_
_
_
_
_

El juez Garzón ordena prisión incondicional e incomunicada contra el etarra Lasarte

Miguel González

Tras 11 horas de declaración, el juez Baltasar Garzón dictó, a la una de la madrugada de ayer, auto de prisión incondicional e incomunicada contra Valentín Lasarte, quien reconoció su participación en los asesinatos del abogado socialísta Fernando Múgica, del concejal de San Sebastián Gregorio Ordóñez, del sargento de la Policía Municipal de San Sebastián Alfonso Morcillo, y de los empresarios José Antonio Santamaría y José Manuel Olarte, entre otros. Tras decretar la prisión de Lasarte, el juez interrogó durante media hora a Idoia Arrieta, detenida el lunes en Oiartzun (Guipúzcoa) cuando acompañaba a Lasarte, contra la que dictó auto de prisión incondicional comunicada por un delito de colaboración con banda armada.

Lasarte e Idoia llegaron a la sede judicial a las 8.40 horas en una comitiva de cuatro vehículos camuflados procedente de la academia de la Ertzaintza en Arkaute (Vitoria). El presunto miembro del comando Donosti, de ETA, rehusó ser examindado por un médico forense a su llegada a la Audiencia. Lasarte empezó a declarar pasadas las doce y media y concluyó a la una de esta madrugada.Baltasar Garzón, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, se ha hecho cargo del interrogatorio de Lasarte y Arrieta por encontrarse de guardia esta semana en la Audiencia Nacional. La detención de ambos se produjo el lunes pasado y Garzón prorrogó 48 horas más su detención, hasta el límite legal máximo de cinco días, con el fin de que los agentes de la Ertzaintza pudiesen interrogarlos a fondo en sus dependencias de Arkaute.

A pesar de no estar incomunicado al inicio de la declaracion, Lasarte pidió ser defendido por un abogado de oficio por lo que el juez no permitió la presencia del letrado asignado por la familia Aitor Ibero, defensor habitual de presos etarras.

El etarra confesó

Valentín Lasarte reconoció ante el juez su participación en el asesinato de los empresarios José Antonio Santamaría y José Manuel Olarte, del sargento de la Policía Municipal de San Sebastián Alfonso Morcillo, del primer teniente de alcalde de San Sebastián Gregorio Ordóñez, del Partido Popular, del brigada del Ejército Mariano de Juan Santamaría, del inspector jefe de la Unidad Antiterrorista de la Policía de Guipúzcoa Enrique Nieto y del dirigente socialista Fernando Múgica. Además, reconoció su implicación en los ametrallamientos de los cuarteles de la Guardia Civil de Ame(lo (La Rioja) y Loyola (Guipúzcoa).Por su parte, Idoia Arrieta negó su implicación en ningún atentado. Además, negó conocer la existencia de explosivos en un piso descubierto en Oiarzun que estaba alquilado a su nombre. Idoia ingresó anoche en la cárcel de Carabanchel.

Los ertzainas tuvieron localizado "en varias ocasiones y a menos de 100 metros" en San Sebastián a Lasarte en los últimos meses, según han confirmado fuentes oficiales, informan Aitor Guenaga y José Luis Barbería. El supuesto terrorista fue visto hace un mes, en plena campaña electoral, en la parte vieja de la capital donostiarra. El hecho de que no observara las más elementales precauciones posibilitó que numerosas personas le reconocieran e informaran a la policía.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

- ¿No es ése Valentín?

- ¡No fastidies! Si está en la clandestinidad....

- Pues es igual que él, no me digas que no.

- No puede ser, es imposible.

Lasarte, de 32 años de edad, inconfundible por su aspecto, se acerca a la pareja y, con tono de incredulidad, le dice a la mujer:

- "¿Qué pasa, María Jesús? ¿Es que ya no saludas a los amígos?".

No es un encuentro figurado. Es una muestra real de un dialogo reconstruido en base al testimonio de una de las numerosas llamadas telefónicas recibidas por los agentes antes y después de la detención de Lasarte.

Los 20.000 carteles distribuidos por la Secretaría de Estado de Interior en toda España y el hecho de que sus fotos estuvieran en manos de los efectivos policiales vascos ayudaron al arresto de Lasarte. De hecho, la llamada que facilitó el pasado lunes su detención, en Oiartzun, no partió de una persona de esa localidad, sino de un ciudadano que conocía a Lasarte de San Sebastián, donde su familia regenta un bar. De todas formas, la policía cree que Lasarte no se dirigió al hipermercado Mamut para hacer compras y que fue Arrieta la que las efectuó. Al parecer, el comunicante vio a Lasarte cuando la ayudaba a introducir los objetos en el vehículo.

En una ocasión la policía vasca fue informada de que Lasarte se encontraba en la parte vieja de San Sebastián, apostado en una marquesina de autobús, en tareas de vigilancia. Pero cuando las patrullas llegaron al lugar y organizaron un dispositivo policial el activista se había esfumado.

El pasado jueves, el consejero de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa, aseguró en Vitoria que con la desarticulación de parte de la infraestructura del grupo terrorista se había podido neutralizar numerosa información sobre próximos objetivos de ETA.

El comando poseía muchas matrículas de coches de posibles víctimas suyas, pero Atutxa prefirió no revelar por motivos de seguridad el contenido del material que se había logrado intervenir.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_