_
_
_
_
_
Reportaje:FÚTBOL | Las penurias de una de las grandes canteras de Europa

'Vamos, vamos, Argentina'

La crisis del país suramericano ha multiplicado el éxodo de futbolistas y los clubes han bajado los salariosun 30%, pero los internacionales 'extranjeros' no dejan de dar aliento al pueblo

'Argentina es una linda enfermedad', dice, resignado, el Cholo Simeone. El jugador del Lazio, que se recupera de una intervención en los ligamentos de su rodilla derecha, pasó diez días de vacaciones en el país y asistió a la caída de dos presidentes. La mayoría de las estrellas del fútbol argentino que juegan en clubes europeos regresaron para pasar Navidad y Nochevieja con sus familias, y no tienen dudas de que volverán a vivir aquí cuando se retiren. Los que destacan en la liga local, como casi toda la población, sueñan con irse para siempre.

Mauricio Macri, presidente del Boca, uno de los equipos más populares y quizá el único que tiene las cuentas equilibradas, dijo que no van a contratar ningún jugador para el próximo torneo de Liga, que comenzará en febrero. La Asociación del Fútbol Argentino autoriza dos incorporaciones por equipo. Pedro Pompilio, vicepresidente del Boca, comparte el criterio del jefe: 'La situación económica es grave, hay que arreglarse con lo que uno tiene'.

Más información
Varias ligas al borde del abismo
'Me duele ver de rodillas a mi país', afirma Hernán Crespo
Racing acaba con 35 años de frustraciones
El Racing gana el título argentino 35 años después
De la quiebra a la gloria

'Las deudas son el tema número uno', titulaba estos días el periódico La Nación su página sobre el River, conocido popularmente como los millonarios. Debajo se leía: 'Las ventas de jugadores aparecen como la única salvación en medio de la crisis'. En medio de la catarsis se multiplican las advertencias. Rafael Savino, electo vicepresidente del San Lorenzo, advierte a los socios: 'El club está en una situación desesperante'. El Sindicato de Futbolistas Argentinos ha recordado a la federación: 'Si no se pagan los sueldos y primas atrasadas, no comienza el torneo'. Por su parte, José María Aguilar, nuevo presidente del River, no evita el sofocón de la hinchada y desliza ante los aficionados: 'No sé si podremos retenerlo '.

Por ahora se marcha Romeo, uno de los últimos goleadores, del San Lorenzo al Hamburgo; luego Riquelme, el media punta del Boca, y, en poco tiempo, D'Alessandro. Hasta el propio Burrito Ariel Ortega, que no tuvo una buena experiencia en Valencia, Sampdoria y Parma, y regresó hace dos años al River después de 'sufrir' tanto fuera del país, ya quiere marcharse nuevamente. La mitad de su pase pertenece al Parma, y ahora dice que quisiera tener 'otra oportunidad'. Ortega es el único jugador local que tiene un puesto asegurado entre los extranjeros de Argentina en el próximo Mundial.

La devaluación del peso hace saltar por los aires los contratos que tenían la llamada cláusula dólar, por la que debía respetarse la paridad. Ahora todo debe pactarse otra vez, y los nuevos acuerdos se van a cerrar sobre salarios, premios y primas inferiores como mínimo en un 30% a los pagados la pasada temporada. Ésa fue una de las razones por las que el entrenador Carlos Bianchi, el que más títulos ha ganado en toda la historia de Boca, no renovó con el club. Le ofrecían un millón de dólares (1,1 millones de euros), 300.000 menos de lo que cobraba (335.000 euros). Su reemplazante, el maestro Tabarez, firmó por 700.000 dólares (780.00 euros), con un piso de 500.000 dólares (556.000 euros) si finalmente se producía la devaluación del peso.

El fútbol argentino, como pasión y expresión profundamente popular que es, siempre se adelantó a contar la historia social del país. Si así resulta nuevamente, debe decirse que Argentina se recuperará notablemente en este año. Las personas más sensatas de los últimos tiempos han sido los personajes del fútbol. Entre ellas y en un escalón superior, los técnicos Marcelo Bielsa, Carlos Bianchi y Carlos Mostaza Merlo. El primero clasificó al equipo nacional con anticipación en las eliminatorias para el Mundial, impuso un estilo de juego y de trabajo que resultó un ejemplo para todos. Tiene, quizá, la mejor imagen pública del país junto con Bianchi. A su vez, Merlo, impuso el paso a paso y llevó al modesto Racing a ganar un título tras de 35 años de sequía.

Los extranjeros también dieron ejemplo. Los jugadores de Argentina aportaron dinero para causas solidarias, aceptaron demoras de meses en los pagos de premios para que la AFA atendiera primero a las necesidades de los clubes locales, vistieron en los últimos partidos camisetas con leyendas en defensa de los trabajadores de Aerolíneas Argentinas y luego a favor de la educación y la salud pública, participaron de un anuncio publicitario donde eran ellos los que alentaban, desde una tribuna, a todo el país y cantaban: 'Vamos, vamos, / Argentina, / que esta barra / quilombera / no te deja, / no te deja. / de alentar'.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_