Una extraña para la familia
La chica detenida como supuesta autora de la muerte de la menor Cristina Martín en Seseña es una desconocida para la familia de la fallecida
El padre de la menor hallada muerta en Seseña no conoce a la chica que llamó a su hija, amiga y compañera de instituto de la difunta, y que fue detenida ayer como supuesta autora de la muerte, según ha señalado esta mañana el alcalde el municipio, Manuel Fuentes (IU). Los forenses del Centro Anatómico Forense de Toledo ya han concluido la autopsia del cadáver, que presentaba signos de violencia, y el cuerpo ha sido trasladado el tanatorio municipal de Seseña. La familia ha suspendido cualquier concentración hasta conocer la causa del fallecimiento.
La muerte de Cristina Martín, de 13 años, ha conmocionado a la localidad, que estará de luto oficial hoy y mañana. Cerca de una veintena de familiares han acudido esta mañana al domicilio de los padres de Cristina para mostrar su pesar. Mientras que el padre y el hijo mediano han atendido con entereza, la madre no ha podido evitar los sollozos y el hijo mayor ha tenido que ser atendido por una crisis de ansiedad. La organización del sepelio ya se ha puesto en marcha, aunque todavía no hay fecha.
Una discusión y un golpe fortuito
El cuerpo de la menor fue hallado ayer en una fábrica de yeso derruida, cercana al centro urbano, tras cuatro días de búsqueda. Justo en el momento en que fue identificado, los agentes detuvieron a una chica de 14 años, por su supuesta relación con el caso, según fuentes de la Guardia Civil. La joven declaró durante varias horas en el cuartel. Según su versión, mantuvo una discusión con Cristina y la empujó al suelo. La niña se golpeó y murió en el acto de forma accidental. La investigación se ha centrado en determinar si Cristina murió de forma fortuita, como afirma la detenida. Este extremo tendrá que ser confirmado tras la autopsia, que ha sido practicada hoy.
La niña fue hallada muerta hacia las 12.30, cuando dos agentes de Seguridad Ciudadana comprobaban los alrededores del casco urbano de Seseña. Al llegar a las ruinas de la antigua fábrica de yeso y de una cantera, vieron el cadáver de una niña, cuya descripción coincidía con Cristina. El lugar está en una finca a la que acuden a jugar los niños porque es una zona escarpada y con muchos recovecos, según explicó el alcalde.
El difícil acceso a la zona obligó a que el cadáver lo rescatase el Grupo Especial de Intervención en Montaña (Greim). El cuerpo, que estaba a unos 3,5 metros de profundidad en una fosa con forma de embudo invertido, presentaba signos externos de violencia. Fue extraído sobre las 18.15. En ese momento, la Guardia Civil confirmó que se trataba de la niña desaparecida. El cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense, en Toledo.
Decenas de vecinos se acercaron a la zona del hallazgo, pese al frío que hacía en la zona y que estuvo lloviendo con intensidad toda la tarde. La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Illescas, que estaba de guardia, decretó el secreto del sumario.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.