La abstención en Euskadi sigue igual que en 1996 en relación con la española
La abstención propugnada por Euskal Herritarrok no ha cosechado el éxito que sus promotores esperaban. Aunque en las elecciones de ayer el 64,36% del electorado vasco acudió a las urnas frente al 70% que lo hizo en el conjunto de España, esta diferencia es habitual. En los comicios de 1996 hubo 5,85 puntos de diferencia entre ambas abstenciones, frente a los 5,64 puntos que se registraron ayer. Pese al descenso general de participación que se registró en Euskadi, los abstencionistas de la izquierda abertzale no lograron el 50% del censo que ambicionaban.
En Guipúzcoa, donde habitualmente EH logra su mayor apoyo, la abstención se situó en el 43,7%, muy lejos del 50% ambicionado.Aunque la abstención ha crecido en el País Vasco -ha pasado del 28,47% al 35,64%-, lo mismo ha sucedido en el resto de España, donde el 30% del censo no votó ayer frente al 22,62% del electorado que se quedó en casa el 3 de marzo de 1996.
El territorio guipuzcoano, el feudo de Herri Batasuna, donde el abstencionismo había fluctuado en torno al 30% en anteriores comicios, registraba ayer un 43,61% de abstención, lo que supone un notable incremento. No obstante, está por debajo de las expectativas generadas por los abertzales de Euskal Herritarrok en esta provincia, donde se habían propuesto que la abstención se acercara al 50%.
Por lo que respecta a Vizcaya, no se registraron los índices que podía esperar EH. En este territorio la abstención -participó el 67,73% del cenco- sólo registraba un incremento de cinco puntos, lo que representa un incremento limitado sobre la abstención técnica. Además es casi un descenso de la participación similar al registrado en las demás comunidades. Lo mismo ocurrió en Álava, donde la abstención -la participación fue del 70,72%- sólo aumentó dos puntos.
Aunque la jornada electoral transcurrió en medio de una tranquilidad desconocida en el País Vasco en anteriores comicios, se registraron algunos pequeños incidentes a los que precedieron de madrugada los sabotajes que se reproducen los fines de semana. Pese a todo, no llegaron a alterar el ambiente de participación y normalidad que se respiró en las tres provincias vascas.
En Portugalete (Vizcaya), tres encapuchados incendiaron dos horas antes de la medianoche del sábado un generador de Iberdrola. Las llamas fueron sofocadas por los bomberos, pero el sabotaje dejó sin luz durante más de dos horas al Casco Viejo de la localidad.
Ocho 'cócteles mólotov'
De madrugada, varios encapuchados lanzaron ocho cócteles mólotov contra la delegación de la Agencia Tributaria y la sede del Inem en San Sebastián. Los artefactos no llegaron a explotar y tan sólo rompieron varios cristales del edificio.
Estas incidencias ocurridas por la noche no impidieron la apertura de los colegios a su hora y con normalidad. Los únicos retrasos se produjeron debido a que las puertas de algunos colegios electorales en Vizcaya y Guipúzcoa, por ejemplo en la Ikastola Elizalde de Oiartzun, aparecieron con silicona en las cerraduras, según declaró la Ertzaintza. En Vitoria también fue preciso retirar algunas papeletas de EH, que retiró su candidatura el pasado viernes al finalizar la campaña electoral, de algunas mesas del Centro Cívico Aldaba.
Los incidentes más reseñables se produjeron en Rentería (Guipúzcoa) y en la localidad vizcaína de Getxo. Media hora antes de la apertura de las mesas electorales la policía autónoma detuvo a un concejal de Euskal Herritarrok de Rentería cuando, junto a otras dos personas, pegaba carteles en favor de la abstención en la calle Xenpelar, en pleno centro de la localidad. Al negarse a identificarse a los agentes autónomos, los tres fueron detenidos y puestos en libertad enseguida.
En Getxo, la Erztaintza condujo a la comisaría a dos personas que trataban de repartir propaganda electoral favorable a la abstención en la calle Maidagán.
Otro de los episodios reseñables lo protagonizaron grupos del movimiento Solidarios de los presos, que se concentraron en colegios electorales de San Sebastián y Getxo. Quince personas con caretas trataron de impedir el paso a los electores en un colegio de San Sebastián, mientras exhibían pancartas en favor de los reclusos de ETA, pero fueron desalojados por la Erztaintza.
