LOS JUEGOS VISIBLES

DURANTE los próximos 24, 25, 26 y 27 de julio se podrá ver a Mon (mascota oficial de los EuroGames) ondear la bandera multicolor gay por Barcelona. Junto a ella estarán Liz y Eva, que aseguran que serán la pareja de baile con más ritmo; Ágatha, una periodista lesbiana que, dado su embarazo, se decantará por la oferta cultural; Joan, un frutero atleta Es la duodécima edición de EuroGames, la primera que se celebra en España. Es un reconocimiento de los clubes deportivos que forman la Federación Europea del Deporte Gay y Lésbico (EGLSF) hacia Barcelona como capital, cuenta Pere Cruells, secretario general de los juegos y vicepresidente del club deportivo Panteres Grogues, organizador de esta edición. Para la ciudad ha supuesto traer el mayor evento deportivo para la comunidad LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans) al sur de Europa.

Ya hay más de 5.000 participantes inscritos, que competirán en 25 modalidades deportivas: aerobic, atletismo, bádminton, bailes de salón, baloncesto, petanca, carrera de 10 kilómetros, ciclismo, fútbol, golf, lucha libre

El punto de encuentro de todos los participantes será el Village, donde se concentrarán las actividades paralelas: restauración, teatro, exposiciones, y la presencia de más de cuarenta asociaciones y entidades de la ciudad. El viernes 25 permanecerá abierto el llamado Espacio de la Igualdad, en el Poble Espanyol, con actos programados por y para mujeres, añade este nadador y profesor de matemáticas de la Politécnica de Cataluña.

Pero como viene a decir Mon, diminutivo de Montserrat, patrona de Cataluña, que, aparte de sus connotaciones religiosas significa el entendimiento y el respeto de las diferencias, aquí no se le pregunta a nadie con quién se acuesta, y todo el mundo (mon también es mundo, en catalán) es bien recibido.

Pero ¿por qué unos juegos específicos para este colectivo? Para visibilizar a gays y lesbianas en el mundo del deporte. Queremos que la sociedad en general reflexione respecto a la homofobia existente no sólo en el mundo del deporte, sino en toda la sociedad.

Como explica Cruells, el deporte es un buen caldo de cultivo para la homofobia. Sólo hay que observar los típicos insultos a árbitros y a jugadores cuando su actuación no es del gusto del espectador. Estos insultos negativizan a gays y lesbianas. Cuando un adolescente descubre su atracción por los de su mismo sexo tiene muy metido en la cabeza que ser maricón o bollera es algo malo. ¿Cómo le dirá a su padre que es gay si le ha oído millones de veces llamar maricón al árbitro?. Quizá vendría bien que deportistas de élite salieran del armario y pudieran convertirse en referentes; saber que tu ídolo deportivo es gay o lesbiana ayudaría a los jóvenes a vivir su sexualidad de una forma más abierta. Claro que esto no es moneda común: Hay varias razones por las que no salen del armario. Una, el miedo a perder patrocinios. Martina Navra¬tilova afirma que los perdió cuando lo hizo, y eso que ella salió del armario cuando ya tenía su carrera hecha. En segundo lugar, el miedo a ser rechazado en su deporte. Todo deportista de élite quiere ser seleccionado para representar a su club o a su país. Sigue habiendo entrenadores y directivos que no admiten a jugadores gays o lesbianas en sus equipos. Tenemos un ejemplo reciente con declaraciones de Luciano Mog¬gi, de la Juventus, o de Jorge Luis Pinto, seleccionador de Colombia, afirmando que no aceptan a jugadores gays en sus equipos de fútbol. Tampoco lo tienen fácil los integrados en deportes de equipo. En aquellos que el contacto físico es intenso puede provocar que algunos jugadores con prejuicios te hagan el vacío o te veten el juego.

Hay algunas voces que se han alzado contra esta celebración, que consideran que es un ejercicio más de discriminación hacia los homosexuales realizar unos juegos específicos para ellos. Pretendemos todo lo contrario. Hemos creado unos EuroGames abiertos a la ciudad. Queremos que la gente nos vea practicando deporte, y que lo haga con nosotros. No se trata de una competición cerrada ni excluyente. Durante cuatro días, Barcelona será la capital de la diversidad y de la libertad. Miles de personas disfrutarán del deporte y del extenso programa cultural y de ocio que hemos organizado a su alrededor. En fin, que, como señalan en su campaña publicitaria, una vez más la integración va a ganar por goleada a la discriminación. Y eso siempre merece una celebración.

www.eurogames.info/2008/