El viento provoca la caída de 160 metros de la valla fronteriza de Melilla
Las nevadas y los fuertes rachas de aire ponen en alerta a toda la Península y Baleares.- Riesgo extremo en el Cantábrico por olas que pueden alcanzar siete metros
Las intensas rachas de viento han provocado la caída de unos 60 metros de la verja exterior del doble vallado fronterizo de Melilla en la zona del dique sur de la ciudad autónoma. El derrumbe de parte del perímetro se ha producido en las inmediaciones de la playa de la Hípica, en un punto en el que la frontera da al mar y desde el que se divisa el puerto marroquí de Beni Enzar. Horas después, por la tarde, se ha desplomado otro tramo de la valla, unos 100 metros más. Las autoridades han desplegado un dispositivo para reparar los desperfectos y se ha reforzado la vigilancia en la zona con varias patrullas de la Guardia Civil. Mañana no abrirán los colegios, guarderías, instituciones deportivas y educativas de toda la Ciudad Autónoma, según informa Toñi Ramos. Melilla continúa en alerta naranja por vientos que están alcanzando los 97 kilómetros por hora y que además han arrancado parte del techo de la estación marítima. El Gobierno de la ciudad autónoma ha suspendido las clases esta tarde y ha cerrado todas la instalaciones deportivas.
El temporal de nieve y vientos azota además a la Península y Baleares tras la vuelta este miércoles a un ambiente puramente invernal, lejos del tiempo más estable de las últimas semanas. El temporal ha causado un incidente grave en el puerto de Palma de Mallorca, informa Andreu Manresa. El fuerte viento ha roto las amarras del crucero MSC Fantasy, que estaba atracado en el muelle y la pasarela se ha desprendido en el momento en que bajaban varios viajeros. Uno de ellos ha caído al agua y ha sido rescatado por tres miembros de la tripulación del buque. Se encuentra en observación y su estado es grave. El buque, de 333 metros de largo, transporta 3.000 pasajeros.
La Dirección General de Protección Civil ha avisado a las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno de 16 comunidades autónomas, todas menos Canarias, ante las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La cornisa cantábrica se encuentra en alerta roja (riesgo extremo) por olas que pueden alcanzar hasta los siete metros de altura. Caso toda la flota gallega permanece amarrada y tan sólo han salido algunas embarcaciones de las cofradías de Celeiro, Ferrol, Vigo y Marín. El temporal está afectando también a la circulación, especialmente en el norte, al encontrarse cortado un puerto de la red principal (San Glorio, en Cantabria) y ser necesario el uso de cadenas en otros siete.
Los avisos por nieve se centran en el País Vasco, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Navarra, Andalucía y Aragón, que podrían alcanzar los 35 centímetros a partir de los 400 metros de altitud. La Comunidad de Madrid ha ampliado la alerta por riesgo de nevadas y viento fuerte, que hasta ayer se esperaban sólo en la sierra, a la capital y el área metropolitana, la zona sur y la comarca de las Vegas, según ha informado Emergencias 112. La nieve podría alcanzar los 18 centímetros en la sierra y los cuatro centímetros en la ciudad.
Los fuertes vientos afectan a las comunidades de Baleares (110 kilómetros por hora), Cantabria, País Vasco, Andalucía, Aragón, Cataluña, Navarra, Comunidad Valenciana, La Rioja y Asturias (todas con hasta 100 kilómetros por hora), y Castilla la Mancha y Melilla (ambas con 90 kilómetros por hora). Los avisos de Protección Civil también se han dirigido a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) además de a organismos y empresas eléctricas.
Problemas en el tráfico
Las mayores dificultades en el tráfico se centran en el norte del país. El puerto de San Glorio, en Cantabria, está cerrado al tráfico a causa del temporal y se requieren cadenas en otros siete también de la red principal: Cotefablo (N-260), Monrepos (N-330), Portalet (A-136) y Somport (N-330), en Huesca; Pajares (N-630), en León; Pozazal (N-611), en Cantabria, y Incinillas-Soncillo (N-232), en Burgos. En la red secundaria, 14 de puertos están también cerrados y en más de 50 es necesario el uso de cadenas. La nieve dificulta también la circulación por numerosas carreteras secundarias y por algunas de la red principal, como la N-240, a la altura de Sigues (Zaragoza) y de Jaca (Huesca), y la N-330, en Sabiñánigo (Huesca)
En Madrid, la autovía A-2 ha quedado cerrada al tráfico en sentido entrada a la capital hasta que se proceda a la retirada de una valla publicitaria que amenaza con caer debido al fuerte viento. En el área más próxima al lugar del incidente están cortados tres carriles de la avenida de América, todos salvo el izquierdo, desde la M-30 hasta el intercambiador de transportes, al que se permite el paso a los autobuses por un recorrido especial. Más lejos de esta zona, en la carretera de Barcelona se han establecido también desvíos hacia la M-45 para evitar que los vehículos lleguen al punto conflictivo lo que ha provocado retenciones de 14 kilómetros a primera hora de la mañana.
Protección Civil recomienda, si es imprescindible viajar por carretera, informarse de la situación meteorológica y el estado de las carreteras, extremar las precauciones, revisar el vehículo y atender las recomendaciones de Tráfico.
El viento obliga a suspender las clases en Ceuta y causa destrozos en toda la ciudad
Rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora mantienen a la ciudad autónoma de Ceuta en alerta naranja desde última hora de la tarde de ayer, cuando a instancias del presidente autonómico, Juan Vivas, la Dirección Provincial del Ministerio de Educación acordó suspender la actividad lectiva durante la jornada de hoy en todos los centros educativos.
Protección Civil ha recomendado a los ciudadanos que eviten salir a la calle y el uso de vehículos si no es absolutamente imprescindible. El viento causó durante la noche pasada daños de diversa magnitud en una veintena de viviendas, fundamentalmente en las barriadas de la periferia de la ciudad, y la caída de varios muros en diferentes puntos de Ceuta, entre ellos la Estación Marítima, que mantiene cortados sus enlaces con Algeciras ante las dificultades de los buques para realizar las maniobras de atraque y desatraque. Además, las compañías navieras que operan en la ruta marítima del Estrecho de Gibraltar han suspendido esta mañana los servicios de las embarcaciones de alta velocidad como consecuencia de la fuerza del viento.
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