_
_
_
_
Entrevista:CRISTINA NARBONA | Ministra de Medio Ambiente

"Ya está bien de invocar el polvo africano para justificar la polución"

Jesús Sérvulo González

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, de 56 años, vive con un ojo puesto en su departamento, poniendo en marcha medidas contra el cambio climático y la sequía, y otro en Madrid. Narbona fue concejal del Ayuntamiento de la capital y el pasado verano presidió la gestora que gobernó durante unas semanas el Partido Socialista de Madrid (PSM). Ahora encara la recta final de la legislatura embarcada de lleno en la campaña electoral e intentando cerrar los flecos de sus últimos proyectos.

Pregunta. ¿Habrá alguna vez un parque nacional en Guadarrama?

Respuesta. No hay interés por parte de Castilla y León de hacer el parque. Tras su rechazo, queda la parte madrileña. La Comunidad de Madrid lleva dos años mareando la perdiz con un Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) que no acaba de aprobar. Ya no hay excusas para que empiece a haber algo de parque.

"No hay excusas. Madrid lleva dos años mareando la perdiz con Guadarrama"
"El Estado aportará 3.000 hectáreas al futuro parque nacional de Valsaín"
"Hemos aportado agua a Madrid. No ha llegado toda por culpa de Aguirre"
"Si la izquierda se abstiene, tiene que ver con la capacidad de comunicación"
Más información
El peor aire, en el Corredor del Henares y el cinturón del sur

P. ¿Por qué se demora tanto la declaración como parque nacional?

R. Madrid se ha refugiado en el cambio de la ley (Ley de Parques Nacionales, aprobada en 2007). La ley es la misma que la que había con el Gobierno anterior. Desde el PP se obstaculiza la creación del parque nacional. La otra excusa es la del dinero. El ministerio tiene presupuesto para eso. En Monfragüe -declarado parque nacional hace un año- se han invertido seis millones de euros. Si Madrid fuera ya parque hubiéramos puesto dinero. El plan no es el mejor de los posibles, pero al menos es un comienzo. En cualquier caso, la iniciativa es competencia de las comunidades autónomas.

P. ¿Tiene el Gobierno algún otro resquicio para preservar la zona?

R. Ummm... existe un resquicio que es convocar una iniciativa popular... Ésa es una buena idea... Sería muy bonito...

P. ¿Podría haber un parque nacional sólo en la vertiente madrileña?

R. Sí, sería un comienzo, aunque lo ideal es que tengan las dos partes, pero si Madrid tiene su PORN, podemos empezar con la tramitación para tener un parque en la cara madrileña. Además, el Ministerio está dispuesto a aportar 3.000 hectáreas de suelo público en Valsaín, en la cara norte de Guadarrama.

P. Estamos ante el periodo de mayor sequía de los últimos años. ¿Necesita Madrid agua?

R. Con el aumento de disponibilidad de 200 hectómetros, aportados por el ministerio, Madrid no tiene ningún problema en un horizonte de varios años. Hoy por hoy, si se aprovechan esos recursos, no hay el menor problema. Pero algunos de esos recursos están a disposición de la Comunidad de Madrid y no llegan a los ciudadanos, porque ésta no ha construido las conducciones y ha incorporado ese agua para todo tipo de usos salvo para el consumo humano.

P. Aguirre dice que los 200 hectómetros no son suficientes...

R. Uno de los argumentos del PP en campaña es que en vez de los 228 hectómetros cúbicos que hemos aportado, sólo hay 17. Tenemos un balance actualizado con los datos reales. Cuando iniciamos el plan hidrológico de la cuenca del Tajo hicimos un horizonte a más largo plazo, y se comprobó si son necesarios más recursos hídricos. En estos momentos de sequía generalizada el esfuerzo que se ha hecho al aportar agua para Madrid no se ha valorado suficientemente.

P. Aguirre critica el plan de su ministerio de trasvasar agua del Jarama a la cuenca del Segura...

R. Ese trasvase no le resta nada a Madrid. Es transferir el agua que voluntariamente los regantes de Estremera deciden que la utilicen los regadíos de la cuenca del Segura previo pago de una cantidad. Cuando el ministerio considere oportuno transferir el agua, manteniendo equilibrios ambientales en la cuenca del Tajo, lo va a hacer.

P. Entonces, ¿son necesarios más pantanos en Madrid?

R. Sé que Esperanza Aguirre ha pedido más pantanos. Cualquier tipo de actuación si es racional y está medida, se hace, el problema es que en estos momentos en Madrid hay agua suficiente para muchos años. Plantearse ahora hacer un embalse no tiene ningún sentido. Es más razonable hacer un uso más controlado y racional del agua. Por ejemplo, en Madrid cuando empezó la legislatura había 10.000 pozos ilegales, ya sólo quedan 3.000, que no son pocos... Hay que trabajar en ese sentido.

P. ¿Hay linces en Madrid?

R. Las pruebas que aseguraban que había linces ganaban dos a una. En cualquier caso, tengo la impresión de que ha prevalecido la construcción de la carretera de los pantanos (M-501)... sobre la existencia del lince.

P. ¿Qué pasa con la M-501?

R. Hay una sentencia desfavorable por declarar el proyecto de interés general para evitar la declaración de impacto ambiental. Es un varapalo considerable. Lo mínimo que tendría que hacer es parar la obra y hacer impacto ambiental sobre todo lo que queda por hacer y fijar medidas ambientales sobre lo que ya ha hecho. Pero no parece que Aguirre esté haciendo eso, ¿verdad?

P. Madrid es una de las ciudades más contaminadas. ¿Qué recetas aconseja al Ayuntamiento para reducirla?

R. Los ciudadanos de Madrid hemos visto cómo Ana Botella ha aconsejado que no se haga ejercicio físico, pero no desaconseja que se haga el único ejercicio que provoca la contaminación que es el uso del coche. Se premia al que sigue contaminando la ciudad. Ya está bien de invocar todo el rato al polvo africano.

P. ¿Puede el ministerio imponer sanciones a los ayuntamientos que más contaminen?

R. No está contemplado. Pero sí se podrían establecer sanciones penales a los responsables públicos, eso sí. Los ciudadanos pueden recurrir a la justicia, invocando en este caso su derecho al aire limpio. Si se organizaran los ciudadanos de Madrid podrían abrir los cauces para que esto ocurriera...

P. Los concejales de Morata de Tajuña, incluso los del PSOE, se han encerrado contra la central. ¿Qué opina de instalar una central tan contaminante?

R. En su día se sometió a declaración de impacto ambiental por el ministerio. Incorporamos muchas exigencias al proyecto. Lo que mucha gente no sabe es que lo unico que hace falta es la autorización ambiental integrada que corresponde a la Comunidad de Madrid. Si Aguirre está en contra, tiene en sus manos una herramienta muy potente que es negar esta autorización. El ministerio asume que ha dado una declaración ambiental con las mejoras que ha exigido, y entendemos que los ciudadanos protesten, no quieran la central y la rechacen, pero quien da la autorización es la Comunidad.

P. ¿Qué queda de la gestora del PSM que presidió?

R. Lo que queda de aquello es un nuevo secretario general y una nueva ejecutiva regional con el mayor apoyo que ha tenido nunca un líder regional. Hay que trabajar en esta comunidad, que no es de derechas. Estuve siete semanas y media al frente de la gestora, en la que hice una labor de profundización en el conocimiento de la crisis del partido y de impulso a la máxima participación de los militantes. Fue una experiencia muy bonita.

P. ¿Por qué la izquierda no se moviliza en Madrid?

R. Hay varias dificultades. Por ejemplo, un ciudadano cualquiera que tenga que ir una mañana a La Paz... posiblemente no tiene toda la información para saber que el desastre que está viendo allí es a pesar de los 1.500 millones de euros que el Gobierno de Zapatero dio a Madrid para mejorar la sanidad madrileña... Hay que añadir la politica de agravio comparativo que ha mantenido Aguirre frente al Gobierno socialista. A muchas personas le ha llegado esa sensación de que el Gobierno no quiere hacer carreteras..., no quiere invertir en Madrid... Hay otra responsabilidad, que es la de hacer lo máximo para que los ciudadanos sepan lo que hemos hecho y lo que queremos hacer. Sin ninguna duda, si hay abstención de izquierda tiene gran importancia la capacidad de comunicación y convicción que hacemos los propios responsables socialistas.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en su despacho en Madrid.
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en su despacho en Madrid.LUIS SEVILLANO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_