_
_
_
_
_
FÚTBOL 26ª JORNADA DE LIGA

El Atlético vuelve a pujar por Europa

Inapelable triunfo de los madrileños que hunde en la tabla al Hércules

El vigente campeón vuelve a presentar su candidatura a los puestos de honor del campeonato. Con absoluta autoridad, el Atlético despachó el trámite de su visita al colista para prolongar su excelente racha. El cuadro rojiblanco recupera el papel de protagonista en la Liga después de cuatro meses sin perder fuera de casa. Asimismo, los de Antic sólo han perdido uno de sus últimos 16 partidos de Liga -frente al Madrid en el Calderón-.Antic no desdeño al colista y, en contra de lo anunciado, Pantic y Kiko jugaron de salida. Sólo Santi descansó de cara a los inminentes compromisos del Atlético frente al Barcelona en Copa y al Ajax en la Liga de Campeones.

Veinte minutos tardó el Atlético en hincar el diente al partido y sólo cinco en sentenciarlo. Arropado en la briega de Bejbl, la movilidad de Pantic y los destellos de calidad de Kiko, el cuadro madrileño desarboló a un Hércules confiado en exclusiva al pelotazo en largo, y que terminó siendo un juguete roto en manos del Atlético.

Más información
Alimento para la confianza

El grupo de Antic salió decididamente a por el partido desde el inicio. Consciente de la importancia de los tres puntos para volver a la zona de los elegidos, el Atlético buscó con insistencia, y con algo de precipitación al principio, la portería de Rufai. El conjunto madrileño encontró la pausa al más puro estilo que el año pasado le hizo bicampeón, es decir, rentabilizando la estrategia a balón parado. Más fresco que en anteriores citas, Pantic avisó con dos peligrosos córner desde la derecha, el lado menos propicio para un diestro. Al tercer saque de esquina, Prodan volvió a acreditar su llegada cabeceando a la red su tercer gol desde que llegó al Atlético. También es cierto que la maniobra ensayada se vio facilitada por la estática defensa del Hércules y la querencia a los palos de su portero.

A partir de este momento, todo fue coser y cantar para los rojiblancos, que por momentos llegaron a bordar el fútbol frente a un rival descosido por el centro tras la lesión de Visnjic y las molestias de Sandro. El Hércules sólo aguantó hasta el primer gol atlético. Exclusivamente fiado al contragolpe, el equipo de Quique Hernández fue incapaz de incordiar mínimamente a Molina. Además, el portero madrileño volvió a dictar un curso de lo que debe ser un arquero moderno, adelanta do y siempre atento a los balones que pudieran desbordar a su defensa.

Los síntomas de la recuperación atlética fueron generales. Pantic y Kiko lucieron especialmente, y Esnáider también quiso reivindicar su titularidad en vista de que su compatriota Biaggini viene pidiendo sitio con fuerza. Si acaso, el once madrileño echó en falta una mayor presencia y participación en el juego de Caminero, que sí puso la cabeza antes del primer gol.

De cualquier modo, el Atlético tendrá que refrendar su mejora frente a oponentes de más enjundia porque este Hércules no sirve como referente a ningún grande. El conjunto alicantino ha atravesado una semana de auténtica convulsión con la exclusión temporal de ocho jugadores y enfrentamientos entre la propia plantilla por el retraso en los pagos del club. Pero es que los males del equipo no son nuevos, ya que lleva más de un mes sin ganar y sólo ha sido capaz de sumar un punto de los últimos 18 disputados.

Tampoco sirve de excusa que Stankovic se lesionara minutos antes del partido. El Hércules ofreció una lastimosa sensación de impotencia en todo momento. Su depresivo estado lo resumió Alfaro al término del primer acto: "Estamos muy mal, qué quieres que te diga. Ellos saben jugar al fútbol y nosotros lo hacemos fatal", reconoció el delantero ex atlético.

La segunda mitad prácticamente sobró. Antic dosificó a sus hombres clave, y el Atlético comenzó a divertirse. Sólo el nigeriano Rufai evitó una mayor diferencia en el marcador con meritorias paradas a Simeone, Caminero y Kiko, que volvió a ofrecer las mejores exquisiteces de la noche.

La incontestable victoria del Atlético le catapulta a la lucha por Europa y, por qué no, también por el título en vista de la irregularidad reciente de Madrid, Barça y Betis. Qué decir del Hércules. Triste, inoperante, con problemas en todos los estamentos del club y, por si fuera poco, con una salida al Benito Villamarín en la próxima jornada.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_