Picasso reina en las subastas

El mercado del arte vuelve a estar desbocado y en los últimos meses se han superado por goleada las estrafalarias cifras de principios de los años noventa. Pero si entonces el rey fue Van Gogh, ahora el emperador indiscutible de las subastas es Picasso.

El artista malagueño es el más caro, el que ofrece mayores cifras de negocio y el más buscado por los inversores. El miércoles volvió a demostrarlo en la subasta de pintura impresionista y moderna que realizó la casa Sotheby's en Nueva York. El cuadro Dora Maar con gato, realizado en 1941, se adjudicó por 95,2 millones de dólares (75,3 millones de euros) a un desconocido que se encontraba en la sala -no se sabe si era un intermediario o el coleccionista, pero sí que vestía camisa a rayas rosas y traje oscuro - que pujó contra otros compradores que operaban por teléfono.

'Dora Maar con gato', óleo de 1941, alcanzó 75,3 millones de euros el miércoles en Sotheby's

Se convierte así en el segundo cuadro más caro de la historia tras Muchacho con pipa, también de Picasso, que fue vendido en la misma casa de subastas en mayo de 2004 por 104,2 millones de dólares (85,6 millones de euros). El artista tiene otras dos obras situadas entre las 10 más caras: Mujer con los brazos cruzados, vendida por 55 millones de dólares en 2000, y Las bodas de Pierrette, que fue adquirida por 53,2 millones de dólares en 1989.

El tercer puesto en este ranking millonario lo ocupa Retrato del doctor Gachet, de Van Gogh (82,5 millones de dólares en 1990), artista que tiene otras dos obras en la lista; entre ellas, la famosa Los lirios (53,9 millones de dólares en 1987). En el selecto club también figuran Renoir, cuyo Au Moulin de la Galette costó 78,1 millones de dólares en 1990; Peter Paul Rubens, que con La matanza de los inocentes alcanzó 76,7 millones de dólares en 2002, y Paul Cézanne, que en 1999 consiguió 60,5 millones de dólares por Rideau, cruchon y compotier.

Como puede verse, las cifras están por las nubes, y en un reciente informe de Artprice.com, conocido índice de análisis del mercado del arte, se afirmaba que "puede hablarse de especulación en Nueva York, en donde los precios han crecido un 20% a lo largo de los cuatro primeros meses de 2006". Según el mismo índice, 100 euros invertidos en 1997 en una obra de Picasso valían unos 173 euros en febrero de 2006.

En la subasta del miércoles -en la que, por cierto, se obtuvo el récord de una obra de Matisse con Nu couché vu de dos, vendida por 18,4 millones de dólares- se vendieron otras obras de Picasso. Una de ellas, Sylvette, había sido comprada en junio de 1995 por 760.000 dólares y anteayer fue adjudicada de nuevo por 4,6 millones.

"Es verdad que los precios son elevados, pero Picasso es un valor estable, un clásico de la pintura y al mismo tiempo un artista moderno, y estos son factores que contribuyen a que sus precios sean muy altos", indicó ayer Maria Teresa Ocaña, ex-directora del Museo Picasso de Barcelona.

Dora Maar con gato, un óleo sobre lienzo de 129,5 x 97 centímetros, fue realizado por Picasso durante la II Guerra Mundial. En aquel momento, la turbulenta relación del artista con la modelo, fotógrafa y pintora Dora Maar (1907-1997) estaba en su apogeo. Maar es la mujer que llora del Guernica, el rostro descompuesto y desesperado a través del cual el artista reflejó el dolor de la guerra, tanto la española -la conoció en 1936 y estuvo con ella hasta 1943- como la II Guerra Mundial. "Es un periodo muy importante en la obra de Picasso, una etapa muy intensa en la que abundan las deformaciones y distorsiones de la figura", indica Ocaña.