El Nápoles pide a la FIFA que anule el traspaso de Maradona por incumplimiento de los pagos
El Nápoles ha pedido a la FIFA que dé por anulado el traspaso de su futbolista Diego Armando Maradona al Sevilla por haber incumplido el club andaluz el primer plazo para el pago de los 7,5 millones de dólares pactados. El equipo que preside Corrado Ferlaino afirma no haber recibido los tres que estaban fijados jura ser abonados antes del 2 de octubre ni los avales bancarios relativos a los restantes. José María del Nido, vicepresidente sevillista, reconoció que ese dinero lo pagó ayer Gestevisión, la sociedad propietaria de Tele 5.
El fichaje de Maradona por el Sevilla se concretó el 22 de septiembre a cambio de 7,5 millones de dólares. De ellos, tres debían ser abonados antes del 2 de octubre. Los restantes se pagarían, sin intereses, en cuatro cuotas semestrales. Pero, según el Nápoles, el primer plazo se ha incumplido y los avales bancarios no constan en su poder, por lo que, a través de la federación de su país, ha reclamado a la FIFA que considere nulo el traspaso.Del Nido, el vicepresidente sevillista, reconoció que ese primer dinero lo pagó ayer Gestevisión, la empresa propietaria de Tele 5, a través de la banca suiza (dos millones) y directamente desde Argentina (uno) Los otras garantías, comenta pasan por la sociedad Dorna, que se encarga de comercializar los partidos amistosos del Sevilla con Maradona, Tele 5, que los transmite en directo, gestiones que lleva el intermediario José María Minguella.
A golpes y cabezazosMientras tanto, en los cinco días de estancia en su país, Maradona hizo de todo: jugó dos partidos de fútbol completos y le metió un gol al Sevilla con la camiseta del Boca Juniors; se presentó ante la jueza encargada de su sumario, se sometió a una rinoscopia para que se comprobara si consume o no cocaína, acudió al velatorio del popular locutor José María El Gordo Muñoz y se lio a cabezazos y golpes en plena calle con un joven que le importunaba por no manifestarse en favor de los jubilados. Más, imposible, porque, con él, llegó el escándalo.
El Sevilla ganó en dos ocasiones al Boca. El equipo de Maradona y Carlos Bilardo superó de arriba abajo al actual líder argentino. El lunes, en Córdoba, batió por 1-3 a los re servas. El miércoles, en Buenos Aires, por 2-3 a los titulares. Maradona jugó un tiempo con cada conjunto y, gracias a un regalo de Unzué, pudo meter un gol.
Había sido un día agitado para Maradona. Por la mañana acudió a los tribunales. Al salir de ellos, se topó con la manifestación habitual de los miércoles de los jubilados, desesperados por sus pensiones de hambre. Tuvo la ocurrencia de recorrer a pie la distancia que le separaba del lugar donde los familiares y los periodista: velaban a El Gordo y su presencia desencadenó el revuelo habitual.
Por un quítame allá esa gorra, Maradona se lio en plena calle a golpes con un hombre que le recriminaba no manifestarse con los jubilados. Alguien le había arrebatado una gorrita que llevaba puesta y se organizó el tumulto. Cuando un joven le reprochó no sumarse a la manifestación, Maradona replicó con un cabezazo y un puñetazo. "¡La concha [coño] de tu madre!" y "¡tarado!" fueron las expresiones que acompañaron al incidente.
"Mirá si yo no me voy a bancar los jubilados, mirá este tarado. Yo no vine para la manifestación. A mí me parece fantástico, viejo, y yo defiendo a los jubilados. ¿Cómo no los voy a defender? Nosotros tenemos que ser muy cagones para no defenderlos. Este estúpido dice que yo no estoy con ellos. A muerte estoy con los jubilados. Lo que les hacen es una vergüenza", espetó. Siguió una sarta de improperios, "¡cagón, hijo de puta!", hacia su contrincante callejero. Luego, Maradona continuó su camino.
