Zapatero ofrece a Rajoy un pacto contra ETA sin rectificaciones ni condiciones previas

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, adelantó ayer que los instrumentos para afrontar la nueva amenaza de ETA son la firmeza, la inteligencia y la unidad de los demócratas. Zapatero considera prioritaria la unidad de acción con todas las fuerzas democráticas e insistirá en lograr el apoyo del PP, que hasta ahora no ha tenido. El lunes se reunirá con el presidente del PP, Mariano Rajoy, para tratar de recuperar la unidad antiterrorista.

El jefe del Ejecutivo anunció ayer que buscará el apoyo de Rajoy para un pacto contra el terrorismo a través de un diálogo que debe desarrollarse sin condiciones previas y sin exigencias mutuas de rectificación.

El Partido Popular exige al Ejecutivo el cambio de la política antiterrorista para formalizar un acuerdo

El Gobierno advierte a ANV que "si respeta la ley, no actuará, y si incumple, se actuará con todas las consecuencias"

El presidente descarta la convocatoria de elecciones anticipadas al asegurar que agotará la legislatura

El PP ha exigido al Gobierno un cambio de su política antiterrorista, la ilegalización del PCTV (Partido Comunista de las Tierras Vascas) y de ANV (Acción Nacionalista Vasca) y el regreso a la cárcel del etarra Iñaki De Juana. Rajoy ha exigido a Zapatero una rectificación de la política antiterrorista.

El presidente del Gobierno apunto las alternativas para un acuerdo político contra ETA. "Puede haber un pacto, retomar el pacto o hacer uno nuevo. Pero lo que tiene que haber, sobre todo, es voluntad política", declaró Zapatero durante la conferencia de prensa que ofreció en el palacio de la Moncloa junto al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Con esta propuesta, Zapatero trata de evitar que se repita el fracaso de su intento anterior de recuperar la unidad con Rajoy justo después de que ETA atentara en Barajas y asesinara a dos ciudadanos ecuatorianos.

Zapatero argumentó la necesidad de unidad contra ETA para que "los violentos no saquen provecho de ninguna discusión sobre política antiterrorista entre demócratas". Una tesis, cuya gravedad comparte con el presidente del PNV, Josu Jon Imaz.

"No le voy a pedir nada al PP. Ninguna rectificación y cuidado que han dicho cosas. Sólo le voy a pedir que actúe conforme a lo que sienten los españoles en su piel y en su corazón, se sea socialista, de derechas, se piense como se piense. En esta materia, ante este desafío, con tregua, sin tregua, antes, después, hay que arrimar el hombro y hay que apoyar al Gobierno como yo he hecho", declaró Zapatero.

El presidente recordó que tenía "acreditada" la voluntad política de trabajar por la unidad contra el terrorismo desde que en 2000, justo después de ser elegido secretario general del PSOE, ofreció su apoyo incondicional a José María Aznar en la lucha contra ETA cuando la banda terrorista, tras la tregua que finalizó en noviembre de 1999, volvió a matar. En aquella tregua, una delegación gubernamental se reunió con Batasuna y con ETA para explorar las posibilidades de un final dialogado de la violencia.

Zapatero recordó ayer cómo en noviembre de 2000 propuso a Aznar que el apoyo que le daba en la lucha contra ETA se concretara en un pacto antiterrorista y cómo esa propuesta fue "despreciada" inicialmente por Rajoy, entonces vicepresidente del Gobierno, que acusó al líder socialista de "sacarse un conejo de la chistera".

Semanas después, Aznar se comprometía con Zapatero a suscribir el pacto antiterrorista. El presidente del Gobierno apeló a la "autoridad moral" que le otorga haber trabajado por la unidad contra ETA desde la oposición y haber apoyado al Gobierno anterior para reclamar ahora el mismo trato por parte de Rajoy.

"En aquel momento puse mis convicciones y los intereses generales por encima de cualquier consideración. Cuando estamos hablando de terrorismo no se pueden establecer condiciones ni a jugar a políticas tácticas partidistas, ni de corto ni de medio plazo. Los españoles no admiten el juego partidista en relación con el terrorismo", señaló.

Tras insistir en que desde que es secretario general del PSOE se ha dedicado a unir a los partidos para combatir el terrorismo, se comprometió a seguir trabajando en los próximos días, y el lunes en el encuentro con Rajoy, para que el PP se sume a la unidad contra ETA.

Zapatero enunció los tres principios por los que se guiará el Gobierno ante el nuevo desafío etarra, "los mismos que han estado siempre en la lucha contra el terrorismo". Además de la unidad de los demócratas, se refirió a la firmeza contra el terrorismo.

Durante la conferencia de prensa se conoció la noticia del traslado del etarra De Juana a la cárcel madrileña de Aranjuez para terminar de cumplir su condena. "Hay que cumplir la ley, dentro de la ley y con el margen que da la ley, se toman las decisiones que se consideren más oportunas en cada momento", aclaró.

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, también razonó las nuevas medidas antiterroristas: "Tras la ruptura formal de la tregua por parte de ETA las circunstancias han cambiado y ahora el Estado debe ser firme e inteligente".

En cuanto a ANV, cuya ilegalización reclama el PP por considerarla una careta de Batasuna, Zapatero le dirigió un mensaje claro: "Si se respeta la ley, no se actuará; si se incumple la ley se actuará, con todas las consecuencias".

El tercer principio que enunció fue el de "inteligencia para sumar voluntades a favor de la paz en el País Vasco". Aludió a concertar el apoyo de todas las fuerzas políticas y sociales vascas para aislar a ETA y hacerla desistir de sus propósitos.

El jefe del Ejecutivo descartó que la amenaza de ETA de regresar a los atentados terroristas conlleve el adelanto electoral y afirmó que agotará la legislatura, que concluye en marzo de 2008. E ironizó con una información donde se aseguraba que el Gobierno había anunciado al Vaticano que adelantaría las elecciones: "Seguramente muchos pensarán que el Vaticano es el primer sitio dónde yo iría a comunicar un adelanto electoral".