español, pues, es pedir su cumplimiento.
Pero el hecho es que el telediario de la primera cadena de TVE abrió ayer con la noticia de que Estados Unidos solicitará el fin del embargo de Naciones Unidas a Irak. Como quien no quiere la cosa, cinco minutos después de comenzar, Alfredo Urdaci dijo:
-Y el presidente Aznar ha hablado esta tarde [error, fue el día anterior, miércoles 7] con el presidente Bush....
Informó, pues, que Batasuna había sido incluida en la lista de terroristas de Estados Unidos. Es, dijo, el "punto de referencia de todos los países del mundo".
Eso fue todo. Los telespectadores de la primera cadena no pudieron saber que una periodista española había logrado preguntar al presidente Bush y a Aznar por José Couso. En cambio, el presentador dio paso a varias noticias. A partes iguales, aproximadamente, invadió a su audiencia con una interminable serie de sucesos más o menos espectaculares y noticias asociadas, como quien no quiere la cosa, a la campaña electoral del 25 de mayo, como la inauguración del túnel de la madrileña calle de María de Molina, el nuevo sistema ecológico de depósito y recogida de basuras y un moderno servicio de vigilancia alimentaria.
La primera cadena omitió directamente el caso de José Couso. Ni siquiera apeló al método de presentar el diálogo con el presidente Bush de modo que perdiera proporción, diluyéndolo en la noticia más general del encuentro Aznar-Bush.Eso sí, su picardía se desplazó a otro terreno. Mostró al alcalde de Barakaldo, Carlos Pera, expresando su nostalgia por Nicolás Redondo Terreros, una pulla abierta contra el PSOE.
Ayer fue el día previo. La idea de "ocultar mostrando" será muy socorrida.
