Libros de la Casa del Pueblo, para el pueblo
La Fundación Francisco Largo Caballero atesora la biblioteca de la institución socialista, dispersada bajo el franquismo
Madrid dispone de una biblioteca que ha sido recobrada tras sufrir mil avatares desde que fuera dispersada tras la Guerra Civil. Pertenecía a la Casa del Pueblo, la principal institución cultural de la clase obrera y campesina madrileña. Hoy la custodia la socialista Fundación Francisco Largo Caballero, en la calle de Antonio Grilo, número 10 (Centro).
Antes, al culminar la transición democrática, estuvo en la calle de Azcona y, en las postrimerías de la contienda, hasta 1939, en la calle de Piamonte. La sede socialista fue demolida por el franquismo. Desde esa y otras bibliotecas se vertebró el pensamiento de los moradores de la ciudad. También, sus costumbres cívicas. Prueba de ellas es la anécdota protagonizada por Aurelio Baquero Roldán. Su padre, Francisco Baquero Castillo, había pedido prestado en una biblioteca de la calle de Piamonte El paraíso de las mujeres de Vicente Blasco Ibáñez. Madrid vivía las últimas semanas de la guerra. Era febrero de 1939. Aurelio Baquero, 55 años después de la petición de su padre, se presentó en la biblioteca heredera de la de Piamonte, en la calle de Azcona, para devolver el libro prestado a su padre. En tan dilatado plazo, la librería prestataria había sido incautada y dispersada por las autoridades franquistas y sus fondos, hasta 10.000 volúmenes, pasaron a la Delegación Nacional de Sindicatos de la Secretaría General del Movimiento Nacional: De allí, al Ministerio de Trabajo y alguna librería particular. Era uno de los frecuentes saqueos del patrimonio de partidos y sindicatos consecutivos al fin de la Guerra Civil.
Hoy, gracias a gestos como el de Aurelio Baquero, a la tenacidad de generaciones de militantes socialistas y de otras personas amantes de la memoria y de la cultura, al menos 1.200 volúmenes de aquella histórica biblioteca permanecen a salvo en la sede de la Fundación Francisco Largo Caballero, junto a la calle de San Bernardo. Así lo explica el rector de esta institución, Antón Saracíbar: "Queremos abrir estos fondos bibliográficos no sólo a los especialistas o estudiosos, que ya los consultan asiduamente, sino también a todos los ciudadanos de Madrid que quieren verlos, porque son suyos y aquí están esperándoles", dice.
La biblioteca de la Casa del Pueblo contiene tesoros tales como un libro de gran formato y bella encuadernación, posiblemente uno de los primeros diccionarios español-inglés editado en España. Es el más veterano de la biblioteca: data de 1768 y fue escrito por Josep Giral del Pino. Otra de las joyas bibliográficas que acuña es una primera edición del primer tomo de El capital, obra del revolucionario alemán Karl Marx. Presenta la particularidad de haber sido editado en Hamburgo, en el año de 1867 y, sobre todo, la de estar dedicado de puño y letra por el pensador comunista a su amigo Friedrich Lessner, con su rúbrica a pluma de tinta color sepia.
Hay asimismo ejemplares tan curiosos como un Manual de Astronomía Popular obra del alcalde de Madrid, Alberto Bosch, que combatió una epidemia de cólera y libró a la ciudad de una mortandad segura. Fue dditado en 1879. Entre los sustanciosos legados bibliográficos y archivísticos destacan el de Benito Pérez Galdós, que donó ochenta ejemplares de sus propios títulos, el de Francisco Pí i Margall, más los del líder socialista Largo Caballero y el senador y diputado José Prat.
A los títulos que guarda la biblioteca, de literatura, historia, geografía, feminismo, sindicalismo y, en menor medida, política -apenas un 18% del conjunto-, hay que añadir los fondos documentales, algunos traídos laboriosamente a la Fundación desde la ciudad francesa de Toulouse, capital del exilio socialista. Su custodia corresponde a Nuria Franco, que muestra ufana desde un ejemplar de la Constitución de 1931, en forma de gran moneda, hasta la Cruz de San Raimundo de Peñafort, con la que fue condecorado el senador socialista José Prat, o un mandil de un dirigente socialista masón, que en el archivo se conserva.
"El préstamo de ediciones históricas, por su singularidad, impone limitaciones; por ello, nos gustaría tener la posibilidad de realizar facsímiles para que pudieran llegar al máximo número de personas en ellas interesadas", destaca Saracíbar, que se muestra entusiasta en proyectos. A la riqueza de sus contenidos, estos libros y documentos añaden la emoción de haber sido leídos por obreros y campesinos del pueblo de Madrid, sobre todo entre 1932 y 1934, la etapa de mayor vitalidad de la Casa del Pueblo.
Fundación Largo Caballero. Calle de Antonio Grilo, 10. Metro Noviciado. De 10.00 a 14.00, de lunes a viernes. Teléfono 91 548 48 99. Acceso gratuito.
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