Colunga: "Tiene que haber un revulsivo, otra forma de gobernar"

Pregunta. El conflicto de las cajas ha provocado un agrio debate entre la Junta y la patronal. El viaje comercial que ha realizado a Chequia y Hungría, junto al presidente andaluz, Manuel Chaves, ¿ha servido para recomponer las relaciones?

Respuesta. Por mi preparación universitaria y la edad que tengo soy una persona muy liberal, que ayudé a superar la situación creada por un Estado autoritario. Expreso libremente mis criterios y admito las críticas. Eso sí, que quede claro, al final queda una opinión. Desde la lealtad a los intereses económicos andaluces, vamos a seguir discrepando cuando sea necesario pero por eso no vamos a perder nuestras amistades.

P. Incluso en el viaje, Chaves lamentó sus oscilaciones...

R. No me gusta volver atrás.

P. ...Y semanas antes achacó a una alianza entre el PP y los empresarios más rancios una operación para desligitimar el poder de la Junta, ¿se sintió aludido?

R. Nunca me he sentido aludido por esas palabras, menos aún cuando no son ciertas. Muchas veces esas opiniones vienen de una falta de confianza en uno mismo, falta de seguridad en su situación. No le doy ningún tipo de importancia.

P. Pues después usted pidió el voto para el PP.

R. No pedí el voto, a veces se transforman las opiniones. Yo estaba en un aula de verano [organizada por el PP] e igual que cuando alguien viene a mi casa o a mi empresa, como en esta entrevista, le deseo toda clase de éxitos en su profesión. Pues si estoy con el PP le deseo éxito, si estoy con el PSOE le deseo lo mismo, o si estoy en el PA, igual. Es una norma de educación, todo lo demás ha sido sacarlo de contexto.

P. ¿Cree legítimo que una organización empresarial pida el voto para algún partido?

R. Claro que sí. No lo hemos hecho, pero es legítimo. Se ha hecho en España y en Europa.

P. Y vista su gestión en la Junta, ¿lo pediría para el PSOE?

R. Como no hay elecciones, ¿para qué nos vamos a definir ahora mismo? [risas].

P. Es curioso que ahora mantenga esas discrepancias con el PSOE; hace años su nombre sonó en sus listas para el Congreso.

R. No no, no, no me llegué a presentar. Nunca he querido ser político, siempre he sido defensor de los intereses de la sociedad civil y en todos los los puestos en los que he estado lo he hecho altruistamente: eso quiere decir sin cobrar. Y si no he querido ser político, será por algo... Eso sí, he ayudado a todos los partido todo lo que he podido. En tiempos, ayudé muchísimo al PSOE, también al Partido Comunista y ahora tengo muy buenas relaciones con el PA y con el PP. Sin que eso signifique que no puedas discrepar en cualquier momento: fuimos la única patronal en España que pidió el cese de la ministra de Sanidad por el asunto del orujo.

P. O sea, que en el asunto de las cajas no han estado en ninguna operación contra nadie.

R. ¿Por qué tengo que ser anti-nada? He sido vicepresidente del Betis, pero soy socio del Sevilla también y me encanta ir a ver jugar al Madrid. Soy de la hermandad de Triana, de la de Sevilla y de la de Macarena. Me molesta que me encasillen.

P. ¿Por qué cree que la ordenación del sistema financiero ha provocado un debate tan radicalizado?

R. A mí lo que me ha preocupado mucho en este tema es que que se han fortalecido los localismos. Con este debate, se ha visto que la implantación de las cajas y de la obra social en cada localidad es enorme. Este debate ha provocado una gran desvertebración del territorio andaluz.

P. Pero, según su parecer, ¿cuál es el origen de tanta controversia?

R. La Ley de Cajas ya fue una norma complicada. Yo pedí a la consejera de Economía [Magda-lena Álvarez], introducir en el cuarto pacto por el empleo y la actividad productiva la negociación de la ley. Pero no lo aceptó. Al no ser una ley consensuada ni con los agentes sociales ni con los partidos políticos tuvo muchos problemas. Y luego vino la propuesta [de Chaves] de la caja única. Encargamos un estudio sobre las posibilidades de fusiones de las cajas de ahorros, el único estudio técnico que se ha hecho público. De ahí, salió otro mapa de fusiones que, después de muchas críticas, es por el que apuesta todo el mundo.

P. ¿La caja única le pareció viable alguna vez?

R. La caja de cajas desaparece en el Parlamento, el intento de cambiar la singularidad [está controlada por la Iglesia] de Caja Sur está recurrido en el Constitucional. La caja única no progresó ni al principio, ya ni Chaves la llama así. Es una batallita que hemos ido ganando a la Administración. En el estudio, se hablaba de una fusión de las cajas sevillanas, de la singularidad de Caja Sur, de una posible unión de La General y Caja de Jaén y del papel central de Unicaja en cualquier otro movimiento. Y eso es ahora lo que está flotando en el ambiente.

P. La patronal apostó claramente por el proyecto que abanderaban los presidentes de El Monte y San Fernando...

R. Los empresarios de Cádiz, Huelva y Sevilla, junto a las cámaras de comercio y los representantes de los ciudadanos en los ayuntamientos respaldaron la unión de las dos cajas de Sevilla. Y yo, como presidente de la CEA, tengo la obligacion de defender la postura de los miembros de la organización.

P. Un proyecto que la Junta consideró ilegal.

R. Aquí había un problema de interpretación legal, donde se han definido expertos de una parte [Junta] y expertos de otra parte [El Monte y San Fernando]. Y recuerdo que los expertos de las cajas han sido profesores de los expertos del Consejo Consultivo de la Junta. Estábamos de acuerdo en que los presidentes de las cajas siguieran seis meses más, mientras terminaba la renovación de cargos, después de que se aprobara en asamblea la fusión, pero eso no se aceptó. Y ahora no sabemos si los actuales presidentes van a presentarse otra vez; por mis informaciones, hay un presidente antiguo que se va a presentar, y puede ganar las elecciones. ¿Y entonces?

P. ¿Usted cree que la unión de las dos cajas será posible, tras el freno del PSOE al proyecto de Juan Manuel López Benjumea [San Fernando] e Isidoro Beneroso [El Monte]?

R. Por no haberse aprobado el acuerdo cuando estaba hecho, nos podemos encontrar con problemas en el futuro: la normativa europea está exigiendo que no haya más del 50% de representación pública en entes privados [en las cajas andaluzas hay un 65%] y la futura ley estatal facilitará la fusión de cajas de distintas comunidades. Y entonces, puede que a cualquiera de las cajas andaluzas le interese mucho más unirse con una valenciana o una catalana.

P. Mantiene que, con unas cajas privatizadas, se habría evitado el conflicto

R. En Italia se han privatizado las cajas y van muy bien. Hay muchos modelos pero nosotros siempre hemos optado por la privatización y por decir esto no se tiene que asustar nadie. Y no es algo tan raro, [José Luis Rodríguez] Zapatero [líder del PSOE], al que sigo mucho, dijo algo que no se está haciendo aquí: que las cajas tienen que despolitizarse, que hay que evitar los partidismos, y que las personas designadas por ayuntamientos y diputaciones, sean profesionales.

P. ¿Y qué le parece la decisión del PSOE de abrir expediente de expulsión a Beneroso y López Benjumea?

R. No tengó carné del PSOE, no voy a entrar en eso.