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Reportaje:

Los mejores colistas de la historia

Jamás los ocho últimos habían estado separados por dos puntos a estas alturas de la Liga

A los ocho equipos que cierran la clasificación les separan dos puntos, una minucia, menos que una victoria, dos empates. Nada. Jamás en sus 73 años de vida la Liga vivió algo parecido, con tantos conjuntos peleándose por salir del agujero. La historia apenas enseña una situación similar. En la temporada 51-52, con 16 equipos en liza, a ocho jornadas del final eran tres los puntos que separaban al octavo por la cola, el Valladolid, y al último, el Atlético Tetuán. La victoria valía entonces dos puntos. A modo de curiosidad, aquella temporada descendieron los que a ocho jornadas del final cerraban la tabla, Las Palmas y el Atlético Tetuán.

El pasado domingo, el entonces último clasificado, el Rayo, venció al primero, el Valencia, lo que no resulta sorprendente si se tiene en cuenta que en esta Liga conviven el peor líder de la historia y el mejor colista. Jamás un primer clasificado tras 30 partidos sumaba menos puntos que el Madrid, que lleva 53, equivalentes a 38 cuando la victoria valía dos. Y encontrar un colista mejor que el Tenerife (32 puntos) es sencillamente imposible.

'¿La explicación? Tan fácil como que en esta Liga no hay equipos malos'. Quien así habla es Lotina, técnico de Osasuna, un equipo que se ha metido hasta el cuello en el pozo. Y lo ha hecho pese a que hace pocas fechas acumuló una racha de ocho partidos sin perder, a la que siguió otra en la que logró un punto de 12 posibles. 'Porque, aunque la gente busque excusas, el fútbol no engaña', explica Lotina. 'Te enseña lo que eres en cada momento'.

Ocho equipos hay que no respiran y uno que lo hace a medias, el Sevilla, noveno por la cola, que aunque está a cinco puntos del descenso no se fía. Y menos cuando en las dos próximas jornadas se enfrentan al Betis y al Madrid. 'Se nos ha acabado el colchón de puntos' decía el domingo Caparrós, su entrenador.

El caso es que nueve equipos, nueve técnicos, echan cuentas y, se supone, miran el calendario. El suyo y el de los demás. Pero Lotina niega este extremo: 'Conozco mi calendario y sé cuántos puntos necesito: 44 (tiene 34). Si no los consigo, preocuparme del resto es una tontería. Porque era fácil pensar que el Valencia ganaría al Rayo. Pues toma'.

'Yo creía que esta jornada clarificaría las cosas', explica Manzano, el responsable de un Rayo que gana a cuanto líder aparece por Vallecas. 'Y ha ocurrido lo contrario. Pero esto no es tan extraño. La pasada temporada ocho equipos tenían opciones de descender en la penúltima jornada. Cuando estábamos a ocho puntos de la salvación dije que ojalá se repitiera la historia y parece que va a ser así'.

Más allá de su trascendencia - 'personalmente estoy encantado de jugar contra cualquier líder', enfatiza Manzano- el calendario indica que Las Palmas se enfrentará a seis rivales directos y que el Tenerife, el Mallorca y la Real se medirán a los cuatro primeros (Madrid, Valencia, Depor y Betis). 'Tenemos un calendario malo', dice Clemente, quien con el Tenerife ha ganado ocho de los 12 puntos que ha disputado. 'Pero si lo piensas, nos da lo mismo jugar contra los fuertes. Lo bueno es que hace cuatro semanas éramos cuatro los que estábamos descolgados y ahora somos ocho. Esta es una Liga durísima, en la que el líder ha perdido 37 puntos. Por eso todo se ha comprimido y ahí estamos, arrejuntados'. 'Esta Liga es extraordinaria, la mejor que hay', dice Lotina. 'Cierto que ha ganado en competitividad pero ha perdido en calidad', defiende Manzano. 'Uno ve un Barça-Madrid y le queda mal sabor de boca. Uno ve al líder, sea quien sea, y no lo reconoce como tal'.

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