Las drogas envían a prisión al 80% de los detenidos españoles en el extranjero
Sanidad presenta la campaña sobre las consecuencias del consumo y tráfico de drogas en el extranjero
Ni para sacarse un dinerillo extra ni para divertirse. El consumo o tráfico de drogas en el extranjero conlleva un coste muy elevado: el 80% (1.572 personas) de los españoles detenidos fuera del territorio nacional cargan con este delito en las prisiones internacionales. Unos con sentencia firme y otros a la espera de condena. En algunos países como Estados Unidos o Francia está sancionado incluso con pena de muerte o cadena perpetua. Marruecos es donde se encuentran más ciudadanos de España encarcelados, 230, por motivo de drogas. "Hay que borrar del imaginario social el mito de que los países de nuestro entorno son más permisivos en este sentido", ha asegurado esta mañana la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Carmen Moya, durante la presentación de la campaña 2009.
"Como aquí no me conoce nadie me fumo un porrito o me meto una raya. Total, seguro que aquí no me dicen nada por una pequeña cantidad". Estos pensamientos están detrás de las actuaciones de la mayoría de los arrestados, según Moya. España es de los países con una legislación más permisiva con el consumo de droga. Ésta es una actividad castigada con multas, pero nunca con cárcel. Tampoco es delito penal la posesión de estupefacientes para el consumo propio. Un total de 1.968 españoles están detenidos en 52 países, según datos del ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación. El número de arrestados en el extranjero por tráfico o consumo de drogas ascendió un 3% respecto a marzo de 2008, cuando la cifra de encarcelados por este delito se situaba en un 77%. El perfil, hombres de entre 20 y 30 años de clase social y económica bajas.
"El consulado no les va a sacar las castañas del fuego. Les echaremos una o dos manos pero tienen que ser conscientes de la gravedad de esa situación", ha asegurado Javier Herrera, subdirector general de Protección de los Españoles en el Extranjero. El ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación asiste a los detenidos desde su arresto hasta su vuelta a España, en caso de que esta se produzca. En 2008 destinó cerca de 1,5 millones de euros a ayudar a los presos. Exteriores trabaja codo con codo con el ministerio de Justicia en esta materia. Trasladar a los españoles a cárceles del territorio nacional es una tarea ardua y lenta. Pueden transcurrir hasta tres años y el consulado no puede iniciar los trámites mientras la condena no sea firme. Una vez en España los presos tienen que cumplir la pena impuesta por el país donde cometieron el delito, que suele ser mucho mayor.
Marruecos lidera la tabla de países con mayor número de detenidos españoles por drogas. Pero el núcleo de los arrestados, cerca del 50%, se sitúa en Iberoamérica: Perú, (196), Brasil, (126), Argentina (112), Colombia (83) y Ecuador (76). Los datos también revelan que en Europa está detenido el 25% del total de ciudadanos españoles condenados o pendientes de juicio. Francia con 121 y Portugal con 106 comandan esta clasificación.
"¿En serio, crees que acercarse a las drogas en el extranjero puede ser algo divertido?" es el lema de los carteles que se distribuirán en estaciones de tren y puntos fronterizos y en los que aparece un hombre con un ojo morado y con su cuello expuesto al filo de una navaja con la que le amenaza otro preso, ante las risas del resto de presidiarios tumbados en sus literas en una celda cuyas condiciones de vida parecen pésimas, con ratas y comida en el suelo.
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