El Ayuntamiento estudia cerrar al tráfico el centro de Valencia los festivos

La comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer por unanimidad solicitar a la concejalía de Tráfico la elaboración de un estudio que analice las posibilidades de cerrar al tráfico el centro histórico durante los fines de semana y los festivos, permitiendo sólo el acceso a residentes y al transporte público. La moción presentada por el concejal de EU, Manuel Ibáñez, retoma el debate sobre la peatonalización del centro.

Aseguró el edil que "exigirá y vigilará" a la delegación de Tráfico, que dirige Jorge Bellver, para que finalice el estudio en el plazo máximo de un mes y medio. De este modo, pretende evitar que suceda lo "de otras veces" y el tema se olvide en "algún cajón". Ibáñez señaló que su grupo pedirá la creación de una comisión que reúna a todos los partidos con representación municipal, la Federación de Asociaciones de Vecinos y las asociaciones de hostelería y comerciantes para analizar la cuestión.Pese a tener uno de los mayores centros históricos de Europa, Valencia apenas ha habilitado zonas de disfrute peatonal, a diferencia de muchas otras ciudades del entorno. De hecho, una parte importante de comerciantes y vecinos se han mostrado reiteradamente reticentes a esa posibilidad, arguyendo que el cierre del tráfico retrae al comprador y al visitante. Otros ejemplos urbanos, sin embargo, contradicen esta idea al compatibilizar el disfrute ciudadano del casco antiguo con su uso comercial.

El objetivo de EU es experimentar una peatonalización durante los fines de semana y las jornadas festivas para favorecer el desarrollo cívico, reducir los niveles de contaminación y potenciar el área central de la ciudad como núcleo de actividades culturales y sociales.

"Ha de ser una medida racional", agrega Ibáñez, quien plantea en principio el cierre de Ciutat Vella, es decir, el área que abarca la circunvalación del centro, recorrida por el autobús de la línea 5. A partir de estas propuestas se ha estudiar el área más conveniente para restringir el acceso del tráfico.

Esta práctica es bastante habitual en fiestas, aunque el área cerrada se ciñe habitualmente a la zona comprendida en el triángulo formado por las torres de Quart y de Serranos y la plaza de la Reina. Ahora se pretende instaurar una medida experimental y periódica, sin definir su delimitación, con el fin de comprobar los resultados.