El Congreso aprueba que el Estado gaste en 2009 más de lo que ingresa pero promete austeridad
El BCE constata las previsiones de que el superávit del Estado está en peligro. -Solbes advierte que el superávit es un "lujo" y niega haber hablado de "crisis"
El Gobierno se ha quedado hoy sólo en el Congreso a la hora de aprobar el techo presupuestario del Estado para 2009, que prevé un aumento del gasto del 5% en línea un año más con el crecimiento del PIB nominal -sin descontar la inflación- hasta los 160.158 millones de euros frente a unos ingresos que subirán menos, un 4,2%, hasta los 165.414 millones. No obstante, esta diferencia no impedirá que la Administración Central cierre el próximo ejercicio en equilibrio presupuestario gracias al aporte de la Seguridad Social.
Además, por primera vez desde la llegada al poder de los socialistas en 2004, el techo de gasto sólo ha recibido el apoyo del PSOE frente al voto en contra del PP, de UPyD y de ERC-IU-ICV, y la abstención del resto de grupos.
Concretamente, las previsiones reflejan que el conjunto de las administraciones públicas (que también incluye a la Seguridad Social, comunidades y ayuntamientos) cierre con un superávit del 0,8% del PIB en 2009, del 0,7% en el 2010 y del 0,8% en el 2011.
Coincidiendo con la aprobación de las cuentas del Estado para el próximo trienio, el Banco Central Europeo ha afirmado en su boletín económico de junio publicado hoy que espera considerables desviaciones a la baja (del 1% del PIB o más) del saldo presupuestario de las Administraciones Públicas de España, lo que implicaría el fin del superávit en el que ha vivido el presupuesto español desde 2005.
En el debate previo a la votación de hoy en el Congreso, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, ha destacado que el hecho de que puedan funcionar los estabilizadores automáticos -es decir, recurrir al superávit para hacer frente a la crisis y reactivar la economía-, es un "lujo" que pocos países pueden permitirse.
Austeridad y gasto social
Además, Solbes ha garantizado que la "austeridad" de las cuentas del Ejecutivo no impedirá cumplir el compromiso "prioritario" de financiar las medidas sociales, la inversión en infraestructuras y el apoyo a la educación e investigación necesario, en opinión del Gobierno, para "atenuar las rigideces" del sistema productivo, reorientar el modelo económico y recuperar la tasa de crecimiento potencial español del 3% a partir de 2010.
Solbes ha explicado que las menores tasas de crecimiento llevarán a un "deterioro" del saldo presupuestario, por lo que se impulsará la actividad económica a través de una gestión "austera" del gasto público, "con la única excepción" de las partidas antes mencionadas para reorientar el modelo de crecimiento. "Las dificultades a corto plazo no deben desviarnos de nuestros objetivos", ha señalado tras reiterar que la mala coyuntura que atraviesa España responde en su mayoría a "factores de procedencia externa".
Entre estos, Solbes ha citado el repunte de la inflación por el precio del petróleo y los alimentos así como ha apuntado que las turbulencias de los mercados internacionales han recrudecido, ya en el plano interno, el ajuste en el sector de la construcción residencial "más rápido de lo inicialmente esperado".
Asimismo, ha destacado el impacto del paquete de medidas económicas aprobado en abril por el Gobierno, que llevarán a una inyección a la economía de 10.000 millones de euros y una cantidad "casi equivalente" en el año próximo, cuyos efectos empezarán a percibirse a partir de junio.
Acerca del lapsus que cometió ayer al mencionar la palabra crisis en el Congreso tras una pregunta del líder de IU, Gaspar Llamazares, Solbes ha matizado hoy que en realidad estaba hablando de cómo "prepararnos para la crisis", pero que "en ningún momento" habló de crisis.
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