Granada ahorra y Huelva despilfarra

Cada andaluz solicitó el año pasado a su médico 15 recetas de media; esto es, un 0,87% más que el año anterior. Por provincias, los gaditanos fueron los que menos recetas necesitaron (13), y los cordobeses, jienenses y onubenses los que más, (16). Precisamente fue Huelva la provincia que más incremento su gasto farmacéutico, un 11,90%; lo contrario que Granada, que sólo gastó un 8,45% más que en 1997. Al SAS le cuesta la salud de cada andaluz 24.079 pesetas. Pero no todas las personas le cuestan igual; por ejemplo, un cordobés le supone a la sanidad andaluza un costo de 25.794 pesetas, y un onubense 25.735; frente a ellos, el SAS paga por un gaditano 21.747 pesetas. En cualquier caso, lo que se pierde por un lado se gana por otro, y todos los andaluces vienen a "costar" lo mismo en salud. El precio medio de cada receta fue el año pasado de 1.585 pesetas. En Huelva la media resultó algo más cara (1.670 pesetas), y en Jaén donde las prescripciones médicas resultaron más baratas (1.5.47 pesetas). Como se ve, las diferencias son casi inapreciables. En términos globales, la provincia de Almería bajó el año pasado, sobre 1997, un 1,06% el número de recetas. Llama la atención que la población activa almeriense redujera, hasta un 4,34%, las recetas que solicitó en 1998. Todo lo contrario que Huelva, que incrementó las prescripciones médicas un 4,16%. En total, los andaluces utilizaron en 1998 casi 110 millones de recetas; 36 millones fueron para las personas en activo, y casi 74 millones para los pensionistas. Toda esta avalancha de "enfermos" le supuso a las arcas des SAS un costo de 174.000 millones de pesetas, un 9,67% que el año anterior.