Los sindicatos mantienen la huelga de cuatro días en Opel
Termina sin acuerdo la reunión con Magna por los planes de despido de la empresa canadiense en la factoría de Figueruelas.-Ambas partes retoman este jueves el diálogo
Sindicatos y representantes de Magna terminaron sin acuerdo su reunión en la sede del Ministerio de Industria en Madrid para abordar los planes de futuro de los nuevos inversores para la planta de Figueruelas (Zaragoza). No obstante, ambas partes retomarán este jueves las negociaciones a petición del ministro Miguel Sebastián.
Los representantes sindicales han sido los que decidieron dar por cerrado el diálogo al considerar que no podían aceptar la oferta de la empresa canadiense, que sigue firme en su propósito de despedir a 1.350 trabajadores de la factoría zaragozana. El desacuerdo también se extiende a la ubicación de las matrices de estampación en las fábricas que construyen la mayoría de las carrocerías de los vehículos.
Ante la falta de acuerdo, los sindicatos mantienen la convocatoria de cuatro días de huelga para los próximos 28, 30 de octubre y 3, 5 de noviembre, a pesar de haber reconocido que en la reunión se produjeron "avances sustanciales".
Los planes de Magna
El fabricante de componentes, que aspira al control del 55% de Opel, marca en la órbita de la división europea de General Motors, propone un excedente laboral de 1.350 de los 7.500 trabajadores de Figueruelas y el traslado de la producción del Opel Corsa 3 puertas a la planta alemana de la marca en Eisenach, así como la supresión de la división de prensas. Asimismo, el consorcio austrocanadiense, que aspira a la gestión de Opel con el banco ruso Sberbank, garantiza a partir de 2013 el 70% de la actual producción de la planta.
Para ello, incluye la fabricación del Opel Corsa en versión de cinco puertas, el nuevo Meriva y ofrece posibilidades respecto a la nueva generación del comercial derivado de turismo Combo, que actualmente también se produce en Figueruelas.
La representación laboral se mantiene en sus posiciones de un excedente laboral inferior al propuesto por Magna y, sobre todo, las garantías de producción, desde ahora hasta 2013, que es donde encuentran los mayores interrogantes. Los sindicatos se apoyan en la alta valoración competitiva que tiene la planta de Figueruelas en el seno de la división europea de General Motors.
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