"No hay gran demanda para modificar la ley del aborto"

Doce años después, María Teresa Fernández de la Vega cumple un sueño. Por fin, como quería en 1996, encabezará la candidatura del PSOE por Valencia, la provincia donde nació. Cuenta que le hace "mucha ilusión" aunque confiesa alguna amargura: "Desde que he llegado, el PP se ha limitado exclusivamente a la descalificación y al insulto, lo que pone de manifiesto una manera de entender la política muy poco respetuosa y democrática". Ha sido diputada al Congreso por Jaén (1996), Segovia (2000) y Madrid (2004). La vicepresidenta anda desde hace semanas con un pie en el palacio de la Moncloa (por las mañanas) y el otro en Valencia (el resto del día y todos los fines de semana).

Pregunta. ¿Cómo se hace campaña en un territorio favorable al trasvase del Ebro cuando usted pertenece al Gobierno que derogó el trasvase del Ebro?

"Bajo ninguna condición volveremos a negociar con ETA"

"Hemos reducido impuestos y recaudado más. El PP no lo hace"

Respuesta. El PP ha confrontado territorios y personas con una utilización partidaria del trasvase del Ebro, en lo que han demostrado que no creían. O mentían entonces o mienten ahora. Antes era imprescindible el trasvase y ahora ha dejado de serlo. No harán el trasvase nunca. Han estado cuatro años engañando a los valencianos. Y eso merece una explicación. No sabemos cuál es la política del agua del PP. No están de acuerdo con las desaladoras, las han puesto en cuestión de forma irresponsable. Nosotros no nos hemos opuesto nunca a los trasvases. Sólo a uno, el del Ebro, porque era insostenible desde el punto de visto político, económico y social. Hemos hecho una política basada en la diversificación de recursos, partiendo de las desalinizadoras, mejora de regadíos, infraestructuras, reutilización del agua. Y eso ha determinado que haya agua en la Comunidad Valenciana, 335 hectómetros cúbicos más. Ni un solo día ha habido cortes en los peores años de sequía que hemos vivido. A Valencia ni le ha faltado ni le va a faltar agua.

P. Ustedes defienden los trasvases existentes y, sin embargo, el Gobierno socialista de Castilla-La Mancha pretende derogar a través de su nuevo Estatuto, aún pendiente de aprobar, el trasvase Tajo-Segura. ¿Apoyarán ustedes esa medida?

R. Ahora no vamos a adelantar acontecimientos de lo que diga el Parlamento. He dicho que no nos oponemos a los trasvases y hemos hecho pequeños trasvases, pero siempre desde la responsabilidad y garantizando siempre el abastecimiento en todo el territorio.

P. Rubalcaba dijo el 13 de marzo de 2004 que España no se merecía un Gobierno que mintiera. Lo hizo cuando el PP pretendía atribuir el atentado del 11-M a ETA sin una sola prueba. Ahora les acusan a ustedes de mentir por negar los contactos con ETA tras el atentado de la T-4. Contactos que acabó reconociendo Zapatero. ¿Merece España un Gobierno que diga la verdad?

R. El Gobierno no ha mentido nunca jamás. Siempre ha dicho la verdad y siempre ha cumplido su palabra.

P. ¿Cómo explica este episodio de los contactos con ETA tras el atentado de la T-4 que ustedes negaron?

R. Hubo un atentado y ETA rompió la tregua. Y a partir de ahí se acabó. Después, lo que hubo es que diversas organizaciones internacionales de algunos países que habían estado mediando y trabajando en el proceso sondearon si podía haber alguna posibilidad y lo transmitieron al Gobierno. Pero el Gobierno ya sabía, y lo había dicho, que después del atentado de la T-4 se habían roto todas las posibilidades. Y eso lo saben todos los ciudadanos, lo que pasa es que el PP decidió utilizar desde el primer día el terrorismo en la lucha partidaria, rompiendo el consenso histórico de la democracia.

P. ¿En qué condiciones se plantearía el Gobierno volver a tener un diálogo con ETA para el fin del terrorismo?

R. En ninguna. Lo hemos dicho por activa y por pasiva. Aquí el único escenario que hay es el cese definitivo de la violencia.

P. ¿Han pecado de ingenuidad al considerar que la mitad de ANV no tenía vinculación con Batasuna y dejar que se presentaran a las elecciones para siete meses después demandar su ilegalización?

R. A los partidos políticos los ilegalizan los jueces y para eso hay que ir con pruebas. No ha habido pruebas hasta ahora. Nosotros hemos puesto en la ilegalidad a un partido, el PCTV, que el PP puso en la legalidad. No actuamos por razones de oportunismo político. Cuando se han tenido esas pruebas, al minuto siguiente se ha actuado.

P. Pero los informes policiales apuntan indicios de la vinculación de ANV con Batasuna previos a las elecciones.

R. Los indicios no son pruebas. Indicios de que había relaciones, sí, pero es que los indicios no constituyen una prueba en virtud de la cual se pueda establecer una decisión de ilegalización, no.

P. Usted negoció y acordó con la cúpula de la Iglesia una reforma de su sistema de financiación. Después, los obispos sacaron una nota recomendando el voto contra el PSOE. Llamazares define así lo que ha pasado: "Cría obispos y te sacaran los ojos". ¿Comparte esta sentencia?

R. Respeto esa afirmación pero no la comparto. Ha habido manifestaciones hechas por algún sector de la cúpula episcopal que no son admisibles en términos democráticos porque además no son verdad.

P. ¿En qué han mentido?

R. Han dicho que las leyes que hemos promovido disuelven la democracia. Eso no es en absoluto verdad, ni tampoco que haya un retroceso en los derechos democráticos. Hemos avanzado mucho en derechos en estos cuatro años. De la misma forma que tampoco es razonable que utilicen el terrorismo con unas manifestaciones que nunca se habían hecho en relación con este tema. Exigimos respeto, transparencia y lealtad.

P. En mayo de 2006, EL PAÍS le preguntó por la reforma de la Ley del Aborto y dijo que era necesaria por una cuestión de respeto a las mujeres. Menos de dos años después, ustedes dicen que no hay demanda social. ¿Se ven las cosas distintas cuando llevas cuatro años en el Gobierno que cuando llevas sólo dos?

R. Hace dos años se pensó que probablemente era mejor ir a un sistema de plazos. Pero la realidad social lo que está demostrando es que el sistema de plazos también plantea algún problema, no sólo aquí sino en los países que lo tienen. La ley que tenemos ha funcionado razonablemente bien hasta ahora. No hay gran demanda para modificar la ley. En los últimos tiempos hemos visto que se puede estar planteando algún problema, y ha habido denuncias de que se podía estar impidiendo ejercer derechos a mujeres al amparo de esa ley. Vamos a hacer un análisis para ver los puntos que puedan tener débiles y como resultado del mismo adoptaremos las decisiones que sean necesarias. Entretanto, no vamos a tolerar que nadie impida o vulnere el ejercicio de los derechos al amparo de una ley que tienen las mujeres y los profesionales sanitarios.

P. ¿Cuándo dejó de ser de derechas bajar los impuestos?

R. La derecha habla mucho pero luego no baja los impuestos. Hemos ahorrado, crecido y reducido la deuda. Hemos bajado los impuestos pero hemos recaudado más y saneado nuestras cuentas. Tenemos tres millones más de personas empleadas, seis millones más con contrato indefinido y la tasa de ocupación más alta en la historia.

P. La leche cuesta aquí más que en Alemania...

R. Eso dice Rajoy, pero no es verdad. Le diré que en España es más barata, dependiendo de marcas, que en Alemania. Otra cosa muy distinta, es que yo comparto la preocupación de los ciudadanos porque han subido los precios, han subido las hipotecas... y por eso estamos haciendo cosas. No nos hemos cruzado de brazos, no es necesario hacer un decreto brutal como dice la derecha, que ya sabemos lo que fue en 2002, con despido libre...

P. ¿Le gusta el contrato de integración para inmigrantes que propone el PP?

R. El PP pretende introducir miedo. Este Gobierno ha puesto orden donde había desorden, ha puesto ley donde había irregularidad. Hemos sacado de debajo de las alfombras a los inmigrantes que Rajoy dejó, hemos llevado al mercado laboral, previo acuerdo con patronal y sindicatos, a los inmigrantes que estaban en la economía sumergida. Ahora Rajoy dice que los inmigrantes no cumplen las costumbres. ¿Qué inmigrantes no cumplen las costumbres? ¿Dónde están? ¿Son los que viven en su barrio? ¿Dónde están esos inmigrantes que dicen que no aceptan la ley? Aquí la ley se aplica por igual a todos, y si esa ley la incumplen para venir a España de forma irregular, se les repatria o se les expulsa. Hemos multiplicado por dos las repatriaciones y las expulsiones.

P. ¿Cuántos inmigrantes irregulares tienen ustedes debajo de la alfombra?

R. Menos de la mitad de los que nos encontramos. Calculamos que no llegan a 300.000.

P. ¿Qué piensan hacer con ellos?

R. Estamos trabajando para...

P. ¿Expulsarlos?

R. Los estamos expulsando. Todo se está haciendo de acuerdo con la ley.

P. ¿Y van a expulsar a los 300.000 o los regularizarán?

R. La ley establece mecanismos de regularización, y los que no cumplan esos mecanismos saben que se tienen que marchar a su país, que tienen que salir, ésa es la política del Gobierno.